COMO QUE NO AL CESARISMO; Ud. ya me entiende.

En mi anterior post entré en el mundo de Roma con Catilina y Cicerón a cuenta de historias sin parecido con el felón; y mencioné, de soslayo, a Julio César. Dejé caer que -a Cayo Julio César- le molaba lo de ser un dictador, pero no sé si quedó claro. De ahí que, ahora insisto.

Y hoy insisto, en Cayo Julio César, porque constato que hasta cae bien a muchos -a mí, nunca- y se le tiene en demasiada alta estima: deificado por Octaviano y magnificado por un Plutarco -que lo comparó con el mismísimo Alejandro Magno-, William Shakespeare hizo obra del magnicidio (aunque el protagonista fuera Bruto y todo se jugara a tres bandas entre el honor, el patriotismo y la amistad); es un filón literario y siguen apareciendo libros -Santiago Posteguillo se hizo muy ameno nada más pasar la pandemia con “Roma soy yo” (2022)- quedando inmortalizado también en el cine donde se le ha creado un aura especial en innumerables películas (arrancando con ‘Cleopatra’ en 1934 y llegándonos hasta 2002 en que Jeremy Sisto -el Jubal de la serie FBI- comparte pantalla con históricos como Richard Harris y Christopher Walken) que terminan por hacernos, al personaje, más afín -como más de andar por casa- y conviene sacar a pasear la realidad del mismo no sea que, con la que está cayendo en esta Hispania nostra (islas adyacentes y plazas de soberanía) me salga alguno a magnificarlo aún más y a tomarlo como modelo.

Como no hay mucha gente de leer (triste, pero entre las últimas generaciones no más de 145 palabras) y por lo general el país es más de ver (ahí está la vieja del visillo), recomiendo encarecidamente dejarse los ojos en el documental de la BBC Julius Caesar: The making of the dictator (2023) que es la historia de cómo Julio César -¡atención!- desmantela cinco siglos de democracia romana en tan sólo 16 años de mangoneo y asesinatos, y que Movistar+ ha dulcificado como Julio César: El ascenso del Imperio romano, borrando lo de “la creación de un dictador” porque César, Julio, es una figura que de cara a la galería cae bien. Y no estamos para que le salgan émulos e imitadores.

‘La ambición convertida en tiranía’ sería una buena definición para presentar a neófitos el personaje; y el documental tiene las mejores referencias a la hora de confeccionar la investigación. Y son tres episodios de nada.

Dicho esto, a lo que voy hoy.

Por ello, comenzando por el título del post: he colocado la palabra “cesarismo” en el título; deriva de César y la traigo a colación porque define los hiperliderazgos en política y se refiere a la fase en que el poder público se concentra en una sala persona y viene en recuerdo de este Cayo Julio César. Abundan ahora estos personajes en este mundo conectado y envenenado por la crispación; y el término arranca en los escritos de dos tipos, digamos, singulares: Pierre Joseph Proudhon, el padre del anarquismo, y Karl Marx, el padre del marxismo. A ellos debemos el análisis e interpretación, con lo que… podemos concluir que el cesarismo es una forma de tiranía.

Y, así las cosas, casi 2.000 años después de su muerte, Cayo Julio César sigue siendo el arquetipo de audaz líder de poder absoluto; sí, pero un líder monstruoso.

Por cierto: nunca recibió el título de emperador. El Senado romano solo le nombró dictador y dictador perpetuo. Por ello, señores de Movistar+, el título del documental de la BBC está fetén.

Nació un 12 o 13 de julio del año 100 aC -o del año 102-, en una época en que Roma estaba gobernada por familias aristocráticas desde el Senado[1]; creció bajo la influencia materna -Aurelia Cota[2]– que le infundió como premisa fundamental que su papel en la vida era honrar a la familia Julia, la suya. Murió, esa fecha sí la tenemos clara, un 15 de marzo del año 44 aC, asesinado.

Posiblemente sea Cayo Julio César uno de los gobernantes de la Antigüedad clásica más célebres de toda la Historia de la Humanidad; lo que no quita que fuera un mafioso de tomo y lomo.

Su nombre es ya una señal de notoriedad. La Tria nomina romana -praenomen, nomen y cognomen- refería un nombre propio y dos hereditarios a cada ciudadano patricio romano. Los que no eran patricios con dos iban arreglados.

El praenomen era como nuestro nombre de pila; el nomen salía del clan y el cognomen de una particularidad, por lo general física, del hombre que inició la rama familiar del clan y que ya les ligaba a todos. Así la tria nomina de Gaius Julius Caesar es Cayo, de la gens Julii (Julia) que tuvo un antepasado de larga cabellera: caesaries (melena), lo que dio lugar a César. Y en nuestro personaje, esto de César -melenudo-, sostienen por ahí, chirriaba por su calvicie. Vanidoso y autorizado por el Senado, podía lucir la corona de laurel de las victorias siempre que quisiera y así disimular la calvicie.

Y como patricio o elevado en el cursus honorum[3] podías llevar añadidos incluso un cognomen exvirtue (por hazañas) y hasta un agnomen, otorgado tras una hazaña. Para esta singularidad tenemos el ejemplo de Publius Cornelius Scipio Africanus, Publio Conelio Escipión (el primer antepasado se apoyaba en un batón) “el africano”, por su campaña del 203 aC que consiguió el dominio sobre Cartago y la paz en la II Guerra Púnica.

Y, volviendo al personaje, digamos que Cayo Julio César, demostró ser un hábil y aguerrido militar –ya en su primera acción ganó una corona civilis[4]-, buen estratega, que como político estuvo a punto de convertirse en el primer emperador de la República; pero se quedó en dictador. El temor entre los propios senadores de que alcanzara el poder absoluto puso en marcha una conspiración que acabó con su vida a manos, al menos, de Marco Junio Bruto y Cayo Casio Longinos; porque 23 puñaladas son un montón.

Tras el magnicidio, el testigo del poder de César lo recibió su sobrino-nieto Octavio, que con el tiempo se convertiría, este sí, en el primer emperador, Augusto.

Como él mismo, Cayo Julio César, se escribía los panegíricos propagandísticos de sus batallas[5] y dirigía cartas al Senado, tenemos múltiples ejemplos de su proceder diario en campaña o en torno a la vida. Por otros sabemos de sus andanzas -buenas, malas, peores y terroríficas- o de su romance con la reina egipcia Cleopatra. En realidad, tenemos miles de episodios que alimentaron su leyenda, así como abundantes aspectos controvertidos de su vida, pero esto no es Sálvame.

Lo que sí tenemos muy clara es su tremebunda ambición de poder: cuando César se convirtió en dictador perpetuo muchos senadores temieron la restauración de la pretérita monarquía fundacional, y por ahí no pasaban.

César, desde el principio, abrazó la ideología populare de Roma que se vendía como la que democratización del gobierno y la que conseguía más derechos para la plebe[6]; pero ansiaba el poder con el que oponerse a los optimate -la oligarquía aristocrática dominante- que se pasaban todo el tiempo reclamando su superioridad y el peso de la tradición labrada a través de una historia de victorias.

Para darle morbillo a este post y sin faltar nada a la verdad, Cayo Julio César, que a pesar de su linaje[7] no estaba -ya desde tiempos de su padre- en posición relevante -antes del 76 a.C. César era un apellido como cualquier otro apellido patricio romano-, se inició en la vida pública en el sacerdocio romano (año 73 aC) cuando consiguió, a la muerte de un primo de su madre -Cayo Aurelio Cota-, ser nombrado flamen dialis[8] y conforme a la norma y nuevo rango obtuvo privilegios; hasta se casó con una patricia, Cornelia, hija de un miembro influyente de los populare, Lucio Cornelio Cinna.

Cuando el optimate Sila (Lucio Cornelio Sila Félix) se autoproclamó dictador (81 y 80 aC) y purgó a los populare, César no tuvo más remedio que exiliarse. Salió de Roma, perdió su cargo y la dote de su esposa. Entonces, sin medios, se unió al Ejército y fue encuadrado como cuestor -magistrado financiero- del gobernador de la Hispania Ulterior, Lucio Fufidio. Volvió a Roma cuando las condiciones fueron más favorables -a la muerte de Sila- y pasó a desempeñar diversos cargos legales y civiles. Como abogado (orador) no se le dio nada mal, pero él quería más.

Buscando mejorar en oratoria, retórica y filosofía se embarcó en la aventura -un máster, diríamos hoy- de ir a Rodas (74 aC, según Seutonio; Plutarco lo refiere en otro momento). A punto de alcanzar la isla fue secuestrado por piratas y llevado a la isla de Farmakonisi[9]. Pidieron rescate por él. Aquí ya tiene un episodio novelesco que cuenta que se enfadó al saber la poca cantidad en talentos de plata que reclamaban por él los piratas, subió la cifra al doble y prometió que en ser liberado iría a por ellos. Y así fue.  Sabemos que Marco Junco, gobernador de la provincia de Asia Menor pagó el rescate y nada más estar en libertad, en Mileto, Cayo Julio César organizó una flotilla mercenaria, asaltó el refugio de los piratas, se hizo con el botín que tenían de los rescates cobrados y ordenó degollarlos. Vamos, que por el 74 aC el tal Cayo Julio César ya debía ser un personaje importante -porque si no, a buenas horas iba el gobernador de una provincia a pagar por su rescate- y vengativo.

De vuelta a Roma, fue elegido tribuno militar y a la muerte de su esposa Cornelia casó con Pompeya, nieta de Sila, lo que le aupó entre la clase dirigente; y trabó amistad con Marco Licinio Craso, el hombre más rico de Roma, que financió su carrera: edil[10] (65 aC), Pontifex maximus[11] (63 aC), pretor[12] (62 aC) y propetor[13] de Hispania (61 aC), tras divorciarse de Pompeya por una infidelidad nada clara, pero ahí estaba su madre, Aurelia Cota.

Por cierto, como contábamos en el último Post, la conspiración de Catilina se produjo entre los años 65 y 63 aC… que ahí lo dejo, con un Cayo Julio César entre edil y Pontifex maximus…

En Hispania demostró su liderazgo y consiguió estabilidad para la provincia. Volvió a Roma en el 60 aC con honores y se unió a Cneo Pompeyo Magno y Marco Licinio Craso logrando el poder (60-53 aC) -en lo que se ha dado en llamar desde el siglo XIX Primer Triunvirato-, casó con Calpurnia (59 aC) y a su vez, casó a su hija Julia (habida de su primera esposa, Cornelia) con el mismísimo Pompeyo… Y los tres gobernaron e hicieron negocios en Roma. En fin, las ideas y los métodos de César con el dinero de Craso y los soldados de Pompeyo… que todo hay que contarlo.

En la primavera del año 58 aC, harto de compartir el poder y parte en busca de gloria y dinero. Se arrancó en una campaña contra los helvecios[14] a los que masacró en Bibracte (29 de junio del 58 aC) y ya de paso, y sin permiso del Senado, inició la Guerra de las Galias que le llevó hasta la victoria final, el año 52 aC. sobre Vencingétorix[15], gracias a la superioridad logística, estratégica y armamentística del ejército romano. No fue un paseo militar, pero al final Cayo Julio César había extendido las fronteras de la República romana hasta Europa central por el Este y noreste, y había saltado hasta Britania. Además, se había convertido en uno de los hombres más ricos y poderosos del mundo hasta entonces conocido. El caso es que, combinando velocidad y agresividad, César, con un ejército de 40.000 soldados, consiguió derrotar a una coalición que, se estima, superaba los 300.000 guerreros. Mucha agresividad para lograrlo.

El año 55 aC, por ejemplo, fue muy intenso. Las tribus germánicas rebeldes cruzaron el Rin, la nueva frontera del Imperio romano. Animado por tribus aliadas, como los ubios[16], Cayo Julio César mandó construir un puente[17] de madera sobre el profundo y caudaloso río, según él mismo en tan solo 10 días, y los enemigos, ante tal demostración de poderío, huyeron. Una razzia de castigo y la zona quedó expedita. De regreso, desmanteló el puente que, se cree, pudo ser construido bajo la dirección de Marco Vitruvio Polión[18]. Y sus legiones marcharon a la conquista de Britania, ese mismo año y el siguiente (54 aC). Por precipitación en la planificación y desconocimiento de las condiciones, perdió parte de su flota y a punto estuvo de quedar atrapado en Britania, pero la suerte no le abandonó y pudo regresar al continente con la mayor parte de su ejército. En el 53 aC. Cayo Julio César repitió la historia en la frontera de Germania y cerca de donde construyó el primer puente construyó un segundo puente[19] e instaló en territorio galo, en defensa del puente, un fuerte y una torre de cuatro pisos de altura con la finalidad de disuadir nuevas incursiones en territorio galo por parte de los pueblos germánicos. Y funcionó.

Derrotado Vercingétorix (52 aC) aún hubo de emplearse a fondo Cay0 Julio César en sofocar rebeliones en los años 51 aC y 50 aC, quedando, a partir de entonces, el territorio pacificado. Conociendo la situación favorable en las Galias, Pompeyo Magno insta al Senado a reclamar la vuelta a Roma de César, pero Marco Antonio el triunviro impide que la votación se hiciera efectiva.

Y mientras Cayo Julio César conseguía gloria, fama y dinero, en Roma, muertos Craso y su hija Julia, en un parto, Pompeyo se hizo con el poder y celoso de la fama, gloria y riquezas acumuladas por César, volvió a las andadas e hizo que el Senado reclamara (finales del año 48 aC) el regreso del conquistador de las Galias. Lo que escondía esta segunda requisitoria que sí se hizo efectiva era la pretensión de que una vez en Roma sería procesado  por sus acciones y desmanes de cuando fue pretor (62 aC).

Sabedor del juicio que le esperaba, inmensamente rico y triunfador decidió declarar la guerra a Roma, lo que implicaba una nueva guerra civil, y cruzó, en la madrugada del 11 de enero del 49 aC, el pequeño río Rubicón[20] al frente de sus legiones y marcharon los 240 kilómetros que le separaban de Roma.

Es aquí cuando se cuenta que pronunció una frase muy especial. Seutonio[21] sostiene que fue la célebre de “Alea iacta est” (la suerte está echada); Plutarco[22] cuenta que recurrió al dramaturgo ateniense Menandro y dijo, en griego, “¡Que empiece el juego!”. Y empezó, porque las aldeas y lugares que iba atravesando le recibían con vítores y vituallas en detrimento de Pompeyo.

Así el 16 de enero, ante el avance de las legiones de César, buena parte del Senado abandona Roma con Pompeyo camino de Brindisi. El 20 de febrero César pone sitio a Brindisi, en el tacón de la bota itálica; el 22 Cneo Pompeyo Magno embarca y huye a Hispania. Cayo Julio César vuelve sobre sus pasos y entra en Roma el 29 de marzo, nombrando a Marco Emilio Lépido pretor. Refuerza la ciudad, incauta el tesoro público y marcha a Hispania en persecución de Pompeyo tras ordenar la invasión de Sicilia y Cerdeña. Entre el 2 y el 25 de agosto del 49 aC consigue la rendición de las tropas pompeyanas, en Hispania (en Ilerda, Lérida) no pudiendo impedir que Pompeyo, que dominaba el mar, huyera a Grecia. César vuelve sus pasos por tierra.

De nuevo en Italia, cruza el Adriático sorprendiendo a la flota pompeyana al desembarcar en las costas de lo que hoy es Albania, adentrándose hacia Macedonia en persecución de Pompeyo (que le iba ganando en escaramuzas) hasta llegar a la batalla final en Farsalia, en el centro Grecia, el 9 de agosto del año 48 aC. Pero aún Cneo Pompeyo Magno consiguió escapar a Egipto, tras un largo periplo costero; el rey egipcio le debía el estar en el trono. Pero Ptolomeo XIII prefirió a Cayo Julio César y aunque invitó a Pompeyo a llegar a Egipto, en la misma playa, un esbirro, Lucio Septimio, lo asesinó el 28 o 29 de septiembre del 48 aC.

Cayo Julio César desembarcó en Alejandría el 2 de octubre del 48 aC, siendo recibido, como presente de bienvenida, por la cabeza y el anillo de Pompeyo a quien, a pesar de todo -amigo y yerno- tenía pensado perdonar. Lejos de premiar al egipcio, decretó la ley marcial, depuso a Ptolomeo XIII y apoyó a Cleopatra VIII en sus reivindicaciones al trono. Hubo, cómo no, un levantamiento de soldados y pueblo egipcios frente a los pocos más de 3.000 legionarios que César había podido llevar en aquella expedición de castigo. Se organizaron y resistieron hasta la llegada de una legión, procedente de Asia Menor, en diciembre del 48 aC, y de las tropas de Mitrídates de Pérgamo, con los refuerzos judíos de Antípater, padre de Herodes el Grande (el mundo del siglo I aC es un pañuelo), en marzo del 47 aC. Ya con tropas de refresco, César derrotó a los egipcios en la batalla del lago Mareotois en el mes de abril. En mayo hizo su ‘célebre’ crucero por el Nilo con Cleopatra y sabiendo de problemas por todos los puntos cardinales –el ponto, Tunicia o Roma-, en el verano del 47 aC reemprendió su marcha guerrera.

Farnaces, hijo de Mitrídates -que le había ayudado meses antes en Alejandría- se había levantado en armas contra Roma; y a la Capadocia que se fue César para derrotarlo y acuñar su segunda gran frase: “Veni, vidi, vinci” (vine, vi, vencí). Y de allí, vuelta a África porque los restos de los apoyos de Pompeyo, personificados en Quinto Cecilio Metelo Escipión y Marcio Porcio Catón habían reunido 10 legiones en Túnez y contaban con el apoyo del rey de Numidia y sus elefantes de guerra.

Estratega irredento, César convenció al rey de Mauritania de atacar Numidia, por lo que Juba I reclamó las tropas cedidas a Metelo y Catón. Y así, en febrero del 46 aC, César dio batalla a los conjurados en Tapso (Ras Dimas, Túnez) que sin los refuerzos númidos fueron derrotados. En el mes de julio, la provincia estaba pacificada y Numidia incorporada al imperio.

Al final del verano del 46 aC, Cayo Julio César regresa más triunfal que nunca a Roma; el Senado lo proclama dictador perpetuo. Las celebraciones y desfiles que organizó, se cuenta, no tuvieron precedentes. César presidía el Senado como cónsul vitalicio.

Pero el año no iba a terminar bien, los hijos de Pompeyo, tras lo de Túnez, se habían refugiado en Hispania y promovieron una revuelta. En diciembre estaba de nuevo César en la península. En la primavera del 45 aC, en los llanos de Munda, cerca de Osuna (Sevilla), al igual que en aguas frente a Cartagena, las tropas y navíos de César acabaron con la última resistencia pompeyana, con lo que se dio por terminada la guerra civil que él había desatado con el cruce del río Rubicón.

César, magnánimo, camino de Roma fue repartiendo cartas de ciudadanía romana a las ciudades de Hispania y la Galia allá por donde pasaba; y aumentó el número de senadores (de 300 a 900); y reformó todas las magistraturas aumentando su número. Conseguía así más adeptos y, en consecuencia, más poder frente a un Senado que ya le había nombrado, como dije, dictador.

Creó colonias en todos los territorios y dio tierras a todos los veteranos de las legiones; aumentó el subsidio de grano a los más pobres, redujo impuestos y anuló tasas arancelarias (abolió el sistema tributario); dictó nuevos poderes y leyes (Ley Julia, Ley Agraria, Ley de Ciudadanía) y estableció un nuevo orden político; creó un ambicioso urbanismo público, mandó construir el Foro de Caesar, un templo en el Campo de Marte e incluso desviar el curso del Tíber… creó la primera especie de policía en las ciudades e implantó un calendario que encargó al astrónomo Sosígenes en Egipto y se implantó en el calendario juliano[23] el año 45 aC que estuvo vigente hasta el calendario promulgado en 1582 por el papa Gregorio XIII -calendario Gregoriano[24]– que fue entrando en vigor con el paso de los siglos.

A pesar de la prosperidad de Roma en aquellos días, una importante facción del Senado estaba contra sus medidas y decidieron cortar por lo sano. César había movilizado legiones para una nueva campaña militar, en esta ocasión contra Partia (Persia); y tres días antes de salir, el 15 de marzo del 44 aC en la Curia del Teatro de Pompeyo, en el Campo de Marte, donde el Senado celebraba sus sesiones, junto a la estatua de Pompeyo. Marco Junio Bruto[25] y Cayo Casio Longino[26], al menos[27], le asestaron 23 puñaladas. Murió. Su primo y mano derecha Marco Antonio[28] vengó, aliado con Octaviano[29], su muerte y derrotó a los conspiradores en la Batalla de Filipos (42 aC) y en el 37 aC llevó a cabo la última voluntad de César: atacar Partia. (la campaña pártica no salió bien, pero Marco Antonio regreso con su ejército prácticamente intacto).

Octaviano, al final, se enfrentó a Marco Antonio (que se alió con Cleopatra VII) y lo derrotó en Accio (31 aC). Tras las muertes de Marco Antonio y Cleopatra, Octaviano ordenó asesinar a Cesarión, se proclamó primer emperador de Roma (16 de enero del año 27 aC) cuando el Senado le autorizó a usar el cognomen de ‘Augusto’ y deificó a Cayo Julio Cesar.

A pesar de esta ‘bonita’ historia de Cayo Julio César, en toda ella sólo hay dos denominadores comunes: sangre y ambición sin igual. Siempre fue brutal, despiadado, inmoral y tirano; superficial y vanidoso, como lo describe Peter Connolly[30]. Muchos historiadores le consideran un genocida a gran escala en la misma medida que despierta fascinación otros. Recurrió constantemente a la violencia mafiosa, destaca Keith Hopkins[31]. Cicerón le acusó de crímenes brutales.

Todos los que han pasado por este post, hijos de Roma, fueron como la propia historia del imperio: en ocasiones magnánima, pero siempre cruel y despiadada; Todos ofrecieron el anverso y el reverso de la libertas[32], pero César llegó a negociar y pactar como ningún otro, pero las más de las veces destruyó y castigó al máximo nivel.

En palabras de Mommsen[33], César trascendió la oposición entre democracia y oligarquía en una suerte de absolutismo monárquico; lo suyo fue una perversión –hoy diríamos: populista- de la propia democracia”.

Cayo Julio César siempre me produjo temor y nunca le encontré esa fascinación que aseguran tiene el personaje. Sigo viéndolo astuto, calculador, sin escrúpulos, preso de una ambición desmedida -no cejó en su empeño hasta convertirse en dictador vitalicio- un mal bicho que acabó con cinco siglos de tradición republicana; pero le salió bien porque en aquellos día no existía en torno a Roma ningún pueblo -ni ningún líder- que pudiera, al menos, rivalizar con él.

La cuestión principal a la hora de analizar su vida es ver cómo alcanzó y detentó el poder a lo largo de 16 años, porque de estas lecciones se aprende. Y todos los que leo coinciden: al final, no hubo otra vía -para acabar con la tiranía-, que matar al tirano.

En esta historia no hay que olvidar la violencia que ejerció sin titubear directamente o a través de bandas de matones que enviaba a intimidar o asesinar a sus enemigos políticos. Su capacidad de desatar el caos para presentarse como la única salvación es portentosa. Además, actuó siempre en plan tirano de día, mujeriego de noche -moralista en público, libertino en privado- para quitarse el estigma de un persistente rumor de una posible aventura de juventud con el viejo rey de Bitinia[34].

Eso sí, impulsó las infraestructuras y se hizo muy popular por asegurar el subsidio de grano a los menesterosos y a medio imperio así como por ofrecer siempre grandes espectáculos al populacho. “Generoso en gastos. Compraba fama a gran precio[35]; “gastaba mucho dinero en satisfacer sus pasiones[36]. Pan y circo, que tras él han utilizado miles de dictadores de toda ralea.

Económica y socialmente, entendía el Senado, la situación era insostenible.

Cayo Julio Caesar fue un “populista capaz de corromper un Estado entero[37].

PD. “No saber qué ha ocurrido antes de nosotros es como ser incesantemente niños” (Marco Tulio Cicerón)


[1] Institución consultiva de la época de la Monarquía que comenzó con 30 senadores patricios (patres) y se consagró en 300, aunque llegó a los 900 en la dictadura de Julio César; llegó a tener poderes económicos, políticos, militares y religiosos. Su influencia cambió al derrocamiento del séptimo y último rey, Lucio Tarquino el Soberbio (509 aC). Durante la República (509-27 aC) vivió su época de esplendor; especialmente en la llamada época Tardorrepublicana (168-27 aC). Con los césares menguó su protagonismo, aunque tuvo capital importancia hasta el final del Imperio. El edicto de Tesalónica (27 de febrero del 380 dC), por ejemplo, convirtió el cristianismo en religión oficial.

[2] De la familia Aurelii, hija del cónsul Lucio Aurelio Cota, tribuno de la plebe en 154 aC, con Servio Sulpicio Galba. Influyó decisivamente en la educación y la vida de su hijo Cayo Julio César. A través de su hija menor, Julia (de igual nombre que su hermana) es la matriarca de la dinastía Julio-Claudia, que se nutre de los cinco primeros emperadores romanos emparentados con Julio César: Augusto, Tiberio, Calígula, Claudio y Nerón. Esta dinastía gobernó el Imperio romano del 27 aC. al 68 dC.; fecha en que Nerón, se suicidó. Estos cinco emperadores estaban unidos, por matrimonio y adopciones, con las gens Julia y Claudia.

[3] Cursus honorum era el nombre que recibía la carrera política o escalafón de responsabilidades públicas en la Antigua Roma. Se instauró durante la República y siguió existiendo durante el imperio. El cursus honorum establecía el orden y la jerarquía por la que se regían las magistraturas romanas, así como el modo de cumplirlas. Dicha carrera quedó regulada en el año 180 a. C. por la Ley Villia Annalis El cursus honorum senatorial constaba de una fase preparatoria con varias especialidades (vigintiviratus), seis magistraturas ordinarias (cuestura, edilidad, tribunado, pretura, consulado y censura) y una extraordinaria (dictadura).

[4] Distinción que se otorgaba al militar que salvaba la vida a otro u otros soldados en la batalla. Consistía en una corona de ramas de roble con sus hojas y bellotas. Además, otorgaba al poseedor unos ciertos privilegios. Dentro de la jerarquía de las recompensas militares, ocupaba el segundo rango; el primero estaba reservado a la corona gramínea.

[5] Comentarii de Bello Civile (la guerra civil, 49-45 aC, contra Pompeyo Magno en 3 tomos), Comentarii de bello Gallico -7 libro para su descripción de la Guerra de las Galias en tercera persona- y los llamados Tria Bella: la Guerra de Alejandría (De bello alexandrino), la Guerra de África (De bello africo) y la Guerra de Hispania (De bello hispaniensi); sin embargo, existe un consenso generalizado acerca de que la autoría de estos últimos no puede atribuirse en su totalidad a César. Incluso publicó poesía que ha llegado a nuestros días por referencias de Seutonio o San Isidoro de Sevilla

[6] Los hijos de la tierra; los que no tenían gens, es decir, los que no podían remontar su origen a las primeras familias que míticamente fundaron Roma, con Rómulo, y que se denominaban patricios (patres, patriciī); y, al menos inicialmente, no formaban parte del Populus Rōmānus ni de ninguna de sus tribus o curias. Su principal obligación era el servicio militar.

[7] Cayo Julio César era el vástago de una antigua familia patricia cuyos orígenes míticos se remontaban hasta Eneas, el héroe troyano, y la mismísima diosa Venus… que eso sí que era un árbol genealógico y no el mío que me lleva hasta el oso que mató a Favila.

[8] El flamen Dialis era el sacerdote supremo de Júpiter, uno de los tres flamines mayores (Flamen quirinalis, Flamen martialis y Flamen dialis) y, por lo tanto, un cargo importante en la religión del Estado romano. Cuando el puesto quedaba vacante, tres personas descendientes de patricios cuyos padres estuvieran casados de acuerdo a la ceremonia del confarreatio (matrimonio tradicional romano) eran nominadas por los Comitia. Uno de los tres era elegido (captus) y consagrado (inaugurabatur) por el pontifex maximus. De los tres mayores, el más importante es el flamen dialis, y tanto él como su esposa, la flamínica dialis, estaban sujetos a muchas prescripciones religiosas. Poseían el privilegio de la sella curalis, silla curul (asiento oficial de los altos magistrados romanos: cónsules, pretores, procónsules, propretores, dictadores, ediles curules, censores y, en época imperial, el emperador). A su vez, el dialis es el único con escolta militar.

[9] A tan solo 12 km de la costa peninsular turca, es una islita de apenas 4 km2 de superficie. Abundaban en ella las plantas medicinales e Hipócrates la visitaba con frecuencia. Plutarco cuenta que el joven Julio Caesar, en el marco de la guerra entre su tío Cayo Mario y Sila, durante un viaje a Bitinia, fue secuestrado por piratas y estuvo prisionero allí 38 días.

[10] Funcionario de la República romana que mantenía las calzadas, supervisaba el suministro de cereales y agua y organizaba los juegos.

[11] Título que se otorgaba en la Antigua Roma al sumo sacerdote del colegio de pontífices (collegium pontificum) y era el cargo más honorable en la antigua religión romana.

[12] Importante cargo militar y civil solo superado en importancia por el cargo de cónsul.

[13] Gobernador de una provincia.

[14] Confederación de tribus celtas,​ que vivían en la zona comprendida entre el alto Rin, el Jura suizo, el lago de Ginebra y los Alpes.

[15] Prefiero, para escenificar ese momento, la viñeta de Albert Uderzo al cuadro de Lionel Roger que se exhibe en el Crozatier.

[16] Tribu germánica de la orilla derecha del Rin, en torno a la ciudad de Colonia (Oppidum Ubiorum, la ciudad de los Ubis). Fuertemente romanizados desde el principio hasta el punto que Agripina, la mujer del emperador Claudio (Tiberio Claudio César Augusto Germánico), era de allí y el emperador cambió el nombre por el de Colonia Claudia Ara Agrippinensium… y con Colonia/Khol se ha quedado.

[17] Hay evidencias arqueológicas de la construcción de un puente sobre el Rin a la altura de Neuwied, a unos 12 km al noroeste de Coblenza; una zona donde la profundidad del río sería de hasta 9 metros.

[18] Arquitecto, escritor, ingeniero y tratadista romano del siglo i a. C. Arquitecto de Cayo Julio Caesar durante su juventud, al retirarse del servicio en el Ejército, entró en la arquitectura civil, siendo de este periodo su única obra conocida, la basílica de Fanum (Italia). Es el autor del tratado más antiguo sobre arquitectura que se conserva y el único de la Antigüedad clásica, De Architectura, en diez libros (probablemente escrito entre los años 27 a. C. y 23 a. C.). Marco Tulio Cicerón, que se las tuvo tiesas con Cayo Julio Caesar, sostiene que el autor de los puentes fue un tal Mumarra…

[19] A unos 2 kilómetros al norte, posiblemente junto a la actual Urmitz.

[20] Río del nordeste de Italia, de apenas 35 km desde nacimiento a su desembocadura en el Adriático, que discurre por la provincia de Forlì-Cesena, por la Emilia-Romagna.

[21] Cayo Seutonio Tranquilo (69-140); historiador y biógrafo romano durante los años de los emperadores Trajano y Adriano. Su obra más importante es De vita Caesarum (Vidas de los doce césares), en las que biografía a los gobernantes de Roma desde Julio César hasta Domiciano.

[22] Plutarco de Queronea o, tras serle concedida la ciudadanía romana, como Lucio Mestrio Plutarco (50-120); historiador y filósofo moralista; autor de Bioi parallēlloi (Vidas paralelas) biografías de griegos y romanos famosos, elaborada en forma de parejas con el fin de comparar sus virtudes y defectos morales comunes. Empareja a 26 personajes de cada nación; Alejandro Magno con Julio César, Teseo con Rómulo o Demóstenes con Cicerón.

[23] El nuevo calendario se implantó en el año 46 aC con el nombre de Julius y mucho después de Juliano, en honor a Julio César. Únicamente en ese año, se contaron 445 días, en vez de los 365 normales, para corregir los desfases del calendario anterior, y fue denominado “el último año de la confusión”. En el 44 aC se acordó que todos los años constaran de 365 días, y cada cuatro años se contarían 366. Estos años se llamarían ‘años bisiestos’, porque en ellos añadían un 24 de febrero. Según el cómputo del tiempo, el 24 de febrero se llamaba ‘día sexto’ antes de las kalendas de marzo (ante diem sextum kalendas martias), de manera que el 24 de febrero repetido se llamaría ‘bis sextum’. (de ahí ‘bisiesto’). En el año 44 aC los pontífices romanos decidieron considerar un año bisiesto cada tres años ordinarios, en vez de cada cuatro. Tiempo después, se dieron cuenta del desfase provocado hasta el año 10 aC y se corrigió en el 8 dC por orden de César Augusto, quien ordenó excluir el día adicional de cada año bisiesto, durante 36 años, es decir, hasta el año 44 dC.

[24] El Imperio español (en todas sus posesiones) lo adoptó el primero en 1582, seguido de Italia, Portugal y Francia. Con el correr de los años se fue imponiendo en el mundo: Inglaterra (1752), Japón (1873), China (1912 [1929]), Turquía (1914 [1926]), Rusia (1918) o Grecia (1923)

[25] Hijo de Servilia, que fue amante de César; militar y político romano por quien César sentía predilección. Seutonio cuenta que, al clavarle la daga, César, herido de muerte, le espetó (en griego): ¿Incluso tú, hijo mío?

[26] Cuñado de Marco Junio Bruto, militar y político, fue el organizador del magnicidio.

[27] Lucio Tilio Cimbro parece ser que sujetó a César para que Publio Servilio Casca pudiera clavarle la primera daga. En la pomada estaban del orden de 40 personas y la mayoría, tras el magnicidio, se refugió en el Templo de Júpiter de la colina del Capitolio; lugar sagrado. Hasta allí acudió Cicerón -el que habla de 23- a felicitarles. El 17 de marzo, fueron amnistiados a cambio de que aceptaran el Corpus legislativo pendiente de César, la llamada Acta Caesaris.

[28] Mano derecha y compañero de armas de César, tras su asesinato se hizo con el tesoro y los papeles de César y casi de inmediato lanzó al pueblo romano contra los asesinos del dictador, buscando monopolizar el poder. Terminó integrado en el Segundo Triunvirato (43-39 aC) con César Octavio y Marco Emilio Lépido en una guerra civil en la que acabó con los asesinos de César (Batalla de Filipos; 42 aC) y entró en relaciones con Cleopatra. Apartado Lépido, Octavio y Maco Antonio se declararon la guerra; derrotado en Actium (31 aC), al año siguiente se suicidó.

[29] Cayo Octavio (27 aC – 14 dC), sobrino nieto de Julio César, se convirtió en su heredero tras el asesinato (44 aC). Un año después, en 43 aC, conformó junto con Marco Antonio y Lépido el Segundo Triunvirato. Como triunviro, Octavio gobernó Roma y la mayor parte de sus provincias. Con la desaparición del Segundo Triunvirato, Octavio restauró los principios de la República, con lo que el poder gubernamental pasó a establecerse en el Senado, aunque en la práctica él retenía su poder autocrático, por ley, con plenos poderes. En 27 aC el Senado concedió a Octavio usar el cognomen de Augusto, y por consiguiente se convirtió en Emperador César Augusto (Imperator Caesar Augustus)

[30] Peter Connolly (1935-2012); historiador, arqueólogo y erudito británico. Afamado investigador del Mundo Antiguo y divulgador histórico.

[31] Morris Keith Hopkins (1934–2004); historiador y sociólogo británico, profesor en la Universidad de Cambridge (1985-2000).

[32] Facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos.

[33] Theodor Mommsen (1817-1903); jurista, filólogo e historiador alemán. Nobel de Literatura en 1902. Su obra referente es Historia de Roma (1854-56), compuesta por cinco volúmenes y considerada por muchos su obra cumbre. Otras obras sobre Derecho romano y Derecho de obligaciones tuvieron una importante repercusión en el Código civil alemán. Fue diputado en el Reichstag desde 1881 y adversario de Otto von Bismarck.

[34] Territorio de la costa Sur del Mar Negro, en la actual Turquía.

[35] Plutarco. Vidas paralelas.

[36] Seutonio. De vita duodecim Caesarum, libri VIII

[37] https://elpais.com/television/2024-05-03/brutal-y-genocida-desmontando-a-julio-cesar-para-avisarnos-sobre-trump-y-otros-cesares.html

MALAS HISTORIAS DE PODER ABSOLUTO

Hoy, primero de mayo, esto de va de dos historias para no dormir… en busca del poder absoluto frente a la democracia.

-I-

Mañana triste y aciaga la del lunes pasado. Ya esbocé mi desesperanza ante la Terra Ola que llegó rotunda a las 11 AM con un mensaje dispuesto para las 12 -de ahí lo de “buenas tardes” tengan ustedes- que había alterado en horario la visita impuesta a Zarzuela para que alguno creyera que se marchaba.

Una mancha más en su negro estandarte, ¿quién la va a notar?

Quousque tandem abutere, Catilina, patientia nostra?; ¿Hasta cuándo abusarás, Catilina, de nuestra paciencia?[1]

Una versión particular de esta frase me repetía mi padre en aquellos días rebeldes de mi juventud. Quousque tandem abutere, Juanito, patientia nostra?

-II-

Con un Quousque tandem abutere, Catilina, patientia nostra? arranca la primera de las catilinarias[2] y buscando por donde enganchar esta historia de búsqueda de poder absoluto me acordé -y por la Internet encontré- de un genial “Quousque tandem, Zapatere, abutere patientiam nostram?[3] de Roberto Centeno, que es de 2011, y en el que el número de afrentas patrias, a resultas de este otro elemento que es Sánchez, ha aumentado exponencialmente en 2024.

Decía entonces el ingeniero de minas y doctor en Economía que ZP había “destruido moral, social, cultural y económicamente España -a la que ha traicionado de todas las formas posibles: aniquilando las raíces de la creación de riqueza, dividiendo a la nación, destrozando el Estado de Bienestar, el sistema de pensiones, la enseñanza pública o el sistema nacional de salud, que tanto sudor y esfuerzo costaron a varias generaciones de españoles-, ha decidido prologar la agonía de todo un pueblo que le ha rechazado masivamente en las urnas”.

Para este Quousque tandem abutere, Pedro, patientia nostra? de mayo de 2024 habría que añadirle las hechas ya hechas y las anunciadas.

Así, que yo recuerde, mononeuronal que sigo estando, y a bote pronto… estaría… lo de la soberanía marroquí en el Sahara; la retirada de la sedición; la reforma del delito de malversación; la ley del ‘solo sí es sí’; el cambio de sexo a los 12 años; lo del Tito Berni; lo de la ley de Vivienda que hace subir los precios, sacar viviendas del marcado y hacer caer el alquiler un 28%, al tiempo que los datos del Ministerio del Interior apuntan a que la ocupación de viviendas subió hasta un 37%; lo de la marcha de Ferrovial a Países Bajos; lo de la expulsión de la Guardia Civil de Navarra; lo de la frasecita de los acuerdos ‘virtuales’ con Bildu y la respuesta de Otegi, siempre al rescate; lo de la entrega de la alcaldía de Pamplona; el que nos llevó a las urnas un 23 de julio de 2023 con ‘toa la caló’; el que justifica los indultos a los líderes de la revuelta independentista catalana; el que soltara, sin despeinarse, el de ‘no podría dormir tranquilo si gobernaba con Podemos’ y…; el de la ley de amnistía en tramitación y los numeritos de Santos Cerdán allende los Pirineos, quien, además, nos desveló que llevaban negociando con Junts desde marzo, antes incluso de las municipales… y aquí no ha pasado nada; el de que nos implanta un mediador en los contactos de Ginebra; el que nos lleva a tener que asumir el relato separatista y meter en la ecuación el ’lowfare’ de marras…; lo de Ábalos, con o sin Delsy; lo del caso Koldo y la koldosfera; lo de Illa; lo de los abucheos allá donde ha ido inaugurando; el sacar a pasear a Franco, el Valle de los Caídos y la desmemoria histriónica cada dos por tres; lo de la sanchezfera… … … ¡esto es un sinfín!

Y también está lo de ser abanderado palestino. El 30 de noviembre Israel nos retiró a su embajadora en Madrid, Rodica Radian-Gordon, tras el chorreo a la embajadora Ana Salomón en Tel-Aviv; el 7 de octubre -recuerden- se había producido el miserable ataque de Hamas. La embajadora volvió a Madrid en enero de este año y en marzo se anunciaba su relevo, el nuevo embajador, Zvi Vapni, que se incorporará en unos meses…. Y nada más comenzar abril se me va Sánchez de gira europeda para abanderar a Palestina y ante el don de la sempiterna oportunidad que exhibe va Irán lanza su ataque de drones y misiles a Israel… hizo el ridículo, una vez más, se quiera o no se quiera ver. Es él.

Es que los Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Jordania y los llamaos países del Golfo, incluida Arabia Saudita, ayudaron a abortar el ataque iraní y participaron en el derribo de las amenazas aéreas. El problema palestino existe porque sus parientes pasan muy mucho de ellos; que por algo será.

Pero vuelvo al presidente y sus cambios de opinión. Fue una eurodiputada de Ciudadanos, Soraya Rodríguez, la que nos dijo que Sánchez miente con mentiras sinceras… ¿o sinceras mentiras? El caso es que miente. Y veo en internet que son sinceras mentiras[4]. Pero es que miente más que habla, aunque repita y defienda su derecho a rectificar que, asegura, es distinto de mentir; porque es adaptarse a la realidad. ¡Tremendo!: Sánchez no miente; cambia de opinión y se aferra al poder.

Y hoy, Quousque tandem abutere, Pedro, patientia nostra? he cambiado el sujeto de la oración porque, al menos, Catilina, por muy felón que fue, también fue un destacado soldado y entregado al combate, murió al frente de su hueste.

(y no ando sugiriendo supremos sacrificios).

-III-

Lucio Sergio Catilina fue un militar de éxito, propio de su tiempo (siglo I aC), de la Roma tardorrepublicana, que buscó el poder y ansió el poder absoluto.

Todo lo que sabemos de él viene de sus más encendidos enemigos. Maco Tulio Cicerón y del historiador Cayo Salustio Crispo, con quienes compartió vivencias y múltiples desavenencias. Ambos lo pusieron a los pies de los caballos: Cicerón en sus catilinarias y Salustio en la Conjuración de Catilina[5], donde además le describe[6].

Aún a partir de esas fuentes, el personaje es que se las trae. Apoyó Catilina a Lucio Cornelio Sila Félix en su época de dictador (81 y 80 aC), etapa en la que Plutarco[7] -que había leído a Cicerón y a Salustio- le atribuyó varios asesinatos de importantes opositores. Después tuvo cargos, poder, líos y pendencias por sus destinos en las costas de Anatolia y Túnez, volviendo a Roma con juicios, de los que salió indemne, pero con la reputación tan maltrecha que se estrelló una y otra vez en sus aspiraciones de llegar a cónsul[8], al no conseguir los votos suficientes.

Una de estas aventuras electorales ocurrió en el 65 aC, donde hubo, además, un par de conspiraciones para asaltar el poder y en ellas se le cita como muñidor, aunque no pasó de ser un mero peón de Marco Licinio Craso (que aspiraba, este sí, de nuevo a ser dictador, con Julio Cesar como lugarteniente, que la cabra siempre tira al monte); que lo del poder absoluto tentaba y tienta mucho.

Catilina volvió a presentarse en los comicios centuriados del año 64 aC y nuevamente resultó derrotado, pues volvió a ser acusado de asesinatos varios y otras pendencias; aunque resultó exculpado, no contó nunca con los apoyos suficientes de la aristocracia para ascender al cargo.

Se radicalizó Catilina aún más tras estos reveses y se entregó al populismo más descarado, promoviendo una revuelta en Roma para noviembre del 63 aC que incluía el asesinato de Cicerón, cónsul de la República en aquel año, al amanecer del 7 de noviembre. Pero alertados todos -propios y extraños- de lo que se preparaba hubo que abortar la revuelta y no se pudo llevar a cabo el asesinato.

Aquellos primeros días de noviembre del año 63 aC estaba Roma caldeadita, a punto llama. Ante tal inestabilidad general, noticias de diversas sublevaciones -como la de esclavos en Capua-, un ejército en la Toscana con Quinto Metelio al frente dispuesto a intervenir y algún que otro lío más, el Senado emitió un senatus consultum ultimum[9] (una especie de Decreto de Estado de Sitio[10] moderno) que suspendió el corpus legal vigente y dio poder absoluto a Marco Tulio Cicerón. Así, el 8 de noviembre, fue convocado el Senado Romano, en el Templo de Júpiter Estator, y ante el mismísimo Catilina -que convocado, asistió-, Cicerón lanzó su: Quousque tandem abutere, Catilina, patientia nostra?

Fue una sesión tensa, pues Catilina salió repondón, aunque viendo el cariz de los acontecimientos y la que se podía liar, tomó las de Villadiego[11] y -aduciendo que iba al exilio- salió de Roma a uña de caballo para encontrarse con las tropas afines de Quinto Metelio acampadas en algún lugar de la Toscana.

Con plenos poderes, Cicerón cortó por lo sano. Se apoyó en la denuncia de una tribu gala[12] a la que habían ofrecido sumarse a la conspiración, cuyos representantes estaban en Roma negociando su estatus y que prefirieron apostar por la República antes que por Catilina. Y en el puente Milvio -que recomiendo encarecidamente visitar siempre en Roma y, por supuesto, no colocar el puto candadito- tuvo lugar la desarticulación de la trama conspiradora y la interceptación de las misivas que fueron determinantes en la acusación a los conspiradores que, de inmediato, fueron ejecutados. Catilina, recuerden se había largado.

Por aquellos días del 63 aC., Cicerón -elegido cónsul- y Julio César -elegido pretor urbano[13]– se las tenían ya tiesas desde hacía décadas; y a partir de entonces fueron de mal en peor.

Y vuelvo a Catilina porque junto con las fuerzas de Quinto Metelio Celer, errantes, acumulando deserciones y con problemas de todo tipo, no dudó en enfrentarse a las tropas enviadas por el Senado y afectas a la República, mandadas por Cayo Antonio Hybrida -cónsul conjunto con Cicerón-, pero que en aquella jornada de enero del 62 aC las dirigía Marcus Petreius-.

Catilina, soldado hasta el final, dio la batalla a pesar de la inferioridad de fuerzas y en ella pereció. Identificado su cuerpo, fue decapitado para llevar su cabeza a Roma.

-IV-

No le fue mejor a Cicerón. ‘El Arpinate‘, así llamado por haber nacido en Arpino, en el Lazio, en el año 106 aC., gozó unos años más de su fama, hasta que el asesinato de César y algunos problemas de familia -divorcios- y hacienda, le amargaron sus últimos años.

Combatió la dictadura de Julio César haciendo uso de todos sus recursos.

Marco Junio Bruto y Cayo Casio Longino, los principales conjurados, cuando acuchillan a César gritaron: “¡Cicerón, Cicerón!”, como si éste fuera -y en cierto modo lo fue- el mentor intelectual de los hechos. En realidad, gritando ¡Cicerón!- clamaban libertad; la libertad que encerraban los postulados y actuación de Cicerón.

El asesinato de Julio César provocó un largo periodo de guerras, en las que Marco Antonio, Octavio y Lépido, derrotaron a los conspiradores y formaron el Segundo Triunvirato. Y luego -tiren de cosas del Bachiller- ya llegamos a Cayo Octavio, sobrino nieto de Julio César, que se hizo llamar Cayo Julio César Augusto, también conocido como Octaviano, que se convirtió en el primer emperador romano (27 aC) tras su victoria en Accio[14] sobre Marco Antonio.

Marco Antonio, cónsul en el 44 aC, como fiel segundo de Julio César en el mando, compañero, colega consular y pariente, efectuó la elegía del funeral y desarrolló en las semanas sucesivas un enfrentamiento dialéctico con Cicerón que se erigió en el líder del Senado.

Y es ahí donde lanzó un anciano Cicerón, con 63 años, las 14 ‘Filípicas’[15] en las que denunciaba el intento de Marco Antonio de instaurar una dictadura en Roma; un jefe militar se aprovechaba del poder de sus tropas para pisotear la legalidad republicana y conseguir el poder absoluto.

Cicerón fue proscrito como enemigo del estado por el Segundo Triunvirato y Marco Antonio decidió su muerte. Este, al saberlo, decidió huir hacia Grecia. Cerca de Gaeta, junto al Mar Tirreno, fue alcanzado por los soldados de Marco Antonio. El centurión Herenio y el tribuno militar Popilio le cortaron la cabeza y las manos (en unas fuentes señalan las dos y en otras una) con las que había escrito las Filípicas. Como trofeos fueron expuestos también sobre el rostra[16] del foro, la misma tribuna de los oradores desde la que pocos meses antes Cicerón había sido aclamado por la multitud.

-V-

Son dos historias distintas que no deben converger. Una es de 2024 y la otra tiene más de dos mil años.

Nada más que historias para no dormir, sobre el poder absoluto. Una nos pilla lejos; la otra nos golpea en el día a día.


[1] ¿Hasta cuándo, Catilina, abusarás de nuestra paciencia? ¿Hasta cuándo ese furor tuyo se burlará de nosotros? ¿Adónde irá a dar consigo esa osadía desenfrenada tuya? ¿Cómo no te mueven, para que desistas de tu locura, la nocturna guarda y vigilante guarnición del palacio? ¿Tampoco, los centinelas de la ciudad? ¿No, el temor del pueblo? ¿No, el consenso y la conformidad de todos los buenos? ¿No, el presente lugar, tan guarnecido de gente, donde suele juntarse ordinariamente el senado? ¿No, los rostros y las presencias de estos padres magníficos? ¿Qué es esto? ¿No sientes que tus consejos son del todo ya descubiertos y que tu conjuración está ya convencida y como tomada a manos por el perspicaz conocimiento y juicio de todos estos? ¿Cuál de nosotros piensas que ignora lo que hiciste la noche pasada y la precedente, en qué lugar estuviste, con quiénes te juntaste, y qué es lo que se resolvió en aquel santo consejo tuyo?

[2] Cuatro discursos de Cicerón pronunciados entre noviembre y diciembre del año 63 a. C., después de ser descubierta y reprimida una conjura encabezada por Catilina para dar un golpe de Estado.

[3] https://blogs.elconfidencial.com/economia/el-disparate-economico/2011-06-20/quousque-tandem-zapatere-abutere-patientiam-nostram_436847/

[4] https://www.elindependiente.com/opinion/2023/10/07/las-sinceras-mentiras-de-sanchez/

[5] De Catilinae coniuratione, la primera monografía histórica de la literatura latina​ y también la primera obra del historiador y político latino Cayo Salustio (86-34 aC.). Siguiendo una estructura narrativa dividida en sesenta y un capítulos, la obra narra la conjura que intentó realizar Lucio Sergio Catilina en el año 63 a. C. con el fin de instaurar una dictadura en Roma.

[6] Cap. V: Fue de gran fortaleza de alma y cuerpo, pero de carácter malo y depravado. A éste, desde la adolescencia, le resultaron gratas las guerras civiles, las matanzas, las rapiñas, las discordias ciudadanas, y en ellas tuvo ocupada su juventud. Su cuerpo era capaz de soportar las privaciones, el frío, el insomnio más allá de lo creíble para cualquiera. Su espíritu era temerario, pérfido, veleidoso, simulador y disimulador de lo que le apetecía, ávido de lo ajeno, despilfarrador de lo propio, fogoso en las pasiones; mucha su elocuencia, su saber menguado. Su espíritu insaciable siempre deseaba cosas desmedidas, increíbles, fuera de su alcance. A este hombre, después de la dictadura de Sila le había asaltado un deseo irreprimible de hacerse dueño del Estado y no tenía escrúpulos sobre los medios con los que lo conseguiría con tal de procurarse el poder. Su ánimo feroz se agitaba más y más cada día por la disminución de su hacienda y por la conciencia de sus crímenes, incrementadas una y otra con aquellas artes que antes he señalado. Le incitaban además las costumbres corrompidas de la ciudad echadas a perder por dos males pésimos y opuestos entre sí: el libertinaje y la avaricia. Puesto que la circunstancia ha traído a colación las costumbres de la ciudad, el asunto mismo parece aconsejarnos volver atrás y explicar brevemente las instituciones de los antepasados en paz y en guerra, cómo gobernaron la República y cuán grande la dejaron para que poco a poco se transformase de la más hermosa y excelente en la peor y más infame.

[7] Plutarco de Queronea. Al serle concedida la ciudadanía romana se le conoce como Lucio Mestrio Plutarco; historiador, biógrafo y filósofo moralista griego del siglo I dC.

[8] El cónsul era el magistrado de más alto rango de la República romana. El cargo era anual y colegiado, y se elegían dos cónsules cada año entre ciudadanos mayores de cuarenta y dos años. Su cometido era la dirección del Estado y, especialmente, del ejército en campaña. Proponían y hacían cumplir las leyes, garantizaban la seguridad e integridad territorial como comandante supremo de las legiones y defendína los intereses de Roma como su representante diplomático. También tenía el derecho y el deber de controlar a los magistrados de rango menor para que no se excedieran en sus funciones y, si era necesario, juzgarlos y castigarlos. ​Tras la transición de la república al imperio, los cónsules se convirtieron en una figura meramente representativa de la herencia de la Roma republicana, ostentando muy poco poder y autoridad, ya que el emperador actuaba como líder supremo. Los cónsules eran seleccionados en los comicios centuriados, su mandato empezaba el 15 de marzo, fecha que posteriormente se cambió al 1 de enero. De los dos cónsules elegidos el que más votos obtenía era el primer cónsul (senior), y el que le seguía en votos era el segundo cónsul (junior)

[9] Decreto del Senado en defensa de la República que permitía a las cónsules hacer lo que fuera menester en defensa de la República y dando a los magistrados poderes semi-dictatoriales con el objeto de preservar los poderes del Senado, con el mismo fin de defender la República.

[10] Estado de excepción motivado por una insurrección o acto de fuerza contra la soberanía o independencia de un paísque otorga poderes excepcionales a las autoridades civiles o militares para poder afrontar situaciones extraordinarias y graves.

[11] Salir precipitadamente de un lugar. Los judíos era pecheros del monarca; pagan el impuesto llamado ‘pecho’ y como era una notable fuente de ingresos a la Corona, en plena época de persecuciones antisemitas, el rey Fernando III el Santo, para no ver mermadas sus arcas, otorgó una carta-encomienda en 1223 prohibiendo su apresamiento y señalando penas para los que hicieran daño o sometieran a vejaciones y maltratos a los judíos. La carta fue ratificada por su hijo Alfonso X El Sabio, lo que supuso largos años de tranquilidad bajo el favor real. Los judíos hicieron grande e importante a Villadiego, fundada por el conde Diego Rodríguez Porcelos, señor de Amaya, en el siglo IX a unos 40 kilómetros de Brugos. En su origen fueron Las Siete Villas de Diego; y la tradición oral confirma que en la antigüedad hubo ciertamente estos barrios con sus iglesias (Barruelo, San Esteban, San Cristóbal, Tudanca de Arriba, Tudanca de Abajo, Mora y el primitivo villorrio de Villadiego, de los que sólo subsiste el primero. Lo más probable es que al fundar el Conde Don Diego este pueblo diseminara por la campiña una cuantas casas de campo, las cuales en el correr de los años, uniéndose unas a otras con nuevas edificaciones, formarían el núcleo de lo que luego se llamaría Villa de Diego o Villadiego que se convirtió en centro de comercio y atrajo numerosas familias judías. Villadiego pasó a ser una ciudad refugio para los judíos y tomaban las de Villadiego al menor síntoma de persecución en otras ciudades. Allí debían vestir unas calzas amarillas, identificándose así como protegidos del monarca. De ahí la variante tomar las calzas de Villadiego.

[12] Alóbroges. Belicosa tribu celta de la Galia ubicados entre el río Ródano y el lago de Ginebra (entre lo que hoy son Lyon, Saint-Étienne y Grenoble en la moderna Suiza). Eran guerreros feroces y producían mucho trigo, lo que les hacía muy ricos. Controlaban la mayor parte del valle del Ródano y varios importantes pasos de montaña hacia Italia, como el que atravesaba la Via Agrippa.

[13] El pretor urbano era, en ausencia de los cónsules de la ciudad, el principal magistrado de Roma y, como tal, presidía el Senado.​

[14] Batalla de Actium; 2 de septiembre del 31 aC. entre la flota de César Octavio, comandada por Agripa, y la de Marco Antonio y su aliada Cleopatra, frente al golfo de Ambracia y el promontorio de Accio. La batalla se saldó con la victoria absoluta de Octaviano y la retirada de Marco Antonio y Cleopatra.

[15] Llamadas así en honor a las que pronunció Demóstenes contra Filipo de Macedonia, el padre de Alejandro Magno.

[16] Tribuna del Foro que servía de púlpito desde el que los magistrados y oradores arengaban al pueblo

MEDITATIO; yo también reflexiono

La Lectio Divina es una metodología de reflexión. La Lectio Divina se compara con el ‘deleite de la Palabra’: primero, el tomar un bocado (lectio); luego masticarlo (meditatio); saborear su esencia (oratio) y, finalmente, hacer la digestión y hacerla parte del cuerpo (contemplatio).

Como la Lectio Divina implica la lectura, que Yo ya he hecho, paso a escuchar el mensaje interior, a la meditación de lo que estos ojos que se han de comer la tierra han llegado a leer y ver…

Para ello, para la meditatio, me he llegado en esta mañana de domingo hasta pocos metros de la playa de Levante de Benidorm, bajo la lluvia -¡Bienvenida sea!- contemplando el ritmo de las olas, que los expertos llaman periodo; veo y sé que llegan en grupos, en cadencias uniformes… 3, 7, 9…

Y a la tercera, la séptima o la novena olas, desde el principio de las civilizaciones, se les atribuyen fuerzas especiales.

La novena ola está ungida y forma parte de los ritos de fecundidad; con la séptima, a la que llamó “Lissette” en sus ansias de libertad, Papillón[1] saltó del acantilado de la Isla del Diablo -la más pequeñas de las tres Islas de la Salvación, premonitorio nombre- en 1941 para conseguir la libertad; y algo debe tener la séptima porque Sting cantaba que el amor es esa ola[2]; y la tercera, ¡ay la tercera!, cuando sólo llegan en grupos de tres, es la más brutal.

Aquellos que tienen la cara surcada por el salitre marino incluso hablan de “la Tres Marías” que son las tres grandes olas que tiene todo temporal que se precie. Absolutamente acientífico, pero es que ellos las han conocido y siguen impactados con su poder. La tercera ola siempre ha sido la más grande, rotunda y devastadora.

En este cuarto día de reflexión de Pedro… ¿esto va de la tercera ola?

Leyendo la presa, viendo la televisión, golpeado por las redes sociales, me temo lo peor.

¿Conocen la Tercera ola?

Es que desde ayer sábado que le leí a Joaquín Estefanía, a primera hora de la mañana, en la edición digital de El País[3] que una ola de antidemocracia recorre los países que hace medio siglo pasaron de dictaduras a democracias se me pusieron los pelos como escarpias.

Cita la ola y el medio siglo. Y ya la neurona bullendo porque estamos a nada de los cincuenta años de la muerte de Franco -El Gobierno quiere aprovechar el próximo 50 aniversario de la muerte de Francisco Franco, el 20N de 2025, para impulsar el conocimiento de todo lo que tiene que ver con la dictadura, la II República y el papel de quienes defendieron la democracia[4]– y un pelo de gamba más para los cincuenta años de la democracia en España… pero para eso ya veremos. Por ello, considero, la ola está a punto de romper aquí.

Y hoy te das de bruces, en El País, con que Madrid es la caldera en ebullición que alimenta la tensión política y mediática en España; donde se señala la rabia del PSOE y te encuentras con Meritxell Batet[5] que después de señalar una cuestión fundamental como que “la política es la discusión pública de alternativas” con un segundo párrafo memorable, ya entra en plan militante y evidencia la terrible miopía que aqueja a los que deambulan por el hemiciclo. Joaquín Manso, desde El Mundo, nos recuerda que ya The Ecomnomist tildó a Sánchez de Drama King y se mete en honduras mientras ilustra su texto con una versión de un San Sebastián asaeteado con la cara de Pedro. Me quedo con la reflexión de Lucía Méndez, acertada, como siempre[6].

Yo es que esto lo enmarco en el experimento de la Tercera Ola.

Ahora que acaba abril de 2004 sería bueno recordar lo de abril de 1967, en Palo Alto, California; lo puesto en práctica por el profesor Ron Jones[7], con alumnos de la Cubberley High School centrado, como vengo observando, en la maleabilidad mental del ser humano. Fue un experimento de fascistización del alumnado que detuvo al quinto día, porque lo había conseguido.

¿Pretende Pedro emular a Ron? Ojo, cinco días y ya vimos ayer los logros del tercero.

Aquellos chavales no comprendían cómo Hitler había implicado al pueblo alemán en su loca aventura. El atractivo de una ideología autoritaria y dictatorial siempre está rondando al ser humano. La facilidad con que una sociedad civilizada puede transformarse en un Estado totalitario es algo ha ocurrido y termina por volver a ocurrir a cada golpe de taco de calendario; que el planeta Tierra es muy grande y cada día nos asomamos a un disgusto nuevo.

El experimento podría resumirlo, a bote pronto, en que el ser humano tiene básicamente una naturaleza autoritaria y le gusta ser liderado y ser seleccionado dentro de una masa anónima. Echen un ojo a los telediarios por el tema de ayer.

Estaban los chavales californianos en el 67, estamos nosotros ahora en el 2004, sustituyendo a la razón por la sinrazón.

Fue un éxito. Y como el experimento se le iba de las manos, el profesor Jones, al quinto día, recuerdo e insisto, cortó por lo sano. Aquí lo de terminar las cosas nunca ha sido nuestro fuerte; que el tiempo, dicen, lo cura todo y vemos que no.

De este experimento, la Tercera Ola, hay libro (Todd Strasser, La Ola; 1981… aunque también aparece en La Tercera Ola, de Alvin Toffler, que es más amplio y profundo) y película (La Ola/Die Welle, de Dennis Gansel), así como innumerables estudios de toda condición y múltiples referencias en prensa, de entonces y de ahora, alertando; siempre alertando.

Estoy preocupado; muy preocupado.

Oír ayer a un chaval joven concentrado a las puertas de Ferraz decir que “la democracia está en peligro” -sin ruborizarse ni despeinarse- es de lo más alarmante que me ha tocado vivir en mis ya seis largas décadas de tránsito mundano. ¡Dios!; este sí que es un buen vasallo… si tuviera buen señor.

Las sociedades que no conocen o ignoran su historia están condenadas a repetirla”. La frase, como aquella de que “la victoria tiene muchos padres y la derrota es huérfana”, se le atribuye, entre otros muchísimos, a Napoleón Bonaparte. Pues bueno, napoleónica o no, lo que dice es terrible. Pero resulta que a base de ignorancia y manipulación nos estamos metiendo en la boca del lobo.

El viejo proverbio español dice que “el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra”; y el español, Juan Español decía yo, es el que tropieza una y otra vez con el mismo Peñón, el de Gibraltar, y con la misma ignominia, la de enfrentarnos unos con otros por visceralidad.  

Y ahora, visto lo visto y oído lo oído desde que el presidente del Gobierno de España se tomó sus días de absurda reflexión, tras el comité federal socialista que concluyó ayer sábado con un salgamos a la calle y unámonos a la masa vociferante veo con temor que el español quiere volver a tropezar con la misma autocracia y el mismo cesarismo.

Antidemocracia; lo opuesto a la democracia.

Es que todos aquellos que entienden que la democracia es la dictadura de la mayoría cometen el principal error de su vida. La democracia es el gobierno de las mayorías; el gobierno en nombre de todo un pueblo. Supone principios y valores: respeto mutuo y ejercicio de la libertad; “libertad de” y “libertad para”; debate y confrontación de ideas y modelo, no de personas.

La democracia es un sistema político en el cual la soberanía reside en el pueblo, que la ejerce directamente o por medio de representantes, donde hay derechos y libertades y un marco de convivencia; no un enclave de pensamiento único. Es un sistema que debate y busca siempre lo mejor; donde hay disparidad de ideas y criterios para buscar el bien común en libertad.

La democracia no una ideología y fue Abraham Lincoln el que la interpretó como “el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo[8]. Fue Heródoto el que así llamó -democracia- a la fórmula de gobierno ateniense, que Clístenes llamaba Isonomía y Aristóteles Politeia. La República romana también fue una democracia, pero el concepto se diluye en el transcurso de los tiempos y ya reaparece a mediados del XVIII donde se fraguan dos ideas claves: la de que un poder legítimo no puede fundarse ni operar sin incorporar la voluntad popular y la de que el poder legítimo en ningún caso es absoluto y tiene como límite los derechos de los ciudadanos.

Y mientras aquí nos descojonamos con el vidiete del norcoreano –“Cantemos, Kim Jong-un, el gran líder; presumamos de Kim Jong-un, un padre amigo”- y nos vamos a hacer lo mismo a una calle de Madrid para salvar la democracia. Celtiberia show.

Claro, se ha banalizado tanto todo que un deporte gubernamental es sacar a pasear a Franco y la Guerra Civil que terminó hace 85 años, pero que mantenemos viva la llama y apoyamos una ley que llegará a tratar hasta los temas del primer gobierno de Felipe González en 1983. Y todo porque se empeñan en impugnar la Transición.

Por entonces tronaban los transistores aquello de “Dicen los viejos que en este país hubo una guerra; que hay dos Españas que guardan aún el rencor de viejas deudas; Dicen los viejos que este país necesita palo largo y mano dura para evitar lo peor”. Y quien cantaba decía lo de “yo solo he visto gente que solo desea su pan, su hembra y la fiesta en paz”. Y la cosa iba a más: “Dicen los viejos que hacemos lo que nos da la gana y no es posible que así pueda haber Gobierno que gobierne nada; dicen los viejos que no se nos dé rienda suelta, que todos aquí llevamos la violencia a flor de piel”. Y coreábamos lo de “gente que tan solo pide vivir su vida, sin más mentiras y en paz”, para entrar al estribillo “Libertad, libertad, sin ira, libertad; guárdate tu miedo y tu ira, porque hay libertad. Sin ira, libertad[9]. La de Jarcha fue la canción de la transición, la que nos imbuyó de dignidad para hacerlo.

Caemos en la ira por puro desconocimiento de quienes somos y hasta dónde hemos llegado.

Mirémosnos lo que pasó en este país desde que arrancó el siglo XX… ¿por qué olvidándonos del anarquismo o del pistolerismo, de los asesinatos de Canalejas[10], Dato[11] o de ‘el noi del sucre’[12], de la agitación política de los años 20 y la influencia de Georges Sorel[13], la psicología de masas de Gustave Le Bon[14] o Gabriel Tarde[15], de los sucesos de Casas Viejas[16] o del durísimo comienzo de la década de los años 30…? Desde la crisis del Régimen liberal fuimos dándonos en las dos mejillas hasta templar armas en la Guerra Civil saldando salvajes cuentas antes y después por reformas que llegaron a destiempo o que aún tardarían en llegar.

Hace noventa años vivimos una situación muy particular; 1933 fue un año especialmente intenso que marcará, con dos revoluciones[17], un proceso que nos empeñamos en olvidar y reprotagonizar. ¿lo investigamos?

Y de allí, a palos, hasta 1939 y las secuelas de una guerra fratricida que muchos se empeñan en sacar a pasear una y otra vez.

Escuchaba ayer mañana con pesar y desazón el grito coreado del ‘¡No pasarán!’. Es triste y lamentable. Y lo es porque quienes lo lanzan no tienen ni idea de quien era José Miaja[18]; ni saben nada de aquella arenga de noviembre de 1936 cuando el gobierno republicano abandonó Madrid a la suerte del general; y este, recordando el grito francés “Verdún, On ne passe pas!” -que era de 1916-, lo convirtió en el “No pasarán”[19]. Entonces fue una llamada a defender la democracia, las libertades y los derechos que habían sido conquistados durante la República y, más que nada, una súplica a la unidad y determinación ante tantas y diferentes fuerzas políticas, ideológicas y sociales militarizadas que con divergencias y disputas internas hacían inviable una frente común; cosa que resolvió el teniente coronel Vicente Rojo Lluch[20]. Que esto es de primero de sentido común. No es ideología ni visceralidad; es sensatez, cordura y juicio, materias en las que veo a muchos españoles cuesta abajo y sin frenos.

No, se quedan en la idealización del grito, puro postureo; olvidan lo que lo motivó.

Y mientras Pedro reflexiona he leído barbaridades en redes sociales; textos de amigos periodistas por los que aún -tras leerles-  siento un rescoldo de admiración que me anima a creer que se trata de una obcecación pasajera. Pero con radical pesimismo temo que sea radicalización. No pueden tergiversar así la realidad; ¿qué virus me los ha infectado?

Me han referido -y terminado por ver- lo de una peruana que desarrolla sus cometidos en el Canal Red[21] de Pablo Iglesias, plantear en La Hora de La 1 la intervención del Poder judicial para que se controle a Medios de comunicación[22] y en concreto a aquellos periodistas que, dijo, “mienten”; e, incluso, la intervención directa de Medios a los que ella calificó de “corruptos”. Y los demás tertulianos, de convidados de piedra. Bueno, uno le animó a que, teniendo pruebas de todo lo que estaba escupiendo, lo publicara. Un brindis al sol… y así hemos llegado a esto.

Estefanía, y vuelvo a mi lectura de la mañana del sábado, denunciaba la estrategia de la crispación que ya ha pasado al tercer nivel: a afectar a los ciudadanos. Es responsabilizar de la situación a quienes la padecen y no a quienes la provocan. Y esa es una bochornosa práctica habitual que se realiza sin pudor,

Pero a lo que vamos, que es lo de la democracia representativa. No miren muy atrás, que es cosa del XIX. Es de cuando arranca eso de que la soberanía popular está delegada en las instituciones gubernamentales que ejercen la autoridad en nombre del pueblo.

A veces olvidamos que la democracia representativa es un tipo de gobierno cuyos actos presentan una correspondencia relativamente estrecha con los deseos de relativamente muchos de los representados; no de todos.

Robert Dahl, politólogo norteamericano, sostenía que para que fuera posible la democracia participativa, que él llama poliarquía, debían existir una serie de garantías como el control de las decisiones gubernamentales, las elecciones libres e imparciales con determinada frecuencia, las consiguientes sustituciones de políticos que salieran de esas elecciones, que estas fueran tranquilas, lógicas y consecuentes; que hubiera derecho a elegir y a ser elegido y, como colofón, tres derechos básicos: libertad de expresión -en particular de expresión política, incluida la crítica a los funcionarios, al estado, al sistema político, económico y social y a la ideología dominante-, libertad de información -sin que gobiernos o grupos la monopolicen- y derecho efectivo de asociación.

Yo creo que esto que está pasando nos lo debemos hacer mirar y muy seriamente. Así vamos mal.

Yo creo que el problema es la crispación. Y más que la crispación es sí, el problema lo crean quienes acusan a los otros de crispar. Aunque, en realidad, lo que aquí en la vieja piel de toro llaman “crispar” y se pide que se deje de hacer, es lo que en cualquier democracia del mundo occidental se denomina confrontación de ideas y de opiniones, y lo que todo el mundo supone que es lo que se debe hacer en democracia.

Lo anormal en la vieja piel de toro no es que la oposición se oponga al Gobierno; lo anormal es que el Gobierno pretenda que la oposición permanezca en silencio y que se actúe para conseguir que efectivamente ese silencio se produzca.

Ahora, ayer sábado lo dijeron, hay quien grita con fervor ¡Todos con el líder! Porque advierte que si eso no ocurre eso la democracia se hundirá en el barro.

Esto es de primero de comunismo; pero lo llaman fascistización

¿Pero qué nos está pasando? Va a ser que el sueño de la razón produce monstruos… y esperando a que al quinto día se nos manifieste.


[1] Henri Charrière «Papillon», escritor y marino francés, condenado a trabajos forzados en la Guayana Francesa en 1931 por un crimen que no cometió en París. Se fugó en 1941 y aunque fue capturado en la Guayana venezolana y nuevamente encarcelado en ese país terminó siendo puesto en libertad en octubre de 1945. Se naturalizó venezolano en 1956 y su causa prescribió para la justicia francesa en 1967. En 1969 escribe su historia, Papillón, y regresa a Francia, ya famosos, a reencontrarse con su familia. En 1970 se instala en Fuengirola, lleva sus peripecias al cine (Papillon, 1973; Franklin J. Schaffner dirige a Steve McQueen y Dustin Hoffman. En 2017 se hace una secuela con el mismo nombre) y escribe un segundo libro, Banco, donde describe su vida en Venezuela desde que escapa de la Isla del Diablo hasta volver a Francia a ver a los suyos. Murió en Madrid en 1973.

[2] Gordon Matthew Thomas Sumner; líder de The Police, siguió en solitario y ya ha vendido más de 100 millones de ciscos, conseguido 16 premios Grammy y fama y renombre mundial. Su canción Love Is The Seventh Wave le ha traído a este Post. Es uno de los grandes de la m´husica.

[3] https://elpais.com/ideas/2024-04-27/una-ola-antidemocratica-recorre-los-paises-que-hace-medio-siglo-pasaron-de-dictaduras-a-democracias.html

[4] https://www.eldiario.es/sociedad/gobierno-ultima-campana-explicar-colegios-50-aniversario-muerte-franco_1_11275591.html

[5] Presidenta del Congreso de los Diputados entre 2019 y 2023 y ministra de Política Territorial entre 2018 y 2019 en el Gobierno de Sánchez.

[6] https://www.elmundo.es/espana/2024/04/27/662d215de9cf4aec7d8b4573.html

[7] Ron Jones (Palo Alto, California, 1941); escritor y profesor estadounidense. Mientras impartía clases de Historia Contemporánea en un instituto de Palo Alto, California, fue el iniciador de un experimento psicológico con adolescentes en torno al nacimiento del nazismo llamado “Tercera Ola”; en 1967.

[8] Discurso de Gettysburg; 19 de noviembre de 1863, cuatro meses y medio después de la terrible Batalla de Gettysburg que marcó en inicio de la ofensiva de la Unión durante la guerra civil norteamericana (1861-1865). Termina con la frase and that government of the people, by the people, for the people, shall not perish from the earth. Y la fórmula del “gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo” para definir la democracia ha sido adoptada incluso en el artículo 2.º de la Constitución de la Quinta República Francesa. Como anécdota diré que el principal discurso en aquella mañana de primavera era el del académico Edward Everett, pero se tiró dos hora de perorata y aburrió a las ovejas. En cambio, Lincoln, en 3 párrafos y 271 palabras, en 3 minutos, hizo historia.

[9] La Jarcha era una breve composición lírica de los poetas andalusíes árabes o hebreos entre los siglos XI y XIV. Buscando rescatar y divulgar las canciones populares andaluzas en 1972 se formó en Huelva el grupo Jarcha musicando viejos poemas andalusíes mozárabes y composiciones de autores históricos y poetas contemporáneos andaluces hasta que relataron el tránsito del franquismo a la democracia con la obra de Rafaél Baladés y José Luís Armenteros y Pablo Herreo, «Libertad sin ira» hasta convertirla en el himno de la Transición.

[10] José Canalejas Méndez (1854-1912); abogado y político regeneracionista y liberal español. Siendo presidente del Consejo de Ministros, murió asesinado en un atentado terrorista.

[11] Eduardo Dato e Iradier (1856-1921); abogado y político español, varias veces ministro y presidente del Consejo de Ministros durante el período de la Restauración. Cuando se produjo el estallido de la Primera Guerra Mundial, en 1914, como presidente del gobierno decretó la neutralidad española en el conflicto. En marzo de 1921 fue asesinado por pistoleros anarquistas.

[12] Salvador Seguí Rubinat (1887-1923), apodado el El noi del sucre, uno de los más destacados anarcosindicalista de España de principios del siglo XX. Buscó dar un nuevo impulso a la lucha proletaria sin olvidar las esencias de su ideario anarquista. Fue asesinado el 10 de marzo de 1923 por pistoleros del Sindicato Libre, que en su momento estuvo asociado a la patronal catalana.

[13] Georges Eugène Sorel (1847-1922); filósofo francés y teórico del sindicalismo revolucionario. Es conocido por su noción de la violencia como factor determinante en el proceso histórico​ y ha sido considerado como uno de los introductores del marxismo en Francia.

[14] Gustave Le Bon (1841-1931); sociólogo francés y físico aficionado. Muy influyente en el campo de la psicología social por sus aportaciones sobre la dinámica social y grupal. Fue autor de numerosos trabajos en los que expuso teorías sobre los rasgos nacionales, la superioridad racial, el comportamiento y la psicología de las masas. Influyó decisivamente en Hitler.

[15] Jean-Gabriel de Tarde (1843-1904); sociólogo, criminólogo y psicólogo social francés. En sus análisis concibió la sociedad como un producto de la vida social, basada en pequeñas interacciones entre individuos, donde la imitación y la invención eran centrales. Entre los conceptos que inició estaban la mente grupal y la llamada psicología de masas, con atención a la opinión pública, donde anticipaba varios desarrollos modernos.

[16] Levantamiento campesino contra el Cuartel de la Guardia Civil de Casas Viejas, Cádiz, entre el 10 y el 12 de enero de 1933. Es uno de los hechos más trágicos de la Segunda República Española. Liberado el cuartel el 11 de enero se buscó a los responsables, sindicalista de la CNT. El 12 de enero, una unidad de guardias de asalto, al mando del capitán Rojas, que había recibido la orden del director general de Seguridad en Madrid, Arturo Menéndez, para que se trasladara desde Jerez y acabara con la insurrección, ocasionó la masacre de campesinos que inició el desencuentro entre el campesinado más pobre y los ideales de la República con su promesa de reforma agraria y de mejora de las condiciones de trabajo.

[17] La CNT contra la República: Enero de 1933, segunda de las revoluciones anarquistas donde el diario oficial de la CNT escribía que: la política represiva… sectaria de los socialistas que detentan el poder y usan de él contra los intereses de los trabajadores. Por eso, “vencida una insurrección surge otra, resuelta una huelga, otra se produce; apaciguado un motín, estalla otro mayor”. Los sucesos de Casas Viejas se enmarcan en ella. Diciembre de 1933, tercera de las revoluciones anarquistas donde las milicias armadas de Aragón pretendieron implantar el comunismo libertario. Se extendió por  Extremadura, Andalucía, Cataluña y la cuenca minera de León tras la victoria electoral del centro-derecha. El 14 de diciembre fue declarado el Estado de Guerra e intervino el Ejército para restablecer el orden. El día 15 la CNT dio la orden de volver al trabajo y al día siguiente la policía detenía al comité revolucionario. Durante la insurrección se registraron violentos choques con la fuerza pública, descarrilamientos de trenes, voladuras, destrucción de archivos, incendio de iglesias, sabotajes de vías férreas y puentes, así como líneas telegráficas y telefónicas, junto a numerosos tiroteos y escaramuzas.

[18] José Miaja Menant (1878-1958); militar español conocido por su papel en la defensa de Madrid durante la Guerra Civil Española (8-23 noviembre del 36; y hasta el final de la guerra). Crítico con el desenlace que la contienda tomó para la Segunda República, en marzo de 1939 apoyó el llamado golpe de Casado y aceptó presidir el Consejo Nacional de Defensa que intentó negociar, sin éxito, el fin de las hostilidades. En los últimos días de la guerra civil abandonó España y marchó al exilio, primero en Francia y, después, en México. Recibió la orden de defender Madrid a toda costa. Para ello contó con un excelente asesor soviético, el coronel Vladimir Yefimovich Gorev, y un concienzudo jefe de Estado Mayor, el teniente coronel Vicente Rojo.

[19] Aunque se hiciera famosa en Verdún, ya los liberales españoles del XIX, hacia 1820, inspirados en el Libro de Job –“Hasta aquí llegaréis y no pasaréis de aquí”- la pronunciaban. José Antonio Primo de Rivera, en 1934, tuvo su versión: Moscú no pasará, el separatismo no pasará. Dolores Ibárruri, ‘Pasionaria, la suya el mismo 18 de julio de 1936: el fascismo no pasará; No pasarán los verdugos de octubre (de la revolución minera de Asturias de 1934.

[20] Vicente Rojo Lluch (1894-1966); militar español, jefe de Estado Mayor del Ejército Popular de la República durante la guerra civil española, conocido por su destacada participación en la defensa de Madrid, así como en el planeamiento de la batalla del Ebro, la batalla de Brunete, y finalmente el Plan P (llegar con la línea del frente a Portugal). A pesar de estar en el bando republicano, él mismo se definió como católico, apostólico y romano. Al finalizar la guerra estuvo exiliado en Francia, Argentina y Bolivia. En 1957 regresó a España donde fue juzgado por auxilio a la rebelión y perdió su empleo militar. Fue autor de diversos libros relativos a la narración histórica de la guerra civil española, así como del entorno social que rodeó al conflicto. A su fallecimiento 15 de junio de 1966 los diarios ABC y Ya le reconocieron su empleo de general y lo calificaron como “el jefe militar más brillante del ejército republicano durante la guerra civil”.

[21] Canal RED es un canal de televisión en español que emite en abierto por internet y TDT dirigido desde su inauguración en marzo de 20232​ por Pablo Iglesias Turrión y financiado, dicen, por micromecenazgo.​ El canal se centra en noticias relacionadas con la actualidad política de España y América Latina.

[22] https://www.elespanol.com/bluper/20240425/colaboradora-hora-tve-pide-tomar-poder-judicial-intervencion-medios/850415443_0.html

Reflexionando… del modelo turístico y del acceso a la vivienda en las zonas turísticas…

Hablamos, sin pudor, de la necesidad de un cambio de modelo productivo en España. Y esto, especialmente, se hace en los grandes destinos turísticos donde encontramos situaciones agravadas en torno al acceso a la vivienda. Le echamos la culpa al turismo… y, blandiendo estulticia, a otra cosa mariposa.

El 20A en Canarias ha salido hasta en la sopa de Medios. No dudo de que Canarias tenga un límite, como dice el lema de los manifestantes… Pero es lo que tienen las islas, límites (bordes): terminas en el mar. Ah, bueno, que se refieren al modelo turístico; pues también, terminas en el mar.

En esto del turismo patrio, como decía Sancho al hidalgo de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor (que cuando esto escribo celebramos el Día del Libro): “quien busca peligro, perece en él”, como cuando don Alonso se metió en la aventura de los batanes[1] [2]… Mucho ruido, pero es lo que te da de comer.

En lo de dejarse llevar por las emociones sobre el territorio sin tener plan B es un gran error.

El modelo turístico español -Sol y Playas- viene resultando ser un éxito desde los años cincuenta… aunque lo de “la industria de los forasteros” tiene un principio anterior.

Arrancó tras la IIGM con generaciones de europeos que buscaban su seguro de sol y tipismo en la vieja piel de toro (e islas adyacentes) y se consagró en los setenta con paquetes turísticos adquiridos en los países de origen hacia los tradicionales destinos de sol y playa que habían desarrollado un ocio adaptado a ellos.

El proceso ha ido evolucionando gracias a los vuelos low cost y la Internet; y complicándose. Ahora, tras la pandemia Covid19, es una necesidad donde el Sol y Playas, pese a quien le pese, es lo que tira del carro del turismo. Por ello, por el sol y las playas, los destinos turísticos españoles han ido jalonando éxitos, uno tras otro, y son referentes internacionales.

Este modelo productivo español sigue vivo y gozando de éxito -ya verán los resultados de este 2024… si Putin y Zelenski, el Estado Islámico, Kim Jong-un, Netanyahu, Haniya y Jameni no la lían aún más- con todas sus singularidades. Al final, apunten que ya verán, sumaremos 200.000 millones de euros de ingresos, el 13’4 del PIB, y hasta un 17% de nuevos empleos, aunque muchísimos sean raquíticos, en una España de subvenciones que ha cerrado 2023 con un déficit del 3’6% y una deuda de 107’7%. ¡Olé! Por fin estamos a la cabeza de algo en la UE[3]: el país con más deuda regional. ‘Olé, olé y Olé!

La cuestión ahora es que las nuevas –y no tan nuevas- generaciones de turistas están cambiando y los nuevos perfiles demandan una oferta de productos y servicios diferentes y diferenciales que poco a poco los destinos van enfocando con dispar criterio y, se mire como se mire, manteniendo el éxito.

Cambiar el modelo a estas horas de la película es complicado. En España crecen los servicios y la industria se contrae. Así es que… Modelo turístico al canto porque en lo que es la industria tradicional, acabamos de esquivar por los pelos la recesión técnica[4].

Menos mal que tenemos turismo, que si no…

El dinamismo de los servicios contrasta con el anquilosamiento de la industria.

La economía española lleva década y media tambaleante; la brecha de productividad de España con la eurozona fue de casi 14 puntos en 2023 y no hay visos de mejora.

La Fundación de Estudios de Economía Aplicada y el Consejo General de Economistas explicaban allá por febrero último que “la escasa y poco competitiva inversión en activos intangibles (capital humano, tecnológico y social), los desajustes existentes entre la oferta y la demanda de trabajo, la elevada temporalidad del empleo, y las barreras a la financiación para las empresas pequeñas, especialmente para las tecnológicas” complicaban el problema patrio. Desde 2010, España ha retrocedido en PIB per cápita “más de veinte años[5].

El Gobierno pregona que está cambiando el modelo productivo (¿?) gracias a los fondos europeos de recuperación (¿?), pero los datos –y el sentido común- le contradicen. Es que las evidencias les rebaten de continuo. Pero ellos erre que erre; aunque la realidad sea más tozuda. La luz al final del túnel es un Talgo de la serie 106 que viene de frente…

Sólo el turismo resiste y presenta cuentas: en 2023 España recibió 85,1 millones de turistas internacionales y el turismo alcanzó un 12,8% del PIB, impulsó el crecimiento de la economía y creó más y –dicen los exégetas del sanchismo que- mejor empleo; su contribución a la economía alcanzó el 12,8% del PIB y fue el mejor año desde que existen estadísticas, con la generación total de 186.596 millones de euros a través de su actividad. Y resulta que el 17% de todos los puestos de trabajo creados en 2023 correspondieron a empresas de la industria turística. Fueron, concretamente, 95.224 empleos más que en 2022. Además, la tasa de temporalidad bajó hasta el 8% y las subidas salariales fueron las mayores de toda la economía española, con una media del 4,4%. El PIB turístico creció un 13,1%, que se traduce en el 70,8% del crecimiento de la economía española, que el Banco de España sitúa en el 2,4%. Si es que habríamos de reverenciar al turismo.

Asín que… al turismo, ni me lo toquen.

¿Cómo van a intentar cambiar lo único que funciona?

Ahora bien, con las cifras más elevadas de la historia… al final, el sector turístico tira del carro, nos saca del apuro y conserva los mismos problemas desde hace años. Y esto sí que nos lo tenemos que hacer ver.

Es triste decirlo, pero el sector turístico es un sector que fundamentalmente se nutre de una fuerza laboral de poca o nula cualificación. ¿Algo a remediar?, sí. Y para más inri, en la oferta complementaria, encontramos un cierto nivel de economía sumergida. Es duro decirlo, pero es que, si no, ¿cómo explicas que este país sobreviva con tasas de paro del 25 por ciento, que -de ser ciertas- nos llevarían a buen seguro a una rebelión social?

Nada, remediémoslo con formación y capacitación profesional.

Pero el nuevo personal -formado y capacitado- se encuentra con el mismo panorama laboral que el ni formado ni capacitado: falta de condiciones laborales competitivas y salarios bajos. Estas dos lacras parecen confirmarse como los motivos que se amagan detrás de la falta de personal cualificado en el sector turístico.

En 2024, el SMI es de 1.134 euros mensuales en 14 pagas; 1.323 euros mensuales si es en 12 pagas. A un camarero, y con formación, se le ofrece poco más… y tiene por delante largas jornadas y que pagarse una solución habitacional a los precios que están. Mala pinta, oiga.

Sin lugar a duda hay que seguir en clave de turismo, pero habremos de reorientarnos hacia modelos puntuales más racionales, al tiempo que ir desarrollando productos innovadores que permitan la convivencia de más de un perfil de turista en el mismo destino, evaluando el beneficio empresarial y social que ello deberá conllevar; habrá que tener una visión de futuro integrada aunando esfuerzos en alianzas público-privadas; mejorar en conectividad -ahora el gob (con estos mendrugos es inapropiado terminar el nombre) anuncian la “expansión” del aeropuerto de El Altet.

Con un par, el presidente de AENA, Maurici Lucena, ha soltado por su boca en la junta de accionistas de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea un “Quiero subrayar, para que quede claro en la Comunitat Valenciana, que se expandirán los aeropuertos de Alicante-Elche y de Valencia”. No podía ser menos habida cuenta que el Aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández cerró 2023 con 15,7 millones de pasajeros registrados, 4,6% más que en 2019 (el último año previo a la pandemia). El tráfico nacional supuso el 14% del tráfico comercial (frente al 11% del 2019). “El Altet” (yo, es que soy así y lo de Alicante-Elche ‘Miguel Hernández’ me suena progre) ha logrado la desestacionalización de la operativa al superar el millón de pasajeros en doce de los trece últimos meses…

Por ello lo de la expansión me sabe a cuerno quemado cuando se está pidiendo la construcción de la segunda pista y la conexión ferroviaria.

¿Podemos llamar a las cosas por su nombre?; ¿Qué supone la expansión?; ¿cómo encajamos en esto lo de acción o efecto de expandir? Aquí hablamos de construir, otro verbo y otra necesidad, donde lo importante es planificar a medio y largo plazo. Esperando estoy el informe de las cámaras de comercio en el vecino mes de mayo.

Aquí, lo que importa es ser impepinablemente sostenibles y tener el turismo como estrategia de país

Sí, tener el turismo como estrategia de país –repiénseselo, manifestante del 20A- y planteéselo. Y luego está la normalización hacia el DTI como una de las más brillantes opciones de futuro en materia de turismo.

Sobre todo porque ahora al turismo -y a las zonas turísticas- le reaparece -lleva ya un tiempo- el problema de la vivienda que se está convirtiendo en la madre de todas las cuestiones.

Y es verdad. El acceso a la vivienda es un problema.

Yo me acuerdo del torpedeo socialista de la Ley del Suelo popular nada más despuntar el siglo XXI y, también, de una de las sentencias más desafortunadas que se recuerdan en la que el Tribunal Constitucional otorgó a las Comunidades Autónomas la competencia exclusiva en materia de ordenación urbanística[6] [7], privando al Estado de una de las escasas posibilidades que le quedaban de influir positivamente en la solución de este problema. Aunque si la cosa fuera de este gob, como se está demostrando, peor estarían las cosas. ¿Se acuerdan cuando la ministra Trujillo, María Antonia por nombre, reinventó la corrala[8]? Pues la pelota estaba en el tejado de las Comunidades Autónomas

Le Corbussier trabajó en esto de la solución habitacional desde 1914… y así llegó la unidad de habitación transitoria (1944; treinta años rulando la idea) hasta culminar la idea en la Unidad de Habitación de Marsella (1952) y sus nuevos vuelcos en 1961 y 1964… y no ha cuajado.

En este país vamos a empujones en este tema (y en todos) y la cosa nos fue como nos fue en vivienda –lamentándonos siempre- hasta que, recordemos, en 2008 estalló la burbuja inmobiliaria y nos quedó patente que la vivienda, que había sido tradicionalmente considerada como un activo financiero y no una necesidad básica del español medio, era un problema… tras aumentar los casos de ejecución por impago de hipotecas.

La vivienda pasó a ser necesidad acuciante y acabó convirtiéndose en el problema patrio.

Problema que en realidad se circunscribe a la cuestión de la pasta gansa: los salarios actuales de la gran mayoría de los jóvenes españoles y de buena parte de la sociedad apenas dan para alquilar o intentar comprar una casa medio digna.

Concluyamos que es muy difícil encontrar vivienda asequible, en alquiler o propiedad, en las principales ciudades de España… por el motivo de los sueldos.

Este problema se ha acrecentado en el último año con la nueva ley de la vivienda, el continuado aumento de los precios y la recalcitrante subida de los tipos de interés.

En el estándar ideal de gasto de las personas ningún español debería destinar más del 25% a vivienda (alquiler o pago de hipoteca; lo que se conoce como tasa de esfuerzo de hogar) y el Banco de España decía -en febrero último, una vez más-, que los españoles destinaron más del 40% en 2023; con casos referenciados de más del 50%. El esfuerzo de los alemanes es tan solo del 15%; ¡Mein Gott! Algo estamos haciendo mal.

Así, cobra tremendismo (al menos para mí) es que, en 2021, el 42% de los hogares españoles con españolitos de entre 30 y 44 años no era propietario de su vivienda, lo que supone quince puntos más que hace diez años. Y no doy con el dato de 2023 que, seguro, es aún más descorazonador.

Y desazona ver los casos de jóvenes parejas, con dos sueldos del sector turístico, que tienen que alejarse más de Benidorm para encontrar algo que no les suponga tanto esfuerzo de hogar… o ver en la tele profes de primaria a las que les sale más a cuenta los 800 euros al mes que se gastan en volar de Palma a Ibiza (a los isleños les cuesta más barato volar) que alquilarse un casuto en la más grande de las Pitiusas.

Y, de repente, me ha venido a la mente la novela de Rafael Azcona, llevada al cine en 1958, “El pisito”, donde Petrita y Rodolfo resulta que no se podían casar porque no les llega el parné para el pisito. La solución (maquinada por Petrita; las mujeres en esto –y en casi todo- son más lsitas) es que Rodolfo se case con la vieja casera, doña Martina, y a la muerte de esta en viudo herede ¡el contrato de alquiler sobre el inmueble de renta antigua! y, por fin, se puedan casar al contar con un pisito donde vivir su amor.

Pues así estamos en 2024 (como en los 50 de la España en blanco y negro); pero doña Martina ahora no existe; y, mucho menos, los contratos de renta antigua en las zonas turísticas.

Por cierto, cuando se escribió la novela y se guionizó, en aquella España de postguerra se estimaba que existía un déficit de un millón de viviendas para cumplir el proyecto franquista “una familia, una vivienda”. Y en 1957 se creó el Ministerio de la Vivienda (Decreto Ley de 25 de Febrero). Antes ya estaba el Instituto Nacional de la Vivienda (1939); pero la solución llegó con la Ley de Arrendamientos Urbanos (1951) que puso en marcha un Plan de Urgencia Social de viviendas subvencionadas… Y con el II Plan Nacional de la Vivienda (1961-1975) se construyeron 4.080.619 viviendas sociales. Sí, ha leído bien: cuatro millones ochenta mil seiscientas diecinueve… más de cuatro millones.

Deténgase en estos números: en 14 años, entre 1961 y 1975, se construyeron -con voluntad- más de cuatro millones de viviendas para cubrir la demanda del enorme crecimiento vegetativo de la población española, asumir la emigración interna y la reposición de vivienda antigua.

Vale: sálgame denigrando con las calidades o lo que quiera; pero se trata de más de cuatro millones de viviendas todo lo fachas que usted quiera.

Puede que duela recordarlo, pero los españolitos de entonces, ahorrando, se podían comprar el pisito (en 1977, el 77,8 % de los españoles era propietario de su casa) o, en su defecto, podían pagar el alquiler gracias a la Ley de Viviendas de Renta Limitada (1954) y la nueva Ley de Arrendamientos Urbanos (1964). Leyes franquistas, eso sí.

Por cierto, el decreto Boyer (Real Decreto 2/1985, de 30 de abril), sobre medidas de política económica, supuso la liberalización del mercado de alquileres poniendo fin a la dictadura franquista en materia de rentas de viviendas. Asín que… todo el monte se convirtió en orégano.

Y hasta aquí que les leo porque me entra el tembleque cuando leo que en los años que llevamos de Democracia -cuatro décadas largas- sólo se han construido 2’36 millones de viviendas protegidas en España y con periodos de protección de entre 10 y 30 años, con lo que cumplidos estos años las viviendas pasan al mercado libre con precios de mercado.

Vamos, que en materia de vivienda, guste o no reconocerlo, cuesta abajo y sin frenos hasta el problema de hoy, que arrastramos bastante más de una década.

Ahora mismo, en vivienda protegida y vivienda social, resuenan más quejíos, ayes y lamentos que en un arranque de la Niña de los Peines (y que me disculpe doña Pastora Pavón por meterla en este ajo).

Hay en España, INE dixit, 26’8 millones de viviendas; 60.334 en Benidorm (toque localista que me brota al pronto).

De los 26’8 millones, 19’35 millones son viviendas principales y hay, cuentan, más de 3’5 millones de insuficientes viviendas vacías, lo que le molesta a muchos olvidando que son propiedades privadas. Sí, también tenemos 3’8 millones de las llamadas viviendas de uso esporádico y unas 290.000 en alquiler social… Están todas contabilizadas. Sabemos las viviendas que hay y, como se hizo en la España franquista, sabemos las que faltan… y las que habría que construir cada año. Pero falta la voluntad y el parné para ello.

Este año, dicen desde la patronal del sector y refrendan los portales inmobiliarios, se van a construir 110.000 viviendas en España, aunque se necesitarían 40.000 más, al ritmo de 150.000 viviendas al año -sólo en vivienda pública- durante una década para atender la demanda -1’5 millones- y regularizar el mercado, confiando, dicen los expertos, que si todo va bien se pudiera acceder a ellas, suponiendo que los españolitos consiguieran detraer de su sueldo la cantidad necesaria. Hace unos días, el 14 de abril, la ministra de Vivienda del gob actual confirmó el déficit de 1’5 millones de viviendas públicas (aunque varios estudios reclaman 2’4 millones) y recordó, una vez más, la manida promesa de 184.000 viviendas hasta el final de la legislatura en curso, que, de construirse, sólo cubrirían en 12’3% de la necesidad.

Es que la Administración debe implicarse. En 2002 España gastaba algo más de 1% del PIB en vivienda pública; en 2022, veinte años después, algo menos del 0’5%. Y encima me saldrá alguien a decir que el gob puso en 2022 la nada despreciable cantidad de 6.900 millones de euros en vivienda… pero como 4.200 millones fueron a ayudas al alquiler y todo eso, a la construcción pura y dura, al ladrillo y desde las comunidades, solo llegaron 2.700 millones… que para un país como este… ¡es nada! ¡Terrible!

Hay un informe de la OCU[9] al respecto que deja sin aliento ya en la página 4…

Y hasta tenemos una Ley de Vivienda (Ley 12/2023, de 24 de mayo) que está a punto de cumplir un año y gracias a la cual el metro cuadrado ha pasado de 1667 € a 2079 €. ¡Olé!

El efecto real ha sido contracción del mercado e incremento de precios por ausencia de oferta y estancamiento de la demanda. Vamos, otra ley sanchista inútil que ante el resultado ha hecho salir a los integristas de a bordo pidiendo expropiar viviendas a sus legítimos propietarios mientras el gob mantiene normas de intervención que suponen un grave atentado contra la libertad de mercado y la propiedad privada en vez de entrar de lleno en el tema y dar seguridad al propietario.

Hasta los mononeuronales saben que la seguridad jurídica al propietario del inmueble es la verdadera solución para poner viviendas vacías en el mercado de alquiler; dando mayores garantías a los propietarios y hacer que la ley se cumpla en tiempo y forma es lo que elevaría la oferta de pisos en alquiler. Y, naturalmente, construir más vivienda protegida. Pero dar garantías de seguridad al propietario fachurrón está mal visto.

El 95% del parque de vivienda en alquiler está en manos de particulares; pequeños propietarios y ahorradores que habían visto en el sector de la vivienda un mercado seguro en el que poner sus ahorros y obtener una lógica rentabilidad. Buscan, naturalmente, proteger su patrimonio y, para ello, necesitan la máxima seguridad y estabilidad. Lo mismo, convencido estoy, que los inquilinos. Aunque los hay que por hache o por be, ante una ley garantista para ellos, pasan de cumplir con sus obligaciones contractuales.

Caer en manos de alguien que alquila y no pagua y que, encima, pueda ocasionarte una serie de daños en la propiedad cuando le reclamas, es lo más temido; porque no los puedes echar ni con aceite hirviendo y te metes en un proceso legal… Y como dice el refrán patrio: pleitos tengas y los ganes. Hay tal impunidad que muchos echan la llave al pisito o se pasan al alquiler turístico y… ya saben el lío que hay…

En España, he de reconocer, hay seguridad jurídica. Me lo jura un amigo magistrado. Aunque él mismo añade que “los plazos para hacer cumplir la ley son tan largo y tan flexibles que la sensación generalizada es que no; que no la hay. Pero la hay”. Ahí te quiero ver.

En el Índice Internacional de Derechos de Propiedad 2023 que elabora la Property Rights Alliance y publica el Instituto de Estudios Económicos resulta que España está en el puesto 22, de 37 economías desarrolladas; un 4,2% por debajo del promedio observado en la Unión Europea. Sí, Álvaro: haberla, hayla; pero… Eu non creo nas meigas, pero habelas hainas.

Aquí, si los inquilinos te dejan de pagar y se quedan en el pisito, te jodes y bailas al son que ellos marcan porque no te queda más remedio que hacerte cargo de sus gastos y tus gastos (comunidad, IBI, hipoteca, agua, luz, etc.) y seguir sin percibir ingresos en concepto de alquiler. ¡Olé! Y no les digas nada que te denuncian. Y si se van, a ver cómo consigues cobrar la adeudado y los posibles daños. Una ruina.

Por eso, echas el cierre y buscas la oportunidad de rentabilizar la inversión que realizaste con tus ahorros o con aquella primitiva que te cayó o con el pisito que te legó Petrita, que seguro tuvo hijos con Rodolfo y eres heredero único de la buena señora. Muchos se pasan al alquiler turístico más ágil, más rentable, más resolutivo.

Un estudio de investigadores del Departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Barcelona sobre los pisos de Airbnb (2007 y 2017) concluyó que este tipo de actividad causa el incremento de alquiler y encarece la compra en las zonas de Barcelona donde se instalan estos alojamientos.

Desde FEVITUR el amigo Sotillos me dice de continuo que nones y, donde quiera que va, sostiene que no puede achacarse el problema de la vivienda en España a la existencia de pisos turísticos: “El nivel de viviendas de uso turístico en España es sólo el 1,15% del total construido”.

Y eso me reafirma: sólo una seguridad jurídica real y actuar en consecuencia en la construcción de vivienda protegida -pública o privada- podría ser la verdadera solución al problema del alquiler para el acceso inicial a la vivienda.

Ahora mismo, sólo el 10% de lo que se construye es vivienda protegida; y de ese 10%, el 80% proviene únicamente de inversión privada. ¿Oído, cocina?

El caso es que si hubiera más vivienda pública y -¡atención!- sueldos en consonancia no tendríamos estos problemas de ir arremetiendo contra el modelo productivo que es el que es: contra el Turismo.

Y con la que está cayendo… del turismo diremos que… Eppur si muove…


[1] Batán: máquina generalmente hidráulica, situada en un curso de agua, compuesta de gruesos mazos de madera, movidos por un eje, para golpear, desengrasar y enfurtir los paños.

[2] https://cvc.cervantes.es/literatura/clasicos/quijote/edicion/parte1/cap20/cap20_05.htm

[3] https://www.larazon.es/economia/deuda-publica-bate-todos-records-supera-primera-vez-historia-16-billones_20240422662627478e66020001f9b836.html

[4] https://elpais.com/economia/2024-02-22/espana-no-logra-cambiar-su-modelo-productivo-crecen-los-servicios-pero-la-industria-se-contrae.html

[5] https://capital.es/economia/falso-mito-productividad-espana/86870/

[6] SENTENCIA 61/1997, de 20 de marzo; (BOE núm. 99, de 25 de abril de 1997) en https://hj.tribunalconstitucional.es/es-ES/Resolucion/Show/3326

[7] https://cursourbanismo.es/el-impacto-de-la-sentencia-del-tribunal-constitucional-de-20-de-marzo-de-1997-sobre-distribucion-de-competencias-en-materia-de-urbanismo-y-derecho-de-propiedad-entre-el-estado-y-las-comunidades-autono/  

[8] Tipo de vivienda característica del viejo Madrid, diseñada como casa de corredor con armazón general de madera, cuyos balcones dan a un patio interior.​ Modelo de edificación de vecindad populosa y castiza de los siglos XVII, XVIII y XIX.

[9]  https://www.ocu.org/organizacion/prensa/notas-de-prensa/2024/tpviviendasocial200324

DE UN LIBRO… BENIDORM LA NUIT…

Me había planteado Ana Pellicer, concejal de Patrimonio Histórico y Cultural del Ayuntamiento de Benidorm, presentar el libro de Pedro Delgado Casals que lleva por título “Playa, sol y platillos volantes. Una guía Pop de Benidorm y la Marina Baixa (1958-1978)”. En la inconsciencia que me caracteriza dije que sí y me metí en faena.

Ante un Salón de Actos repleto y con muchísima gente que no pudo entrar intentando hacerlo, rebasando el reloj las veinte horas y diez minutos del lunes 15 de abril, a los acordes de ‘Sótano[1], un tema de un quinteto roquero de Benidorm –Ringo Rango-, entramos en faena.

En la mesa, el autor –Pedro Delgado-, el editor –Vicente San Juan-, Juan Antonio Portolés “Lou” y yo, conduciendo el acto. En la pantalla, un sinfín de imágenes de aquellos momentos del periodo 1958-1978.

Y me arranqué: “No existe una definición unánime sobre la felicidad, pues depende de muchos factores. Entre ellos, el ocio y los llamados hechos culturales, un cajón de sastre donde cabe casi todo. La música es un hecho cultural; este acto también”.

Abría así una auténtica jam session –en el estrado: una batería, un teclado, un bajo y una guitarra- en la que iba a salir a la luz una apasionante historia que, les juro, me hubiera gustado vivir en primera persona -aunque implica haber nacido década y media antes- porque sigo atrapados en los microsurcos del Aqualung de Jethro Tull[2]; entre Hymn 43 y Locomotive Breath, en concreto.

-I-

Tal vez más acelerado que de costumbre -quería ganar tiempo y no restárselo al protagonista y colaboradores- quise sentar las bases de la noche.

Y les dije: “Hayan visto lo que hayan visto en el cine -y leído en novelas-, la noche y el ocio eran propiedad de la Corona; y el clero las cercaba. El ocaso solar marcaba el final de todo; menos de los aquelarres… hasta que el Rey Sol de Francia –Luís XIV- lo transgrede y decide proyectar su luz de poder -amparado en las velas- más allá del crepúsculo. En fin, que, hasta mediados del XVIII la fiesta termina con el ocaso. No había noche para la farra”.

Vamos, que hasta bien entrado el XIX no hay fiesta nocturna más allá de París y la cosa no prosperará hasta la industrialización de las ciudades y la llegada del ocio urbano y -detallito a tener en cuenta- ¡la electricidad!; aunque algún antropólogo ilumine fugazmente el tema con luz de gas.

Al caer la noche, cada mochuelo a su olivo.

Sepan, mantengo que la fiesta nocturna en sí, con toda su fortaleza y esplendor, tiene poco más de un siglo.

Y sólo se universalizará a partir de la IIGM, ya en los años 50, cuando Le Güisqui a Go-gó[3] parisino salte el charco y en forma de franquicia recorra los Estados Unidos abriendo garitos, desde Chicago a Los Ángeles, hasta reinar en Sunsent Boulevard, donde Rhonda Lane pinchaba discos en su jaula y, de paso, ponía de moda a las go-gó dancers

Con esta premisa les adelanté que -leyendo el libro- verían que Benidorm estuvo en la vanguardia mundial y muy por delante de media Europa… desde 1942 hasta hoy en materia de fiesta nocturna.

Ya en faena, conté que Marc Bolan[4], el padre del Glam, el líder de T. Rex, nos había contado, hablando de discotecas (Ballrooms of Mars)[5], que “hay cosas en la noche que es mejor no ver”. Y ponía por testigos a Bob Dylan y a Alan Fred. Vale, si hay cosas que es mejor no ver, no los veamos; pero que alguien nos las cuente.

Y eso es lo que hizo Pedro Delgado Vals, licenciado en Historia, baterista profesional, director de Pipus Records[6], curioso, tenaz y perfeccionista que ya en su momento escribía en fanzines y, ha entrado, por fin, en los orígenes del Pop en Benidorm y nos ha radiografiado la noche.

-II-

El jueves 28 de marzo, Jueves Santo, Miguel Torres me pasó un mensaje sobre la presentación de este libro prevista para el 15 de abril. Me quedé impactado, reclamé el libro, me lo hicieron llegar y… entre esa tarde y “la madrugá” me lo terminé. Primera lectura completa. Fascinante; pero se me quedaba corto.

En Viernes Santo segunda relectura, ya tomando referencias.

El Sábado -día de luto y reflexión antes de la Gloria y la Resurrección- llegó la tercera y definitiva, con apuntes, subrayados y espíritu crítico. Absolutamente total. Tengo en el libro más anotaciones y referencias que en un manual de cuando la carrera.

Este libro es la plasmación de un Benidorm emocional, un Benidorm de glamour; aquel Benidorm desarrollista, de los años 60 y 70 donde cualquier cosa era posible; y en Benidorm se hacía realidad.

Aviso que hay de todo entre sus páginas: antropología social y turística, prospección e introspección vivencial, urbanismo del ocio, biografías de leyenda –algunos de los protagonistas asistían entre el público-, momentos historicistas, narrativa musical, entrevistas, protagonistas variopintos propios de un mundo sin igual como aquel y un escenario único e inigualable: un Benidorm en absoluta ebullición.

-III-

Este libro refleja el idilio de Benidorm y su juventud con la música del momento y lo fascinante de las locuras emprendedoras de los pioneros locales. 22 capítulos que se pasan en nada: te dejan a la espera de más. Y están repletos de vivencias, referencias, datos y relatos. La historia de un momento y una ciudad con sus lugares y protagonistas.

Sí, sin lugar a duda, este es el libro que a Pedro Delgado Casals -a quien conocí brevemente el 8 de abril pasado, junto a Toya y César-, le hubiera gustado leer sobre el ocio nocturno en Benidorm, despejando dudas y abriendo el camino a que muchos recuperen sus recuerdos, su memoria y su juventud.

Sí, es un homenaje a todos los que ayudaron a crear el mito de Benidorm la nuit; y bien documentado. Aunque, seguro, Pedro, que a partir de hoy sale alguien que puede aportar algo más. Bendito sea, porque esta aventura no ha hecho más que empezar gracias a tu trabajo. Desabrochen pues sus neuronas y aporten lo que puedan.

Es una vivisección, en la memoria latente de un organismo complejo como es Benidorm, al compás de la música que se vive y siente, que se escucha y baila, que se interpreta y extasía en todo tipo de locales. Y no olvida puntualmente la comarca.

Esta guía recorre un tiempo que Pedro acota entre el Conjunto Iris y el cabaret Tabaris, pasando por la intrahistoria de cada momento, los personajes protagonistas y las benimérides (efemérides benidormenses), para situar cada cosa en su contexto a través de una línea del tiempo que marca el Festival de Benidorm, año a año.

-IV-

Y luego estoy yo. Yo he alucinado con el devenir de los proyectos, la singularidad de los personajes y lo punteros que fuimos en todo, marcando una época.

Ha sido un despiporre de sensaciones encontradas y he constatado la materialización de historias que me habían contado y este libro ha corroborado.

Benidorm puede sentirse muy orgullosa de un pasado esplendoroso donde muchos se verán retratados y/o sentirán añoranza.

227 páginas en la que me he reencontrado con muchos con los que compartí la segunda mitad de los 80 y cuando yo les señalaba lo fantástico que era vivir aquellos momentos me decían: ¡Pues no veas lo qué fue esto en los 60 y 70!

Y ahora lo he visto; vamos, lo he leído con la fuerza de un visionado.

Así es que, aprovecho esta presentación para felicitar a Pedro Delgado Casals por su entusiasmo, investigación, dedicación, perseverancia y entrega a la causa; a Vicente San Juan por materializar este imponente trabajo y y ya metido en faena, a Ana Pellicer y al equipo de la Concejalía de Patrimonio Histórico y Cultural por apoyar esta iniciativa.

Seguro que, en cuanto tengan este libro en sus manos y lo disfruten como he hecho yo, serán capaces de transportarse hasta ese tiempo, vivir el momento, entrar en los locales, saludar a la concurrencia, sumergirse en el instante y alumbrar muchos detalles más que servirán para reafirmar el acierto, la oportunidad y la idoneidad de reflotar aquellos momentos y colocar a Benidorm en el lugar que le corresponde en este mundo de felicidad al que se llega por la música, el ocio nocturno, los protagonistas y los locales.

Esta es una historia apasionante, única, pionera y fascinante. Una historia de Benidorm la nuit con todos sus protagonistas, muchos de los cuales, venciendo al paso del tiempo, acudieron a la cita.

-V-

Y, de colofón, el fin de fiesta que surgió en el instante siguiente a levantarnos de la mesa. Pedro llamó a sus amigos de New Experience –quien tuvo, retuvo-, que militaron en las filas de Los Signos (60’s), Blue Stars (70’s) y Control (70’s), tres grupos de rock de Benidorm. Sí, provectos músicos con una garra increíble. Y allí sonó lo mejor de Dire Strait, Carlos Santana, Cream… ¡increíbles! Ahí estaban Benjamín García González (batería), Antonio Cano (guitarra), Emilio Cebrián (teclados) y Andrés Garcia (bajo) sacando a relucir virtuosismo, ritmo y cadencia –que ya quisiera un veinteañero- para terminan llamando a Germán Herrera y a Pepe Pareja -cantantes- para evidenciar que siguen siendo alma y espíritu de rock. Fue un déjà vu con Los Signos, Los Diapasons, Control, Benidorm Avenida, Blue Stars, los Dugan, Bambú… musicazos con galones de míticas orquestas y bandas que marcaron décadas en Benidorm y crearon algunos temas locales de impacto. Se nos despidieron con un clásico del grupo setentero granadino Los Ángeles, ‘Momentos’… se que tú quisieras empezar otra vez, pero ya no es el momento de volver

¡Cómo que no!

Esto exige continuar donde Pedro ha dejado esta etapa; a partir de 1978.

¡Ánimo, Pedro!


[1] https://www.youtube.com/watch?v=BW-btVDexEE

[2] Aunque soy alma de Blues -Robert Johnson, Muddy Waters, BB King, Albert King, Buddy Guy, Eric Slowhand Clapton, Rory Gallagher, Gary Moore, Stevie Ray Vaught, Joe Bonamassa… y alucino con Memphis Minnie, Ruth Brow y Carry Smith… y no te digo con Sue Foley y Beth Hart…- el sonido de la flauta del escocés me encandiló muchos años….

[3] Le Whisky à Gogo, fue un club parisino que abrió en 1947 en la rue de Seine bajo el formato de actuaciones en directo, música grabada en disco, fiesta y bebida. Se puede considerar como la primera discoteca en concepto moderno. El estreno y éxito de la película de 1949 Whisky Galore!/Tight Little Island (aquí traducida “¡Whisky a raudales!”/”La pequeña Isla”) catapultó al whisky en todo tipo de garitos y dio fama a la nueva sala de Paul Pacine que triunfó espectacularmente entre los militares norteamericanos y en la jet parisina de postguerra.

Whisky Galore! se basa en una novela del nacionalista escocés Compton MacKenzie que a su vez se basa en un hecho real ocurrido en 1941. En clave de humor la película relata los sucesos vividos en la Isla de Eriskay, en las Hébridas exteriores, ante el racionamiento de whisky por la guerra y el naufragio del SS Politician (en 1941) que transportaba 28.000 cajas de whisky de malta. Los lugareños organizaron expediciones de rescate para los tripulantes y la preciada carga. Las autoridades británicas no lograron impedir que los escoceses se quedaran con el whisky, fracasando en el intento para regocijo escocés.

La fama del local saltó el charco. En 1958, el primer Whisky a Go-Go en Norteamérica abrió en Chicago y se fue extendiendo. A modo de franquicia, el 16 de enero de 1964 abrió en el distrito de Hollywood, en la ciudad de Los Ángeles, California, el más famosos de los Whisky a Go Gó; en el 8901 de Sunset Boulevard, en Sunset Strip, con una actuación en vivo de Johnny Rivers y una DJ llamada Rhonda Lane, que pinchaba discos desde una jaula suspendida a la derecha del escenario. Cuando, en julio de 1965, la DJ bailó durante una actuación, el público pensó que era parte del acto y así nació el concepto de las go go dancers.

[4] Marc Bolan (1947-77) fue el líder del grupo Tyrannosaurus Rex;  T. Rex en una segunda fase. Está considerado como padre del Glam Rock (Rock glamuroso). Arrancó en la subcultura Mod (trajes, parkas, scooters, anfetas y noches de pista de baile). Ferviente admirador de Bob Dylan (Bolan es un acrónimo de Bob Dylan), su Children ofr the Revolution marcó un punto de inflexión en estilos.

[5] Radio Futura hizo una versión patria -Divina (Los bailes de Marte)- pensando en Alaska (“estuviste con Kaka de Luxe, pero no te oí cantar) y sustituye a David Bowie por Bon Dylan y a ‘tu mami’ por Alan Fred. Pero concluyen que “hay cosas en la noche que es mejor no ver”

[6] Pequeño sello discográfico con sede en Benidorm dedicado a promocionar y a editar discos en vinilo de grupos de rock y pop alicantinos principalmente noveles que cantan en castellano, en valenciano o en inglés. Organizan un pequeño festival de rock con sus artistas brindando la oportunidad para intentar lograr una carrera profesional. Promocionan y lanzan a artistas con repertorio propio. https://www.youtube.com/channel/UC6TxRSForr3cUCpl70qylPQ

DE ISRAEL, DIGO… (y II)

Los otomanos no vieron mal la llegada de comunidades sefardíes a la región a comienzos del XVI que se integraban en el Yishuw[1] de la Siria otomano, principalmente en Galilea y aceptaron la propuesta de Carlos III de España en 1772, invocando la custodia de los Santos Lugares, por los franciscanos[2].

Y hubo un hecho más que hizo poner los ojos de los europeos -de los británicos, principalmente- en aquella región del mundo. Edward Gibbon[3] culminó la publicación de su Historia de la decadencia y caída del Imperio Romano en 1789 y el “Decline and Fall”, como se la conoció popularmente, puso en alerta a todo el imperio británico tanto para evitar lo que narró Gibbon como para perpetuar su hegemonía. Y la palabra Palestina empezó a aparecer en los mapas y el control de esa zona en el ideario imperialista británico.

Mientras tanto, sobre la región en cuestión, desde finales del XVI los gobernadores de las provincias otomanas crearon sus sagas familiares y los jeques de los clanes organizaron su vida con tal nivel de desarrollo que en 1841 el sanjacado de Jerusalén pasó a depender directamente del gobierno central otomano​ -ante el aumento de las peregrinaciones de los fieles de las tres religiones monoteístas y el asentamiento de los cónsules de las naciones europeas[4], en el periodo del Tanzimato[5]– y en 1872 se configuró en provincia independiente como mutasarrifato[6] de Jerusalén, que extendió sus dominios hasta el mismo Egipto y que figuraba referenciado en los mapas y documentos turcos como ‘Sur de Siria’ y Palestina para la Occidentales.

Es que la irrupción del barco de vapor (1830), el sistema postal (1835), el telégrafo (1865) y la primera carretera en la región (1868) agilizó el sistema de llegada y asentamientos porque por ahí también entraron las libras de los banqueros judíos (Rothschild y Montefiore) que fueron comprando tierras y repartiendo parcelas. Y a pesar de las desgracias -terremoto de Galilea de 1837 y la sucesión de epidemias entre 1831 y 1878- los judíos, expulsados de medio mundo, siguieron llegando, al mismo tiempo que los peregrinos y los arqueólogos. No olvidemos que desde la fundación de la Palestine Exploration Fund[7] (1865) no paran de surgir “Indianas Jones” en busca de arcas perdidas por allí.

Y hasta allí, en el último tercio del XIX, comenzaron a regresar los judíos motivados por la causa sionista. Expulsados repetidas veces de Israel antes del siglo VI, expulsados posteriormente de la Europa medieval -Inglaterra (1290), Francia (1394) o España (1492)-, repartidos por medio mundo, fieles de la Torá y que siempre han creído en “la Tierra Prometida” volvían en pequeños grupos a ella.

El sefardí Sir Moses Haim Montefiore (1784-1885), banquero, filántropo y Sheriff[8] de Londres había fundado, en 1860, el primer asentamiento judío fuera de la Ciudad Vieja de Jerusalén animado por las prédicas del sefardí gibraltareño Judah Bibas (1789-1852), Gran Rabino de Corfú, quien no paraba de animar a los judíos a realizar la aliá (el retorno tras la diáspora). En 1862 el rabino prusiano Zvi Hirsch Kalischer (1795-1875) había puestos las bases para la fundación de una sociedad de construcciones urbanas y agrícolas destinada a explotar los viñedos de la Tierra de Israel, así como la creación de una guardia de autodefensa judía. Las ideas de Kalischer impactaron sobre Moritz (Moses) Hess, amigo personal y colaborador de Karl Marx y Friedrich Engels -en los días que apostaba por la asimilación de los judíos al movimiento comunista- que apoyaban la llegada de judíos al Sur de Siria, bajo poder otomano.

Y en ella se centró el movimiento sionista de Theodor Herzl[9] que cobró fuerza durante el siglo XIX y eligió aquella tierra de Oriente Medio en base al Antiguo Testamento. Se habían barajado otras propuestas, pero la tradición judía indica que la zona en la que se asienta Israel es la tierra que fue prometida por Dios a Abraham y sus descendientes para reconstituir el Hogar Nacional Judío.

Herzl, corresponsal en París del Neue Freie Presse[10], constató y analizó el crecimiento del antisemitismo, especialmente con el Caso Dreyfus[11] (1894). En su libro Der Judenstaat (El Estado Judío; 1896) Herlz planteó que la solución no era otra que la creación de un Estado judío independiente y soberano para todos los judíos del mundo. Así que organizó el Primer Congreso Sionista (1897, Basilea, Suiza); fue elegido presidente (cargo que ocupó hasta su muerte en 1904). En el congreso de Basilea se adoptó el himno nacional hebreo (Hatikva) y se configuró el llamado Programa de Basilea que estableció las metas del sionismo y su fórmula para lograrlo: se organizó la compra de tierras y se formaron los kibutz (una de las principales ideas del sionismo socialista), se diseñó la federación de todos los judíos en grupos locales o generales, de acuerdo con las leyes de los diferentes países, se planteó e fortalecimiento del sentimiento y la conciencia judía y, finalmente, se diseñaron las medidas preparatorias para el logro de los subsidios gubernamentales necesarios para la realización de los objetivos sionistas. También comenzaron a tejerse las relaciones diplomáticas con el Imperio otomano para el traslado de judíos alemanes hacia la región, pero no dieron fruto por lo que Herlz tanteó al Reino Unido y comenzó a tejer la estructura que le llevaría al apoyo total británico.

El auge del antisemitismo en el Este de Europa -principalmente en la Rusia zarista, Ucrania y Polonia- provocó las dos primeras aliyá[12] o migraciones judías hacia Palestina, entre 1881 y 1903, y entre 1904 y 1914. Entre ambas se vivió un intenso proceso político en el Imperio Otomano a cargo del Movimiento de los Jóvenes Turcos[13] que inició una etapa constitucional, la segunda, y llevó, con el tiempo, a la disolución del imperio.

Esto de hoy, lo del territorio que algunos llaman Palestina, no es más que una cuestión colonial mal resuelta desde finales del XIX y que se mete de lleno en la IGM y que se nos va complicando hasta este momento clave del siglo XXI. Una cuestión que localizamos en el avispero de Oriente Medio-Middle East una referencia que fue utilizada por vez primera en 1902 por Alfred Mahan, especialista naval estadounidense y uno de los primeros teóricos sobre geopolítica, en una discusión sobre la estrategia imperial británica para referirse a las zonas al norte y al este de India, que era entonces lo que primaba.

El área, recordemos, fue conquistada por los británicos, encuadrados en el bando Aliado durante la Primera Guerra Mundial. Para reemplazar a la vieja administración otomana se creó la Administración del Territorio Enemigo Ocupado (OETA), que en su franja Sur se concedió a los británicos (y la de la franja Norte a los franceses). OETA-Sur se centró en los viejos sanjacados otomanos de Jerusalén, Nablus y Acre. La administración militar fue substituida por una administración civil británica en 1920 y el área de OETA-Sur fue incorporada al Mandato británico de Palestina en 1923 después de realizar algunos ajustes fronterizos sobre la administración francesa sobre Siria (OETA-Norte y OETA-Este).

Y para mí, que el problema viene de cuando los ingleses se creían los reyes del mambo mundial y llegaron a comprometerse y declarar -por un lado- que reconocería la independencia de varios pueblos árabes (porque necesitaban su apoyo en la IGM contra el Imperio Otomano; tiren de las historias de Lawrence de Arabia, el coronel Thomas E. Lawrence[14]) y -por otro- el tema económico de cuando el mundo giraba sobre el eje de la libra esterlina, desde tiempos de la Revolución Industrial: los británicos de principios del XX estaban económicamente exhaustos y los banqueros judíos tenían mucho dinero al abasto. Y con el dinero que negociaron con el barón Lionel Walter Rothschild, líder de la Comunidad judía, comenzaría el camino de la victoria en la IGM.

Conseguidas las cuestiones -apoyo árabe, dinero judío- hubo que comenzar a atender los compromisos adquiridos. Pero los británicos -y los franceses, colaboradores imprescindibles- entre enero y mayo de 1916, se habían repartido lo entonces conocido por ‘Asia Menor’ a través del Tratado Sykes-Picot[15] -en busca de petróleo- y, consecuentemente dejaron a los árabes -instalados en el Medievo- con un palmo de marices. El tratado entre británicos y franceses era un acuerdo secreto, donde también entraban en la mordida la Rusia Zarista y una joven Italia -unificada en 1871- que ya en 1911 le había ganado al imperio otomano Libia y el Dodecaneso, y quería más.

Abundando en la materia, con inaudita prepotencia, en noviembre de 1917, el ministro británico de Asuntos Exteriores, Arthur James Balfour, hizo su célebre declaración -Declaración Balfour-: “El gobierno de Su Majestad contempla favorablemente el establecimiento de una patria nacional para el pueblo judío en Palestina”. Ahí los ingleses metieron en la ecuación Palestina, algo que hasta entonces sólo figuraba en algunos de sus mapas, pues nadie llamaba así al lugar. Las investigaciones, de principios del siglo XX, sobre el imperio Romano había sacado a la luz Palestina.

Y los primeros judíos del movimiento sionista de la segunda aliá ya se habían establecido en Palestina. En plena IGM, aquel fue un momento de euforia. Balfour contentó al mundo señaló en su declaración que “no se hará nada que pueda perjudicar los derechos civiles y religiosos de las comunidades no judías existentes en Palestina” y las pocas conciencias que hubiera sobre las comunidades árabes en la zona, que no aparecían en el texto, aplaudieron.

En diciembre de 1917 las tropas británicas tomaron Gaza, Jaffa y Jerusalén. El general Allenby[16], en memoria de rey Ricardo Corazón de León -que no pudo hacerlo en 1192-, entró -a pie, en señal de respeto y no a lomos de su caballo- por la celebérrima Puerta de Jaffa, el 11 de diciembre en Jerusalén. Acababan, con esta marcha triunfal, cuatro siglos de dominio otomano en Oriente Medio, se daba “un regalo de navidad al pueblo e historia del Reino Unido[17] y comenzó la etapa de administración británica que llegaría hasta 1948.

Aquí debo destacar una cuestión determinante muy británica. El Informe Campbell-Banerman[18] de 1907 que manifestaba las intenciones del Imperio Británico de perpetrarse en su papel hegemónico e impedir tanto la consolidación de una futura unión de los árabes del Creciente Fértil como el sionismo. La búsqueda de un hogar nacional judío se conformaba como la solución ideal.

En esa línea, Balfour, sin temblor en el trazo de su pluma, en enero de 1919, en una carta de al líder de la comunidad sionista, el barón Rothschild, lo dejó muy claro: “En Palestina ni siquiera nos proponemos pasar por la formalidad de consultar los deseos de los actuales habitantes del país… Las cuatro grandes potencias están comprometidas con el sionismo, y el sionismo, bueno o malo, correcto o incorrecto, está anclado en antiquísimas tradiciones, en necesidades actuales y en esperanzas futuras de mucha mayor importancia que los deseos o preocupaciones de los 700.000 árabes que ahora habitan esta antigua tierra[19]. Pues para qué vamos ya a más.

En febrero de 1919 los árabes de Palestina auspiciaron una plataforma que apoyaba la unidad con Siria basada en su oposición al sionismo y solicitaron al rey Faysal[20] que les representara en la Conferencia de Paz de París pero cuando el 28 de junio de 1919 se firma el Tratado de Versalles -que dio el control del territorio denominado Palestina a Londres- los franceses, que tutelaban Siria, no creyeron conveniente esa representación cuando ya se vivía un clima de abierto enfrentamiento entre judíos y árabes en Palestina y sabían que el Congreso Nacional árabe a celebrar en julio en Damasco iba a solicitar la creación de la Gran Siria: Siria, Líbano, Jordania y Palestina.

Así, cuando en abril de 1920 el Consejo Supremo Aliado fijó en Sanremo (Italia) las posiciones finales, dejó listo sobre el mapa lo que el Tratado de Sèvres (agosto de 1920) dio forma definitiva en aquel al puzle mal ensamblado del acuerdo Sykes-Picot en Asia Menor/Oriente Próximo la cosa quedó coja: Turquía, derrotada en la IGM, salvaba la península de Anatolia y Estambul, gracias a la irrupción de un nuevo líder (Mustafa Kemal ‘Ataturk’); Reino Unido, vencedor, se quedaba con la región en cuestión así como con Irak y Transjordania (un topónimo creado para la ocasión); y Francia, también vencedora, conseguía la Gran Siria, que luego se dividió entre Siria y Líbano[21] sin querer injerencias con los británicos por la cuestión de los árabes palestinos. Británicos y franceses se inventaron unos nuevos ‘estados’ donde tribus y clanes aún medievales se había construido su universo de vidas; instauraron monarquías afines surgidas de las principales familias árabes y, en realidad, montaron un pifostio[22] territorial aglutinando, sin ton ni son, a musulmanes chiíes y suníes, a kurdos y cristianos, a túrquicos y drusos. Y en este sindiós, todos a entenderse; porque en función del secreto Sykes-Picot[23], desvelado por los bolcheviques, Palestina quedaría sometida a un mandato internacional tan difuso como sus fronteras.

Y en ese momento -primera década del siglo XX- surge, más que Palestina, la palestinidad auspiciada por el periódico Falastin[24].

Lo de la palestinidad es la idea de la construcción de una identidad nacionalista palestina -islámica- surgida en los años 20 del siglo XX; nunca antes. Pero es a partir de 1964 cuando desarrolla un nivel de conciencia nacional -la del pueblo palestino- que, si bien pudo estar larvada desde principios del pasado siglo, nunca llegó a materializa porque nunca alcanzaron su independencia como pueblo, nación o entidad. Sí, es verdad, hubo un tránsito: el de una identidad árabe-otomana a una identidad árabe-palestino. Pero poco más. La idea de una nación Palestina no saldrá a la luz hasta 1964, con la creación de la OLP[25], Organización para la Liberación de Palestina.

Les reconozco que en lo de la palestinidad siempre ha habido elementos cercenantes: que si los gobernantes turcos, que si las potencias europeas de inicios del siglo XX (mandato británico y sus condicionantes), que si el sionismo que llegaba establecerse en el territorio a finales del XIX, que si los demás pueblos árabes… que esto último también debe entrar en la ecuación. Con todo ello, en el concepto de la palestinidad entran de lleno muchos olvidos, demasiados engaños, innumerables falsedades y grandes dosis de hipocresía de unos y de otros.

Lo de la palestinidad es un fenómeno reciente -prácticamente un siglo-; lo de Israel tiene, por lo menos, más de tres milenios de antigüedad.

Estamos hablando del Máshreq o Máshrek (Al-Mašriq), del lugar por donde sale el sol, el Levante, la parte más oriental del mundo árabe. La parte opuesta, recordemos porque nos afecta, se denomina Magreb o Poniente.

Los estados mashrequíes modernos son el producto de la desintegración del Imperio Otomano por el rol que jugaron las potencias mandatarias Francia y Gran Bretaña. El trazado artificial de las fronteras estatales por razones geopolíticas no coincidió con las nacionales y así se gestaron las fracturas en las lealtades nacionales, comunitarias o clánicas. Esto fue decisivo a la hora de gestar minorías nacionales, religiosas y lingüísticas al interior de los nuevos estados tras el declive otomano, la colonización británica, la promulgación de la Declaración Balfour y la caída del Estado árabe en Damasco. En ese contexto, Gran Bretaña y Francia configuraron el sistema de mandatos en la zona del Levante. La esencia de Palestina surge -mal que se quiera- a partir de tres documentos: la correspondencia Hussein-McMahon[26] (1915), el Acuerdo Sykes-Picot (1916) y la Declaración Balfour (1917).

Y el Mandato Británico sobre Palestina que se inicia, de facto, en 1917, se oficializa el 24 de junio de 1922 -cuando se crea el emirato de Transjordania y se separa esa parte- y finaliza en 1948. En el censo de 1922[27] bajo el Mandato Británico se cifra en 760.000 los residentes entre árabes musulmanes, beduinos, judíos, drusos, sirios, sudaneses, egipcios y griegos para los que las tropas y la administración británica debía asegurar el establecimiento de un hogar nacional judío y salvaguardar los derechos civiles y religiosos de todos los habitantes de Palestina.

Como ya hemos señalado, en el XIX, la inmigración judía hacia Palestina apenas encontró oposición por parte de los árabes palestinos, pero a medida que se incrementaba significativamente en las primeras décadas del siglo XX la población árabe comenzó a recelar. La inmigración judía estaba controlada por la Histadrut[28], una estructura sindical que seleccionaba a los aspirantes por su afinidad política. Además, las tierras compradas a los árabes por la Agencia Judía para la Tierra en Israel eran arrendada bajo la condición de que solo pudiera ser trabajada por judíos y de que ningún no judío pudiera arrendarla.

Desde 1920 se han venido sucediendo los conflictos entre judíos y la población árabe de la región; en esa fecha los judíos crearon el Haganá[29], estructura paramilitar de defensa. En 1921, el gobierno británico suma un nuevo error y nombra Gran Muftí de Jerusalén a Amin al-Husayni[30], líder religioso musulmán que había servido en el ejército otomano. Él fue el primer inductor de las revueltas árabes (1921, 1929 y 1936) y de la creación de las guerrillas que atacaban a judíos y británicos y la respuesta judía a través del Irgún[31] y los extremistas del Lehi[32].

En 1922, la Liga de Naciones oficializó el Mandato Británico sobre Palestina y en los disturbios de 1929 un total de 133 judíos y 110 árabes fueron asesinados, la mayoría de estos últimos a manos de la policía y el ejército británicos. Todo comenzó -aquel territorio es muy dado a propagarlos- ante los rumores de que los judíos planeaban tomar el control del Monte del Templo en Jerusalén y los árabes protagonizaron la matanza de Hebrón (agosto de 1929).

Para quitarse problemas de en medio -y añadirlos años después- en 1923, el Reino Unido transfirió los Altos del Golán al Mandato francés de Siria, a cambio de la región de Metula que estaba en el Líbano.

La situación empeoraba y se complicó en 1933 con la llegada de los nazis al poder en Alemania, favoreciendo la quinta y más masiva aliyá. A partir de entonces aumentó entre la población árabe palestina un sentimiento nacionalista que alcanzó su apogeo durante la Gran Revuelta Árabe (1936-1939) paralela a la guerra civil española en la que entre los propios árabes también se ajustaron cuentas como excusa entre clanes rivales.

Al estallar la IIGM la mayoría de los árabes apoyaron el nazismo que ahora se justifica como iniciativa de conveniencia. Ahora se justifica el apoyo señalando que se apoyaba a los enemigos de los británicos que estaban ocupando Palestina. De esta forma, apoyando a los nazis, se vengaban de los británicos por no cumplir sus promesas en la IGM. El Gran Muftí de Jerusalén, Amin al-Husayni (por entonces huido en Irak), declaró formalmente la yihad contra los Aliados el 25 de noviembre de 1941 y optó por apoyar al Reich alemán. A pesar de ese llamamiento unos 6.000 árabes se unieron a las tropas británicas (junto con 26.000 judíos) en la zona del Mandato Británico.

Durante la IIGM las autoridades británicas se empeñaron fuerte y decididamente en impedir la llegada de más judíos que huían del conflicto a la región. El que en febrero de 1942 un submarino ruso, informado por los británicos, torpedeara al viejo Struma[33] y murieran 768 judíos fue el detonante de la acción del Lehi de asesinar al Ministro británico para Oriente Medio, teniente coronel Walter Edward Guinness[34], en noviembre de 1944 agriando las relaciones de británicos y judíos.

El petróleo volvió a ser el eje de supervivencia británica y durante la IIGM prefirieron dar de lado a los judíos y apoyar a los árabes; pero a los árabes productores. Y tras la guerra, 250.000 judíos supervivientes fueron abandonados a su suerte en los campos de refugiados europeos. Pese a la presión de la opinión pública internacional, y en particular a las repetidas peticiones del presidente estadounidense Harry S. Truman y las recomendaciones del Comité Anglo-Americano de Peticiones, los británicos rechazaron revocar la prohibición de la inmigración y admitieron solo a 100.000 refugiados en Palestina. La respuesta judía llegó a través de ataques de represalia contra los británicos. El 22 de julio de 1946, por este motivo y tras la Operación Ágatha[35], en represalia, el Irgún voló el Hotel Rey David de Jerusalén[36], el cuartel general de la administración británica, matando a 92 personas. Los británicos anunciaron su intención de abandonar la región.

A partir de entonces la cuestión de Palestina se planteó por primera vez ante la Asamblea General de Naciones Unidad. Y en 1947, en la resolución 181[37], la Asamblea decidió dividir Palestina en dos Estados; uno judío, con el 55% por ciento del territorio (incluyendo por completo el desierto del Néguev), y otro árabe, con el resto del territorio excepto el área circundante a las ciudades de Jerusalén y Belén, que sería considerada una zona internacionalizada. Esta resolución fue aceptada por los dirigentes judíos, pero rechazada por las organizaciones paramilitares sionistas y por los árabes en su conjunto.

El Mandato Británico expiraba el 15 de mayo y en la tarde del 14 de mayo de 1948 David Ben Gurión[38] proclamó ante el Minhelet HaAm (consejo popular, predecesor del primer consejo de ministros), en el marco de una ceremonia solemne celebrada en el Museo Tel Aviv, la creación del Estado judío que, de inmediato, fue reconocido por los EEUU[39] y la URSS (18 de mayo). Paradójicamente, el segundo país en recocer al Estado de Israel fue Irán, gobernando por el Sha[40]. La URSS[41] fue la única potencia que apoyó decididamente el mantenimiento firme del plan aprobado, oponiéndose a la marcha atrás de EEUU en los meses que transcurrieron entre la resolución de la ONU y el final del mandato británico. La URSS confiaba en Israel de marcado carácter socialista como estado satélite en la zona. En estrecho contacto con la Agencia Judía, impidió que ninguna otra resolución de la Asamblea General se opusiese al Plan de Partición. El 15 de mayo , justamente en la fecha del final del Mandato Británico y con el Estado de Israel creado unas horas antes, cinco ejércitos regulares de los países árabes vecino (Transjordania, Egipto, Siria, Líbano e Irak) y cientos de voluntarios árabes llegados para la ocasión invadieron al recién creado Estado de Israel para destruirlo iniciándose de esta manera la guerra árabe-israelí de 1948, que tras varias batallas decisivas y dos treguas supuso la derrota árabe frente a las fuerzas israelíes.

Después de la guerra de 1948, la Asamblea, en su resolución 194[42] de 1949, estableció la Comisión de Conciliación de las Naciones Unidas para Palestina para ayudar a las partes a alcanzar una solución definitiva, reafirmando al mismo tiempo los derechos de los refugiados palestinos al regreso y a la restitución.

En 1949 se firmaron en la isla de Rodas una serie de armisticios entre Israel y los países árabes[43] que fueron reconocidos por la comunidad internacional y la misma ONU. El armisticio determinaba que un 78 % del territorio del viejo Mandato británico de Palestina quedaba en manos de Israel, y pasaba a formar parte integral del territorio israelí y sus fronteras definitivas, mientras que el 22 % del territorio restante que componían la Franja de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este quedaron en manos del Reino de Egipto y Jordania. En los años posteriores las fronteras se irían modificando durante las sucesivas guerras árabe-israelíes.

Todo esto es consecuencia, insisto, del ego británico, del tradicional menosprecio a los árabes palestino hasta por los mismos árabes y de un mal resuelto colonialismo que obvia a Israel y se basa en la palestinidad.

Al margen de esto, mi condena a los asesinatos indiscriminados y mi apuesta por la paz y el entendimiento que estaba en marcha.


[1] Cuerpo de residentes judíos en la Tierra de Israel bajo dominio otomano. El término todavía está en uso para denotar a los residentes judíos anteriores a 1948 en la Tierra de Israel.

[2] Conjunto de órdenes religiosas mendicantes relacionadas entre sí, en el marco de la Iglesia católica y según el ideario de san Francisco de Asís, a partir de 1209.

[3] Edward Emily Gibbon (1737-1794); historiador británico, considerado como el primer historiador moderno y uno de los historiadores más influyentes de todos los tiempos. Su obra magna, The History of the Decline and Fall of the Roman Empire (Historia de la decadencia y caída del Imperio romano), publicada entre 1776 y 1788, es un trabajo fundamental cuya influencia perdura hasta hoy en día, no solo para comprender la evolución historiográfica sobre este tema —que no el estado de la cuestión, dado que la obra está, lógicamente, desfasada—, sino también como sólido hito metodológico en el estudio histórico.

[4] La primera oleada de consulados la integraron los Prusia en 1841, EEUU en 1844, Francia 3n 1847, Austria en 1849, España en 1854, Persia en 1857, Rusia y Grecia en 1858 y México en 1865.

[5] Período entre 1839 y 1876 en el que en el seno del Imperio otomano se ejecutó una política de renovación a todos los niveles, en un intento de modernizar el Imperio Otomano ante la presión de las potencias occidentales.

[6] Subdivisión administrativa del Imperio Otomano que gozaba de notable independencia y territorio y a cuyo frente se encontraba un mutasarrif, cargo preeminente del sultán que podía mantener relaciones con otras naciones.

[7] Fondo para la Exploración de Palestina, fundada en 1865 bajo el patrocinio de la reina Victoria I del Reino Unido. Impulsó la excavación arqueológica de numerosas localizaciones bíblicas y en etapas posteriores, en diversas zonas del Levante mediterráneo; así como diferentes estudios relacionados con la historia natural, antropología, historia y geografía y edita aún el periódico Palestine Exploration Quarterly,  dedicado al estudio de la historia, la arqueología y la geografía del Levante. Sigue en activo hoy en día.

[8] Cargo del Tribunal Penal Central londinense.

[9] Theodor Herzl (1860-1904); periodista, dramaturgo, activista político y escritor austrohúngaro de origen judío, fundador del sionismo político moderno. Creó la Organización Sionista y promovió el retorno e inmigración de la diáspora judía hacia el actual territorio de Israel, en ese entonces bajo dominio del Imperio Otomano, en un esfuerzo por formar un estado judío. Aunque murió antes de su establecimiento, es conocido como el padre del Estado de Israel.

[10] Neue Freie Presse (Nueva Prensa Libre) fue un periódico vienés fundado por Adolf Werthner, Max Friedländer y Michael Etienne el 1 de septiembre de 1864 como escisión del periódico Die Presse. Se editó hasta el 31 de enero de 1939 fecha en que la Neue Freie Presse y el Neue Wiener Journal se fusionaron con el Neue Wiener Tagblatt bajo el nombre de este último.

[11] Un notorio proceso antisemita ocurrido en Francia, en el que un capitán judío del ejército francés, Alfred Dreyfus, fue injustamente acusado de traición, inculpado de espiar para Alemania.

[12] Aliyá/aliá, en plural aliot, es el término utilizado para llamar a la inmigración judía a la Tierra de Israel. El concepto de aliá a la Tierra de Israel (Eretz Israel) es central en la cultura y la religión judía y constituye la base fundamental del sionismo.

[13] Sobrenombre de un partido nacionalista y reformista turco de principios del siglo XX, oficialmente conocido como el Comité de Unión y Progreso (CUP), cuyos líderes se rebelaron contra el sultán Abdul Hamid II, quien fue oficialmente depuesto y desterrado en 1909. Gobernaron el Imperio otomano entre mediados de 1908 y el final de la Primera Guerra Mundial, en noviembre de 1918 cuando la ocupación de Constantinopla vio la partición del Imperio otomano. Durante su gobierno, perpetraron el genocidio armenio y son culpados por promover persecuciones y masacres contra griegos en la Anatolia, fenómenos ocurridos entre 1915 y 1923,1​ periodo en el que se estima que pereció al menos un millón y medio de armenios. Los Jóvenes Turcos tenían sus orígenes en sociedades secretas de estudiantes universitarios y cadetes militares.

[14] (1888-1935); Militar, arqueólogo y escritor británico, oficial del Ejército Británico durante la Primera Guerra Mundial, en la que desempeñó un notable papel como enlace durante la rebelión árabe contra el dominio otomano. Su libro autobiográfico Los siete pilares de la sabiduría (1926) y la repercusión del relato sensacionalista de Lowell Thomas promocionaron su fama internacional como “Lawrence de Arabia”, sobrenombre que dio título a la película de 1962.

[15] Pacto secreto entre Gran Bretaña y Francia, con el consentimiento de la Rusia aún presoviética y el conocimiento de Italia, para el reparto de las posesiones del Imperio Otomano en Oriente Próximo tras la Primera Guerra Mundial. Cuando los bolcheviques se hicieron con el poder, lo publicaron y se lio la monumental. En noviembre de 1918 franceses y británicos emitieron una declaración conjunta asegurando que trabajarían para el “establecimiento de gobiernos y administraciones nativos en Siria y Mesopotamia”… y así nos va.

[16] Edmund Henry Hynman Allenby (1861-1936); mariscal de campo británico. Contribuyó al fin del dominio otomano en Siria y fue alto comisionado de Egipto entre 1919 y 1925.

[17] David Lloyd George, primer ministro del Reino Unido de la época, le había pedido que tomase la ciudad como «regalo de Navidad para el pueblo británico». https://www.lavanguardia.com/internacional/20171211/433572306095/hoy-se-cumplen-cien-anos-de-la-toma-de-jerusalen-por-las-tropas-britanicas.html

[18] En 1907, el Primer Ministro británico Henry Campbell-Bannerman formó un comité de eruditos famosos de Gran Bretaña, Francia, Bélgica, Holanda, Portugal, España e Italia especializado en la historia, la geografía, la economía, el petróleo, la agricultura y el colonialismo para estudiar las posibles maneras de asegurar la prolongación de los intereses colonialistas europeos fuera de su territorio.

[19] https://elpais.com/diario/1982/10/26/internacional/404434803_850215.html

[20] Faysal bin Hussayn de Damasco; expulsado por los franceses en julio de 1920.

[21] Líbano proclamó su independencia en 1941 y no le fue reconocida por Francia hasta 1943

[22] Situación de confusión o desorden, a menudo a causa de alguna reclamación o disputa. DRAE dixit.

[23] Francia pasaría a gestionar lo que hoy es Siria y su influencia encontraría su límite en Mosul, mientras que Reino Unido dominaría Basora y Bagdad y extendería su autoridad hasta Irán. Para Rusia, Armenia y parte del Kurdistán; y para Italia el suroeste de Anatolia.

[24] Fundado en 1911 por Issa El-Issa -un cristiano palestino- editorialmente se oponía tanto al sionismo como a la administración británica. Enseguida se convirtió en el más fiero y persistente crítico del movimiento sionista, al que denunciaba como una amenaza para la población palestina. Filastin ayudó a dar forma a la identidad nacional palestina y fue clausurado en numerosas ocasiones tanto por las autoridades otomanas como por las británicas. El diario continuó su tirada hasta 1967, cuando anunció su fusión con Al-Manar para producir el periódico Ad-Dustuor, con sede en Amán (Jordania), que todavía sigue publicándose hoy en día.

[25] Coalición de movimientos políticos y paramilitares reconocida como representante del pueblo palestino. En 1964 la Liga Árabe acordó crear el Consejo Nacional Palestino quien en su primera conferencia proclamó a la OLP su representante. Tras la deslegitimación del Alto Comité Árabe (del Mandato Británico en Palestina) en 1948 -tras la declaración del Estado de Israel- la Liga Árabe no encontró fórmula para organizar al pueblo palestino hasta llegar la propuesta de Ahmed Shukeiri que materializó la OLP. Yahya Hammuda unificó los grupos tras la derrota en la guerra de 1967 y Yasir Arafat, fundador de Fatá -la principal organización-, lideró OLP desde 1969, siendo admitida como Observadora en la ONU en 1974.

[26] Las diez cartas que se intercambiaron entre julio de 1915 y marzo de 1916 Hussein bin Ali, Sharif de La Meca y el teniente coronel Sir Henry McMahon, alto comisionado británico en Egipto. En ellas, el Gobierno del Reino Unido acordó reconocer la independencia árabe en una gran región después de la guerra a cambio de el Sharif de La Meca lanzara la revuelta árabe contra el Imperio Otomano.

[27] Según el censo de 1922, la gran mayoría de los 757.182 habitantes de esta región multiétnica eran árabes de religión musulmana (incluyendo 590.390 musulmanes suníes y 156 chiíes, así como una población beduina de unos 73.000 habitantes concentrada en el área de Beerseba y al sur y al este de esta localidad), seguidos por judíos (83.694, que eran el 11 % del total y eran en su mayoría inmigrantes askenazíes). Otros grupos minoritarios eran los drusos, sirios, sudaneses, caucásicos, egipcios, griegos y árabes del Hiyaz. Según el informe Hope Simpson de octubre de 1930, la estimación de la población palestina, basada en este censo, era de 486 177 musulmanes, 83 790 judíos, 71 464 cristianos y 7617 de otras religiones, con un total de 649 048 habitantes. En 1945, el estudio demográfico mostraba que la población era ya de 1 764 520 habitantes, comprendiendo 1 061 270 musulmanes, 553 600 judíos, 135 550 cristianos y 14 100 de otras religiones.

[28] Federación General de Trabajadores de la Tierra de Israel (Histadrut), organización de sindicatos de Israel. Fundada en diciembre de 1920 durante el Mandato Británico de Palestina, se convirtió en una de las más poderosas instituciones de la mayor parte del Estado de Israel. La creación del Estado de Israel hizo dueño a la Histadrut de un número de empresas y fábricas y, a la vez, el mayor empleador en el país. Con la creciente liberalización y la desregulación de la economía israelí desde la década de 1980, el papel y el tamaño de la Histadrut ha disminuido, aunque sigue siendo una fuerza poderosa en la sociedad israelí y la economía de la nación.

[29] Organización paramilitar de autodefensa judía creada en 1920 con miembros de los grupos de autodefensa creados judíos retornado desde el imperio ruso (moshavim). Junto con otras organizaciones, fue la predecesora del actual ejército israelí (Tzahal) y su estructura sirvió de base a este último.

[30] Al-Husayni fue declarado culpable del asesinato del comisionado británico para Galilea en la revuelta de 1939, huyó de la región, pasando por Líbano, Irak y finalmente Alemania en 1941 donde se exilió y terminó de activo colaborador de los nazis reclutando musulmanes para las Waffen SS. Tras la IIGM Amin al-Husayni fue encarcelado en Francia y a punto estuvo de ser procesado en los Juicios de Núremberg por crímenes de guerra, pero escapó gracias a la ayuda de los colaboracionistas franceses y consiguió, como otros nazis, refugio en Egipto donde ni las presiones de judíos ni del gobierno socialista de Yugoslavia para juzgarlo por crímenes de guerra fueron atendidas. Desde Egipto Al-Husayni luchó para que los países árabes lanzaran ataques masivos contra el recién creado Estado de Israel en 1948, y se opuso tenazmente a todo armisticio o negociación. Con el triunfo de los Oficiales Libres en el 59 y con Nasser en el poder en Egipto, bajo el panarabismo y el socialismo árabe, perdió influencia y terminó sus días en Libano.

[31] Organización paramilitar escindida de la Haganá por motivos ideológicos en 1937 partidarios de “responder al terror con el terror”.

[32] Grupo paramilitar radical escindido del Irgún. Lehi es el acrónimo hebreo de Luchadores por la Libertad de Israel.

[33] El 12 de diciembre de 1941, el Struma, un viejo barco que había sido utilizado en los últimos años como transporte de ganado por el río Danubio, zarpó del puerto rumano de Constanza, en el mar Negro, con 781 pasajeros, todos judíos, entre ellos más de cien niños y algunos bebés. En Estambul, primera escala, las autoridades turcas permitieron bajar a tierra a 13 pasajeros con pasaporte británico, pero no le autorizaron a anclar y tuvo que permanecer fuera del puerto durante diez semanas sin facilitarle suministros (sí lo hicieron desde la comunidad judía de Estambul). El 23 de febrero de 1942 los turcos ordenaron remolcar la nave, cuyo motor no funcionaba, fuera de las aguas territoriales. En la madrugada del día siguiente, 24 de febrero, el Struma fue torpedeado por el submarino soviético SC-213 y se hundió rápidamente. Murieron 768 pasajeros y los diez tripulantes. Sólo hubo un superviviente: David Stoliar, un joven de 19 años.

[34] Walter Guinness, primer barón de Moyne (1880-1944); militar, empresario y aristócrata irlandés-británico. Sirvió como ministro de estado británico en Medio Oriente hasta su asesinato en 1944 por el grupo armado sionista Lehi. Su asesinato causó un fuerte impacto en la región y el mundo entero.

[35] Sábado Negro: operativo militar llevado a cabo por las autoridades británicas durante dos semanas en busca de judíos sospechosos de actividades terroristas y documentos incriminatorios en Jerusalén, Tel Aviv, Haifa y varias docenas de asentamientos. En ella se asaltó la Agencia Judía para la Tierra de Israel.

[36] Atentado terrorista a la sede de la Comandancia Militar del Mandato Británico de Palestina y de la División de Investigación Criminal que tuvo lugar el 22 de julio de 1946.

[37] https://documents-dds-ny.un.org/doc/RESOLUTION/GEN/NR0/041/19/PDF/NR004119.pdf?OpenElement

[38] David Ben-Gurión (1886-1973), judío nacido en Polonia, fue primer Primer ministro de Israel; llegó de la segunda Aliyá (1904-1914) convirtiéndose en figura importante del sionismo como uno de los líderes del movimiento obrero; primer secretario general de la Organización General de Trabajadores y el primer líder de Mapai (Partido de los Trabajadores de Israel). Encabezó el liderazgo del Yishuv judío en Eretz Israel durante el Mandato Británico, y en su calidad de Presidente de la Administración de Pueblo desempeñó un papel central en la redacción de la Declaración de Independencia de Israel. Primer ministro entre 1948 y 1953, y nuevamente entre 1955 y 1963; fue ministro de Defensa durante diez años y medio y ministro de Transporte (1952).

[39] Tan solo 11 minutos después de hacerse pública la declaración, los EEUU comunicaron su reconocimiento al Estado de Israel, pero el documento oficial no llegó hasta enero de 1949.

[40] Tras Irán, llegaron los reconocimientos de Guatemala, Nicaragua, Uruguay, Islandia y Rumania. Tras la URSS, los de Polonia, Checoslovaquia, Yugoslavia, Irlanda y Sudáfrica.

[41] Los primeros contactos entre soviéticos y movimiento sionista se remontan a 1941 cuando la URSS era aún una aliada de la Alemania nazi (el pacto germano-soviético fue firmado el 28/09/1939). La invasión nazi de la URSS (en junio de 1941) cambió las tornas. El presidente de la Organización Sionista Mundial, Haim Weizmann, se reunió con el embajador soviético en Londres Ivan Maiski; Ben Gurión, presidente de la Agencia judía lo hizo también. Maiski llegó incluso a contemplar la posibilidad de transferir a una parte de los árabes de Palestina para hacer hueco a las y los inmigrantes judíos. El acercamiento que se confirmó con la visita del embajador soviético a Palestina. De vuelta a Moscú, Maiski, convertido en vice-Comisario del pueblo para asuntos exteriores, redactó en 1944 un informe en el que sugirió que, a falta de revoluciones proletarias en esta región del mundo, se podía jugar con las contradicciones anglo-americanas. Y desde Checoslovaquia, vía aérea, se suministraron las armas a las organizaciones paramilitares judías siendo instructores checos los que formaron a los combatientes judíos.

[42] https://documents-dds-ny.un.org/doc/RESOLUTION/GEN/NR0/046/59/PDF/NR004659.pdf?OpenElement

[43] En 1949 Israel firmó armisticios con Egipto el 24 de febrero, con Líbano el 23 de marzo, con Transjordania el 3 de abril y con Siria el 20 de julio. Tras la contienda, Israel aumentó su territorio en cerca de un 23 % más de lo asignado inicialmente por las Naciones Unidas. La franja de Gaza y Cisjordania fueron ocupadas por Egipto y Transjordania respectivamente.

DE ISRAEL, DIGO… (I)

No ha mucho caminábamos hacia un idilio en las relaciones de Israel con sus vecinos árabes. En los últimos años, Israel había estrechado sus relaciones con los estados del Golfo, impulsados por una animadversión compartida hacia Irán. Entre agosto y diciembre de 2020, por los Acuerdos de Abraham[1], que potencian el papel de Arabia Saudí, cuatro países árabes -Emiratos Árabes, Sudán, Marruecos y Baréin- establecían relaciones; Marruecos incluso firmaba acuerdos de defensa. A fecha de hoy, 164 de los 193 países de la ONU reconocen al Estado de Israel. Se mantienen en su negativa a hacerlo Irán, Argelia, Afganistán, Venezuela, Kuwait, Líbano, Libia, Sudán, Siria, Arabia Saudita, Omán, Iraq, Pakistán, y Qatar.

Afectado por lo que pasa en Israel y con Israel; traumatizado por los asesinatos; desconcertado por las reacciones; incómodo por el tratamiento informativo; compungido y apesadumbrado por el desarrollo de los acontecimientos; perplejo por la determinación con la que se está actuando, atónito ante muchos posicionamientos y desesperanzado ante lo que pueda venir, escribo esto… porque esto es una cuestión colonial mal resuelta desde finales del XIX.

Como explica el profesor de la Complutense Julio Trebolle[2], “Israel nació a la historia en medio de pueblos del antiguo Oriente que poseían una larga tradición guerrera y concepciones muy arraigadas en torno al carácter sagrado de la guerra”. Pues así, de guerra va; ¡qué les voy a contar!

‘Antiguo Oriente’ esa sí que es una buena localización para comenzar esta historia. Se trata de un territorio de Asia occidental en tránsito hacia noreste de África integrado en la llamada Media Luna Fértil[3]; el lugar de la revolución neolítica[4] y de la revolución urbana[5]: las ciudades. Y más que un territorio, el término supone una transición entre el IV milenio a.C. y el siglo VI a.C., pero que sigue ahí.

Es el lugar que todos estudiamos en la escuela o en el instituto donde nos hablaban de Mesopotamia (Asiria y Caldea), Persia y Media, Fenicia, Canaán y Siria, el valle del Jordán, la Arabia preislámica, Anatolia, Egipto y Creta. Y es que, parece a la vista de los acontecimientos, tal como se supone que lo aprendimos, lo olvidamos. Tal vez sea porque, en su día, lo compusimos como una imagen mítica y no real.

Esta historia de Israel comienza en la Edad Antigua[6] en el territorio de Canaán, una franja de tierra entre el Mediterráneo y río Jordán; es Asia, pero estamos en la orilla del Mediterráneo.

Hasta ahora sabemos que una cultura originaria de Siria se estableció en Canaán y tras ella se sucedieron las migraciones. Jericó[7], en el valle del Jordán, al Este de Jerusalén, es una de las ciudades más antiguas habitadas de contino desde hace 9.000 años.

Pero la de esta tierra, en sus conjuntos, y sus gentes es una historia que arranca sobre el 3.000 a.C. y que en una de sus etapas llega hasta el tiempo en que Roma, la Roma imperial, ordena cambiar el nombre al territorio como castigo a los hebreos tras una rebelión entre los años 132 y 135. Será entonces cuando, para humillarlos, llamen a aquella tierra Palestina; pero este post va de Israel y de la forma de ser del colonialismo británico que nunca hizo amigos y traicionó a todos.

Comienza esta historia en el tiempo en que se unifican tribus y surgen las primeras civilizaciones, en torno a ciudades-estado que funcionan con jerarquización social, imposición de tributos y apropiación -por ser exquisitos- de excedentes de producción de las demás ciudades, tribus y pueblos en cuanto disponen de un ejército suficiente para hacerlo; es una historia siempre supremacista de conquistas y sangre. No es una historia de derechos.

En Canaán, el territorio en concreto al que me refiero, “vivían” los cananeos; y cananeos eran todos los entes tribales que estaban allí. Lo mismo fenicios -en Tiro y Sidón- que los hebreos de Galilea, Samaria, Judea, Perea… que tuvieron siempre el pecado original de vivir en una tierra continuamente codiciada por todos sus vecinos; una tierra que lo mismo les surtía de cereales, agua, vino y miel que, por sus montañas y desiertos de piedra y arena, les servía de endeble dique de contención -porque era frecuentemente superado- frente a otros pueblos codiciosos. Esta es la historia del ser humano de toda la vida.

Por allí, por Canaán, fueron pasando en la antigüedad todos los pueblos e imperios guerreros de la época que transitaban de Asia al norte de África. Y hasta allí, sobre las tribus hebreas principalmente, se dejaron caer los amorreos[8], los egipcios[9], los hicsos[10], los hurritas[11], los hititas[12] o los filisteos[13], que se integraban en el grupo de ‘pueblos del mar’[14] -con el que bautizaron los egipcios y otros pueblos a todo el que llegara a través del Mediterráneo-; también subieron hasta allí las distintas tribus y clanes árabes[15], llegaron los macedonios[16], los bizantinos[17], los cruzados europeos, los turcos… los europeos de nuevo… Todos, siempre, guerreando sin parar para someter y disponer de la deseable posición estratégica que aquella tierra tenía en el contexto conocido: único acceso terrestre -desde y hacia Mesopotamia al norte de África y al golfo de Aqaba- que conectaba con Oriente.

Canaán era una tierra -siempre se dijo- de promisión -en aquellos años- con el hidrometeoro lluvia asegurando la producción de la tierra -pastos y cultivos- o negándola en sus desiertos; marcando siempre el paso a sus habitantes. Un territorio que vivía transitando entre la abundancia y la necesidad -de siglo en siglo-; un lugar muy concreto donde se enclavó la tierra prometida al primer patriarca, Abraham[18] -Yahvé ordenó a Abrahán que dejara su tierra, el país de Ur (Mesopotamia), y emigrara a Canaán[19]-, y sus descendientes… y todas las religiones abrahámicas[20] tiene los ojos puestos en Jerusalén, el punto clave de este territorio, y el conjunto del mismo.

Canaán, ya dije, tenía sus propios pobladores: los cananeos. Y, entre ellos, las tribus hebreas. De lo poco que hay claro sobre aquellas tierras en la antigüedad es que aquellas tribus hebreas -¿doce?-, bajo un líder -¿el rey David?-, se unieron y se enseñorean del territorio que habitaban entre el río Jordán y el Mediterráneo. Hoy podemos situar al David en un contexto de realidad histórica a partir de la Estela de Tel Dan[21]. Hay evidencias científicas -en las excavaciones de Tel ‘Eton[22]– de la existencia de los reyes David y Salomón y del reino de Israel. Y sabemos que egipcios, asirios y babilonios volvieron a dominar el territorio a la muerte de Salomón.

Y fue bajo el faraón Tutmosis III, cuando, por primera vez, el ‘reino’ de Israel quedó bajo tutela egipcia y tuvo que satisfacer cargas impositivas con la obligación de envíos regulares de impuestos, mercaderías, esclavos, prisioneros y “muchas jóvenes, muy bonitas y sin defecto alguno[23].

Las estelas egipcias dan cuenta del pueblo de Israel[24] -que habitaba la tierra de Kinahni (Canaán)-; como lo hicieron después las inscripciones de Karnak (1208 a.C.) y los jeroglíficos del templo de Medinat Habu (1155 a.C.), en Tebas.

La dominación egipcia, por espacio de tres siglos, generó innumerables revueltas que se aplastaban a sangre y fuego, reafirmando la autoridad del faraón de turno, y terminaban con la deportación de un buen número de los rebeldes hebreos.

La mejor descripción física de Canaán la ofrecen los hebreos y se encuentra en el Génesis[25] (10:19) donde se detalla que el territorio de los cananeos se extendía desde Sidón, en dirección a Gerar, hasta Gaza; y en dirección de Sodoma, Gomorra, Admá y Zeboyin, hasta Lasa. De Sidón a Gaza, por la costa, y hasta donde alcanzan las montañas de Emath (Jebel ez Zoble) por el noreste y este, y el desierto moabita al sureste. Sidón hoy es Líbano; Gerar se corresponde con el yacimiento israelí de Tel Haror[26]; Gaza es Gaza; Sodoma, a orillas del Mar Muerto, fue destruida, lo mismo que le pasó a Gomorra y Admá (hay arqueológicamente documentado un episodio sobre un meteorito en la zona hacia el 3.700 a.C.); Zeboyin, coincide con unas ruinas en territorio de Jordania; y Lasa está localizada cercana a las montañas del sistema de Jebel ez Zoble. Un territorio histórico fácilmente reconocible donde estaba el reino de Israel; y también el de Judá.

Aquel reino de Israel tenía fronteras al norte con las ciudades fenicias y el imperio asirio; al este se localizaban los reinos de Aram y Amón. Al sur estaba el Reino de Judá, hebreos también como ellos, y que no tenía salida al mar. Una pequeña parte de la franja litoral la ocuparon por un tiempo los filisteos, y lindaba Judá con tribus árabes y el reino de Edom por el sur y por el oeste el mar Muerto les separaba del reino de Moab.

Modernamente esta descripción la corrobora la labor investigadora del profesor Finkelstein[27] y sus trabajos para documentar los orígenes del reino de Israel.

Y como ya hemos referido, mientras se sucedieron las dinastías de faraones no nos faltan los “documentos” de la existencia de Israel (pueblo y reino) por el que los egipcios sentían predilección guerrera. Desde el 925 a.C. los faraones de la dinastía XXII asaltan una y otra vez aquellas tierras de Canaán. Pero hacia el año 850 a.C. comienzan las irrupciones de los asirios -con una crueldad nunca vista hasta entonces, que cuentan los egipcios- y terminan haciéndose con el control del Reino de Israel. Las fuentes asirias -como el obelisco negro de Salmanasar[28] (827 a.C.)- citan al pueblo de Israel; como las piedras moabitas -Estela de Mesa[29]– dan cuenta tanto del pueblo de Israel como de su dios Yahweh; como las referencias de los persas aqueménidas (550 a.C.) señalan aquel territorio como Yehudá (Judea) y dan cuenta de la deportación de buena parte de sus habitantes.

Un detalle, a no perder de vista. Hacia el 1.150 a.C. las fuentes egipcias señalan la llegada de oleadas de “Pueblos del Mar”; fue en tiempos de Ramsés III. Uno de aquellos pueblos fueron los filisteos… y se convirtieron en los enemigos acérrimos de los hebreos; los philistinus de Flavio Josefo… y de ahí saldrá, con el tiempo, la referencia “palestinos/Palestina”.

Aquí llegados, centremos ya la cuestión filistea: su pentápolis -cinco ciudades: Ascalón, Asdod, Ecrón, Gat y Gaza- se estructurará, más o menos, sobre la actual Franja de Gaza y terminarán absorbiendo la cultura cananea y se difuminarán en la historia. Desde el 722 a.C., tras la irrupción asiria, no hay más referencias a ellos.

El asirio es otro imperio que también documenta y cuenta sus hechos[30]; y es con ellos -y no con los egipcios- cuando en una de las deportaciones masivas de judíos (en el 722 a.C.) se llevaron a todos los hebreos a Nínive. Es en esta época -y no bajo los faraones- cuando se fragua, en el sentir de Israel como pueblo, lo del éxodo[31].

Desde el 533 hasta el 525 a.C. los hebreos establecidos en Canaán pasan a ser una provincia del Imperio persa y es, precisamente, Ciro II el Grande quien ayuda a la restauración de Jerusalén, impulsando el culto tradicional a Yahweh, el Dios de Samaría y Judea. Este periodo persa permisivo fue decisivo en la composición de los libros que componen la Biblia.

Con los macedonios de Alejandro Magno, a partir del 334 a.C. los judíos se impregnan de los elementos de la civilización, el arte, la técnica, la lengua o la filosofía helénicas, que se manifiesta compatible con sus propias tradiciones. Es en esta breve época cuando se ponen las bases para el judaísmo y, además, se puede llegar a entender el contexto en que nació el cristianismo. Y bajo el dominio del reino ptolomeico[32] de Egipto es cuando, por ejemplo, se traduce la Torá al griego.

Pero volvieron los tiempos difíciles. A comienzos del II a.C. pasaron las tierras de Canaán a estar bajo los seleúcidas[33] de Siria que intentaron erradicar todo vestigio de la cultura judía. Pero indomables, al mando de Judas Macabeo, los judíos liberaron Jerusalén (141 a.C.) y quedaron soberanos de sus tierras -dinastía asmonea- hasta la llegada de las tropas de Pompeyo en el 63 a.C. y volver a estar bajo dominio extranjero, ahora de Roma -provincia de Judea-, donde se coloca a Israel en el status de reino tributario.

Judea no estaba considerada como provincia imperial, ni siquiera senatorial; fue despreciado a nivel de territorio subordinado a la provincia de Siria. Roma obtenía muy poco de Judea, pero le importaba porque controlaba las rutas terrestres y marítimas costeras hacia Egipto, el granero del Imperio, y era un territorio fronterizo ante los partos iranios. Tal era el control de Roma sobre aquella provincia que fue el Senado romano el que nombró a Herodes I[34] rey de Judea, Galilea, Samaria e Idumea.

Pero los judíos se rebelaban una y otra vez contra Roma. En el año 66 se desata la primera guerra judeo-romana… y me viene a la memoria la numantina defensa de Masada -la increíble rampa para su asedio y que se inmolaran cerca de mil hebreos en su interior antes de caer prisioneras[35]-. A partir del año 70 d.C. con la destrucción del templo de Jerusalén, por las legiones de Tito, comienzan nuevamente las deportaciones y la dispersión, el Galut[36], porque Roma es férrea en sus decisiones y no quiere que se repitan los acontecimientos. No fue lo suficientemente rápida y efectiva porque se suceden las rebeliones.

En la tercera guerra judeo-romana, en el 132 d.C., el emperador Adriano ordenó una nueva deportación masiva de judíos, escapando de ella mínimas comunidades que se dispersaron por el desierto; en el 135 d.C., durante la revuelta de Bar Kojba, Jerusalén fue arrasada para evitar el retorno de los judíos y sobre sus ruinas se ordenó la construcción de la ciudad romana de Aelia Capitolina, donde los judíos tenían prohibido vivir[37]. Y se dispuso que la Legio VI Ferrata de forma permanente permaneciera en el lugar donde estuvo el segundo Templo de Jerusalén, destruido por las legiones de Tito en el 70; sólo queda desde entonces el Kotel o Muro de las Lamentaciones.

Para completar la humillación a los judíos, se renombró a la región.

Para ello se eligió el nombre de los filisteos -philistinis- a quien Roma identificó como los más sucios enemigos de los judíos. Así se renombró Canaán, la provincia romana de Judea, como provincia de Siria-Palestina. En esa época, la población judía lo pasó mal -esclavizada y exiliada- y la religión judía prohibida, con lo que el centro de la vida religiosa pasó a Babilonia, donde permanecía una importante colonia desde la deportación de Nabucodonosor.

Si esto llega a orejas de Maduro -en el poder desde 2013, no se me olviden-, lo mismo me cambia el texto y es el imperio español -una vez más[38]– el responsable de esto; pero espero que tenga otras fuentes de información.

Hoy, arqueología y ADN por medio, sabemos, como ya adelantamos, que los filisteos llegaron a las costas de Oriente Medio desde el Egeo -de Creta y de Grecia, principalmente-; e incluso hay rastro de más al Oeste aún. Vamos, de origen europeo. Y como se integraron en el conjunto cananeo no hay fórmula de hallar diferencias con los israelíes actuales.

Y no he contado aún lo de Moisés, la etapa en Egipto y la marcha por el desierto camino de la Tierra Prometida, por muchas razones que no vienen al caso, aunque ya lo he dejado caer un poco más arriba. Y sobre deportaciones y cautiverios judíos, sí están documentadas en Asiria y Babilonia… en torno al siglo VI a.C. que es cuando surge el texto de Moisés. No entro en el personaje, contexto e historia, aunque en mi post de diciembre de 2014 sobre los vientos de repulsa[39] ya conté que muy bien pudo cumplirse la narración bíblica en esa parte del planeta porque se dan las condiciones físicas, orográficas y meteorológicas.

Vuelvo a la etapa, aunque seguimos en la Edad Antigua que, como estamos viendo va desde el 3.000 a.C. a la caída de Imperio Romano… para la que aún quedaban unos años.

A principios de siglo IV el imperio romano está gobernado por una tetrarquía: dos augustos (emperadores) y dos césares compartían el poder. Constantino, uno de los augustos, unifica de nuevo el poder imperial en el 324; Constantino, que reformó y cambió tantas cosas -hasta declaró día de reposo semanal el domingo y lo viene siendo desde el 7 de marzo del 321- trasladó la capital imperial a Bizancio y la rebautizó: Constantinopla. Constantino fue quien inició la legislación sobre los judíos -entre la permisividad y el desprecio- llegando a bautizarse como cristiano poco antes de morir. Su madre, Santa Elena/Helena, peregrinó a Jerusalén y… fue ella la que descubrió casi todas las reliquias del Cristianismo[40].

En septiembre del año 394, a la muerte del emperador Teodosio, se divide el imperio romano entre sus hijos Honorio y Arcadio. Y Flavio Arcadio, nacido en Hispania (durante el exilio de su padre), es el emperador de Oriente, donde está la provincia de Siria-Palestina[41].

Los años finales del imperio romano resultaron una etapa dura para la religión hebrea, pues se apuntaló el cristianismo en torno a los Santos Lugares; las peregrinaciones habían comenzado, tras Santa Elena, hacia el año 333[42]. Aunque se mantuvieron algunas comunidades judías en el conjunto territorial, el cristianismo configuró la religión principal de la región.

Bajo el dominio del imperio bizantino no le fue mal al conjunto de las viejas tierras de Canaán, pero de inmediato llegaron los gasánidas[43], un clan árabe cristiano desplazado desde la península arábiga que tomó el control; con los gasánidas en el territorio las revueltas judías se sucedían (Revueltas Samaritanas[44]).

Preparando esa irrupción árabe del siglo V habría que destacar la existencia de relaciones comerciales entre las ciudades de la región y las tribus árabes del Hejaz/Hiyaz, especialmente en las ciudades al sur de Petra y Gaza. Y así penetró el Islam por aquellos flancos.

Nada más despuntar el siglo VII, hacia el 610,​ Jerusalén se convirtió en la qibla (punto focal para la oración musulmana) del Islam y lo fue durante catorce años hasta que fue reemplazada por La Meca (624). Los bizantinos recuperaron momentáneamente el control del territorio (629) y castigaron severamente a los judíos, pero fueron derrotados en la batalla de Yarmuk (636) y desaparecieron del territorio tras la conquista de Jerusalén por el califa Omar[45] (638). Fue entonces cuando se firmó el Pacto de los Umariyya[46], con los derechos y obligaciones de los no musulmanes en aquellas tierras, aunque nuevamente se prohibía a los judíos vivir en Jerusalén, aunque sí entrar a sus sinagogas. Y se posibilitó a los cristianos el hacerlo hacia sus Santos Lugares.

A partir de entonces la región -Yund Filastin[47]– quedó bajo el poder de los califatos Rashidun y Omeyas en la conformación del vasto Imperio Árabe Musulmán. Con la irrupción de los abasíes de Bagdad se vivió una etapa de fuerte desarrollo del comercio entre Oriente y Occidente con lo que pisanos, genoveses, marselleses y venecianos iban y venían mercadeando en aquellas latitudes siendo testigos de las continuas revueltas judías, cada dos por tres, sofocadas cada vez con mayor dureza.

Pero aún con toda la represión en marcha los judíos siguieron controlando la mayor parte del comercio y prosperaron como Gentes del Libro[48], bajo la institución del dhimmi[49]. A pesar de ser ciudadanos de segunda, no sufrieron ninguna persecución importante, ya que no constituían amenaza política ninguna. De hecho, los judíos se adaptaron al mundo árabe, aprendieron su idioma y ocuparon posiciones diversas en todos los sectores de la escala social, incluida la corte.

Con los fatimíes de Egipto, los cristianos europeos tuvieron los primeros problemas de peregrinación a Jerusalén… y comenzaron las cruzadas en el empeño recuperar Jerusalén; es el caso de la Primera Cruzada (1096-1099). Era ‘Tierra Santa’ en el Levante Mediterráneo y hasta allí fueron, se llegaron y crearon por las armas efímeros reinos cristianos[50].

Por aquellos días existían comunidades judías por todo el Mediterráneo y en los reinos cristianos europeos. Ya en el Concilio de Elvira (Granada; 300-324), siglo IV, aparece la mención más antigua a los judíos que existe en España; imponiéndoles normas, claro.

No se les perseguía abiertamente, pero se les estigmatizaba, práctica que iniciaron los musulmanes, tras el asesinato de Omar (644), obligando a los judíos a llevar cintos o telas amarillas y siluetas de asnos (y sombreros puntiagudos) -y de color azul y de cerdos para los cristianos-. Esa costumbre de señalar la adoptamos en Europa y el IV Concilio de Letrán (1215) se implementó como obligatorio el distintivo amarillo -el color del azufre y la traición- (o rojo) para los judíos en la Cristiandad como marca de la infamia… y comenzaron las expulsiones.

Hasta bien entrada la Edad Moderna, los judíos vivieron en Europa sujetos a las leyes cristianas, trabajando como agricultores, artesanos médicos, intelectuales, recaudadores y prestamistas. La usura, recordemos, estaba especialmente mal vista en la Europa medieval, lo que les acarreó cierta inquina. Y eso, unido al aislamiento socio-religioso, a su endogamia y al estigma de la crucifixión de Cristo les hizo víctimas de persecuciones promovidas ante calamidades naturales o pandemias.

Además, desde sus orígenes, el cristianismo se presentó a sí mismo como el ‘Nuevo Israel’ y se escandalizaba de que los judíos persistieran en seguir esperando la venida del Mesías. Esto es clave: la Iglesia católica europea medieval no podía permitir que los judíos negaran a Jesucristo como el Mesías porque eso ponía en cuestión la existencia misma del cristianismo. Y así surgió la base para la acusación contra los judíos de que eran el pueblo responsable de la muerte de Jesucristo en la cruz. Y durante siglos hubo oraciones de rito católico que señalaban a los “perfidis Judaeis”… y así se mantuvieron hasta que en 1959 Juan XXII las anuló[51].

Volviendo la vista atrás, en el ritmo del relato que llevábamos, a pesar de todo, hasta el siglo XI los judíos vivieron una etapa de cierta tranquilidad bien bajo dominio musulmán -en el viejo Canaán, Egipto, Siria, etc.- o bien bajo dominio cristiano en las tierras de la Europa medieval[52] donde lo más que sufrían era menosprecio y persecución, ataques a sus juderías -envidiados por su prosperidad[53]– o eran obligados a conversiones forzosas. La guetización entre judíos y gentiles en Europa propició auge y desarrollo en sus comunidades, pero siempre estuvieron mal vistos.

En el siglo XI todo cambió para los judíos, estuvieran donde estuvieran. Se les persiguió en el Islam y en la Europa de los reinos cristianos. Buen ejemplo es el caso del sefardí Maimónides[54] en su periplo de un extremo a otro del Mediterráneo. Aquí, en Europa, el hecho determinante fue la destrucción de la iglesia del Santo Sepulcro, en el año 1009, ordenada por el califa fatimí al-Hákim bi-Amrillah, pero a Europa “llegó” que habían sido los judíos. Por eso, cuando -casi noventa años después- la primera Cruzada (1096-1099: la única exitosa) concluye con la toma de Jerusalén (15.09.1099) la venganza cayó sobre musulmanes, pero principalmente contra los judíos[55]. Y en aquella primera expedición militar europea camino de Tierra Santa -y en las ocho restantes- se fueron atacando todas las juderías que se encontraban las huestes cruzadas a su paso[56]. Aquel reino cristiano de Jerusalén, sobre buena parte del Israel de hoy día, duró hasta 1187 cuando cayó en poder de Saladino[57].

Punto clave de mi narración es la Tercera cruzada para recuperar Jerusalén; la de Felipe Augusto de Francia, Federico Barbarroja y Ricardo Corazón de León. Jerusalén no se recuperó. El último reducto cristiano en Tierra Santa fue el reino de Acre, bastión que fue conquistado en 1291.

Ah, llegado aquí, tiempo para un apunte quisquilloso: desde la conquista de los reinos de Sicilia y Nápoles en 1504 por las tropas del rey Fernando el Católico, el título de rey de Jerusalén -que desde el siglo XIII estaba ligado al de Rey de Sicilia- está en posesión de la Monarquía Española. Y hoy el título lo ostenta el rey Felipe VI de España.

El dominio árabe en aquella región solo se vio amenazado en el siglo XIII por los mongoles de Hulagu Khan, momentáneamente establecidos en el Valle de Jezrreel; pero fueron rechazados en la batalla de Ain Yalut (1260) y sólo hubo pequeñas acciones posteriores. Ya en siglo XIV la región pasó a dominio ayyubí, ejercido desde Damasco, donde se potenciaron las ciudades de la ruta Damasco-El Cairo: Safed, Jerusalén y Gaza. Y es por esta ruta fue por donde de nuevo el poder se desplazó al Egipto de los mamelucos. Pero a partir de 1486 comenzaron las influencias otomanas que ya se materializaron decisivas tras la victoria del sultán Selim I en la batalla de Marj Dabiq[58] (1516) donde ya dueños del del territorio, desde Estambul, mantuvieron la estructura mameluca potenciando la diferencia entre aldeas y las tres grandes ciudades siendo Jerusalén la preeminente, a la que se le otorgó la capitalidad de la nueva región -sanjacado[59] de Jerusalén- dentro del eyalato[60] de Damasco.


[1] El 15 de septiembre de 2020 Israel, Emiratos Árabes Unidos y Bahréin, en una ceremonia apadrinada por el presidente estadounidense Donald Trump, formalizaron la normalización de sus relaciones con el Acuerdo de Abraham. La elección de Abraham para dar nombre al acuerdo no es casual, ya que de este patriarca nacen las líneas dinásticas del judaísmo (de Issac) y del islam (de Ismael o Ibrahim, como le conocen los musulmanes). Además, la piedra sobre la que Abraham se dispuso a sacrificar a su primogénito es el lugar donde se erige la Cúpula de la Roca, uno de los lugares que generan más enfrentamiento entre israelíes y palestinos.

[2] Catedrático emérito del Departamento de Estudios Hebreos y Arameos de la Universidad Complutense de Madrid en “Guerra Santa y Guerra Justa en la Biblia; Publicaciones del Ministerio de Defensa (2009). Ha sido director del Instituto Universitario de Ciencias de las Religiones de la misma Universidad y miembro del Comité Internacional de edición de los manuscritos del Mar Muerto. Es presidente de la Sociedad Española de Ciencias de las Religiones.

[3] El australiano Vere Gordon Childe, en los años 20 del siglo XX, acuñó la denominación Media Luna Fértil o Creciente Fértil y la definió como la zona donde surgió primero la Revolución neolítica (VIII milenio a.C.) y posteriormente la Revolución urbana (IV milenio a.C.). Son los actuales países de Irak, parte de Irán, parte de Turquía, Siria, Líbano, Chipre, Israel, Grecia(Creta), Jordania, Arabia y Egipto.

[4] La Revolución Neolítica o Transición Demográfica Neolítica, a veces llamada Revolución Agrícola, fue la transición a gran escala de muchas culturas humanas de un estilo de vida de caza y recolección a uno de agricultura y asentamiento, permitiendo la capacidad de sustentar una población cada vez más grande.

[5] El desarrollo de la agricultura posibilitó el agrupamiento en esos primeros núcleos de población, y su posterior crecimiento. Se necesitó entonces la prestación de servicios comunes para la población que, según la época fueron ganando o perdiendo su importancia. Se trata, por ejemplo, de canales, templos religiosos, circos, teatros, termas, acueductos, red de alcantarillado, pavimentación de las calles, murallas, ordenación urbana… Una actividad que provocó la incorporación de nuevas tecnologías como la rueda, el arado, el torno o la vela; y acentuó la división en clases sociales con la creación de nuevos roles en la actividad económica, política y religiosa.

[6] La Edad Antigua es el período de la historia que se inicia con la invención de la escritura, hacia el 3000 a. C. y finaliza con la caída del Imperio Romano de Occidente, en el 476 d. C.

[7] Los arqueólogos han desenterrado los restos de más de 20 asentamientos sucesivos en Jericó, el primero de los cuales se remonta hace 11000 años. Los abundantes manantiales en la ciudad y sus alrededores han atraído a la población humana durante miles de años. Jericó se describe en la Biblia como la «ciudad de las palmeras» y es escenario principal de los textos bíblicos. Su nombre viene del vocablo cananeo y luego hebreo «luna» -Yareaẖ- nombre que evoca al dios lunar Yarij, del cual la ciudad fue en la antigüedad un centro de culto.

[8] Tribus nómadas muy belicosas llegadas del Asia central que ocuparon la región al oeste del río Éufrates, Siria y Canaán.

[9] La civilización egipcia se desarrolló entre 3300 a. C. y 332 a. C., en el valle del río Nilo, al norte de África. La riqueza de sus recursos naturales y su aislamiento geográfico le permitieron convertirse en una civilización muy poderosa. Tuvo una larga historia, marcada por períodos de unificación y dispersión del reino. Organizó el Estado en torno a la figura del faraón, que era un soberano absoluto legitimado por las creencias religiosas. Su organización económica estaba controlada desde el Estado, a través de un sistema de tributación y redistribución de productos y servicios. Estableció una religión politeísta, cuyos principales dioses fueron Osiris, Isis, Horus y Seth. Tenía una sociedad jerarquizada, con clases privilegiadas que vivían del tributo que pagaba la mayoría de la población. Desarrolló un complejo sistema de escritura que evolucionó a través del tiempo.

[10] Pueblo asiático que se hizo con el control del Bajo Egipto a mediados de siglo XVII a.C. tras atravesar Canaán. Introdujeron el caballo y el carro de guerra.

[11] Pueblo de origen armenio que a la caída del imperio acadio fundaron una serie de reinos: fueron pueblos muy apegados a los caballos. Sus cultos religiosos influenciaron a todos los pueblos con los que interaccionaron.

[12] Originarios de Anatolia que dominaron la equitación y el manejo del carro de guerra. Atravesaron Canaán en su camino hacia Egipto. Sucumbieron ante los asirios.

[13] De origen todavía incierto, englobados en el genéricos ‘Pueblos del Mar’, tras su enfrentamiento con los egipcios, se establecerían en la costa suroeste de Canaán en cinco ciudades -Gaza, Ascalón, Asdod, Gat y Ecrón -donde fusionaron su cultura con la de la región. Aparecen mencionados en la Tabla de las naciones del Génesis, donde se les atribuye ser descendientes de Mizraím (es decir, de Egipto). Se consideran los tradicionales enemigos históricos del pueblo de Israel. Goliat, el gigante que luchó y fue vencido por el rey David, o la pérfida Dalila, que arrebató la fuerza a Sansón cuando cortó sus cabellos, fueron filisteos.

[14] Denominación con la que se conoce a un grupo de pueblos de la Edad del Bronce que migraron hacia Oriente Próximo durante el 1200 a.C. Navegaban por la costa oriental del Mediterráneo; pueblos migratorios caracterizados por su reasentamiento y asimilación por los pueblos que conquistaron.

[15] Sociedades nómadas, dedicadas al pastoreo del rebaño (cabra y camello, sobre todo) y, en menor medida, al comercio en el desierto arábica donde la vida era difícil (escasez del agua y otros recursos), por lo que la pertinencia y lealtad a una tribu era fundamental para la propia supervivencia. Las tribus árabes se sustentaban en estructuras fuertemente patriarcales.

[16] Tribu tracia de tiempos homéricos muy vinculada a las tribus griegas de las que asumió todas las aspiraciones helénicas. Durante el siglo IV a. C, Filipo II convirtió Macedonia en la principal potencia de Grecia. Su hijo Alejandro Magno (Alejandro III) conquistó la mayor parte del mundo conocido, inaugurando el Período Helenístico de la historia griega.

[17] El Imperio bizantino es también conocido como el Imperio romano de Oriente. A lo largo de su dilatada historia, el Imperio bizantino guerreó contra los sasánidas, normandos, búlgaros, árabes y turcos. Aunque su influencia en África del Norte y Oriente Próximo decayó como resultado de estos conflictos, el imperio continuó siendo una importante potencia militar y económica en Europa, Oriente Próximo y el Mediterráneo oriental durante la mayor parte de la Edad Media. 

[18] Abraham -ejemplo de fe en el judaísmo, cristianismo e islam- fue el padre de Ismael e Isaac, ancestros respectivamente del pueblo árabe de los ismaelitas y del pueblo de Israel por medio de Jacob, hijo de Isaac y nieto de Abraham, quien tuvo doce hijos que fundaron las doce tribus de Israel. Es el progenitor biológico de los judíos y el padre del judaísmo, el primer judío; en el cristianismo, es el progenitor espiritual de todos los creyentes judíos o no judíos5​6​ y en el islam es visto como un eslabón en la cadena de profetas que comienza con Adán y culmina en Mahoma.

[19] Llegados a la Tierra Prometida, el patriarca, familia y rebaños, empujados por una hambruna en Canaán, emigraron a Egipto donde fueron bien recibidos y, no mucho después, expulsados.

[20] Las religiones abrahámicas son las creencias monoteístas que reconocen una tradición espiritual identificada con Abraham y se refieren -colectivamente- al judaísmo, cristianismo e islam, a las que se suman en ocasiones otras como el bahaísmo, los samaritanos, los mandeos y los drusos. El movimiento rastafari también tiene raíces abrahámicas.

[21] Inscripción triunfal en arameo, localizada en Galilea y realizada con toda probabilidad en la época del rey arameo Hazael de Damasco, a finales del siglo IX a.C. En ella se localiza el nombre de David y su dinastía fuera del contexto bíblico. Corroboran el relato bíblico del Segundo Libro de los Reyes.

[22] El sitio de Tel ‘Eton, ubicado entre la Sefelá -entre los Montes de Judea y la llanura costera- y el monte Hebrón, en Israel, fue un centro administrativo judaíta importante de la Edad del Hierro. La mayoría de los especialistas identifican Tel Eton con la bíblica Eglón, una ciudad cananea que fue conquistada por los israelitas según el libro de Josué.

[23] Cartas de Amarna. Tablillas de arcilla alrededor de 1350 a. C., archivos de correspondencia diplomática donde se detallan cuestiones como los envíos de los reyes de Jerusalén y otros reinos dominados, encontradas en el siglo XIX en Amarna, nombre moderno de la ciudad de Ajerjatón

[24] La Estela de Merneptah, también llamada Estela de la victoria o Estela de Israel, es una losa de granito gris, erigida por el rey Amenhotep III e inscrita más tarde, en el reverso, por el rey Merneptah para conmemorar su victoriosa campaña militar en tierras de Canaán hacia el 1210 a. C.

[25] Según el Diccionario de la Santa Biblia, de W. W. Rand (Ed. Revisada. Grupo Nelson, 2006),  la Biblia fue escrita en los años 1491 aC y 96 dC.; y el Génesis fue el primero.

[26] Lugar del desierto occidental de Negev , Israel , al noroeste de Beersheba y a unos 20 km al este del mar Mediterráneo, en la orilla norte de Wadi Gerar. Durante la Edad del Bronce Medio II fue uno de los centros urbanos más grandes de la zona.

[27] Israel Finkelstein (1949); Arqueólogo y académico israelí, director del Instituto de Arqueología de la Universidad de Tel Aviv y corresponsable de las excavaciones en Megido (25 estratos arqueológicos, que abarcan 7000 años de historia) al norte de Israel. A él se deben las más importantes contribuciones a los recientes datos arqueológicos sobre los primeros israelitas: First Israel, Core Israel, United (Northern) Israel, 2019. 

[28] Escultura de piedra caliza negra con escenas en bajorrelieve e inscripciones que conmemoran las hazañas del rey Salmanasar III, que reinó en Asiria entre los años 858 y 824 a.C. Son 20 escenas en relieve, cinco por cada lado, que representan a cinco reyes ofreciendo tributos. Aparece mencionado por primera vez un personaje bíblico, el rey Jehú (o Joram) de Israel.

[29] Piedra de basalto negro, que muestra una inscripción de Mesa, rey moabita del siglo IX a. C., alrededor de 850 a. C., como un registro y recuerdo de sus victorias en su revuelta contra el Reino de Israel, que emprendió tras la muerte de su gobernante, Ahab.

[30] El Museo Británico conserva la Crónica Babilónica ABC1 que es una serie de tablillas de arcilla escritas en cuneiforme acadio que narra la campaña de Sargón II sobre Samaria que también está escrito en los muros del palacio de Khorsabad.

[31] Deportaciones continuas de los judíos. ¡Si llego a olvidarte, Jerusalén, que se me seque la mano derecha! ¡Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti, si no te pongo, Jerusalén, por encima de mi propia alegría! Salmos 137:5-9

[32] Ptolomeo Sóter, uno de los cuatro generales que se reparten el imperio de Alejandro Magno; se queda en Egipto. Los otros tres fueron Parmenión, Seleuco Nicátor y Antígono Monóftalmos

[33] Del territorio que se adjudicó Seleuco Nicátor, otro general de Alejandro Magno

[34] Rey de Judea, Galilea, Samaria e Idumea entre los años 37 a. C. y 4 a. C.6​ en calidad de vasallo de Roma. En Roma, el Senado, de forma no prevista por Herodes, le nombró «rey de los judíos». Flavio​ Josefo sitúa este acontecimiento en el año del consulado de Gneo Domicio Calvino y de Gayo Asinio Polión (40 a.C.), pero Apiano lo sitúa en el año 39 a.C.

[35] En la Guerra de los Judíos, escrita en griego en el siglo I por el judeorromano Flavio Josefo entre los años 75 y 79 cuenta la sublevación de los grupos judíos de zelotes y sicarios para liberar la provincia de Judea de la dominación romana. Los sicarios asaltaron Masada por sorpresa y degollaron a la guarnición romana apostada en la fortaleza situada en la cumbre amesetada de una montaña aislada en la región oriental del desierto de Judea, próxima a la costa sudoccidental del mar Muerto, en el Distrito Meridional de Israel. En la revuelta Sólo subsistían tres fortalezas desafiantes al poder romano: Herodión, Maqueronte y la propia Masada, que acogió a grupos de refugiados de Jerusalén, y desde la cual se lanzaron numerosos asaltos contra unidades romanas y aldeas judías durante los dos años siguientes. Al final, ocho campamentos romanos rodearon la fortaleza y se decidió construir una rampa para asaltarla. La rampa alcanzó unos 196 m de base y 100 m de altura, con un 51 % de pendiente. Unos tres meses después de haberse iniciado su construcción, y siete meses después de iniciarse el asedio, la rampa fue finalmente finalizada en la primavera del año 73 y al asaltar la fortaleza se encontraron que todos los moradores se habían dado muerte entre sí antes de caer prisioneros y ser vendidos como esclavos.

[36] Etapa negativa, dolorosa. Vivir en galut es vivir el desarraigo, sentirse alienado, extraño y perseguido. (en “El exilio y la diáspora: ¿Israel sin templo?”, de Miren Jvnkal Guevara Llagunq, profesora agregada del Departamento de Sagrada Escritura, Facultad de Teología, Universidad de Granada. (2012)

[37] El emperador Constantino I, en el siglo IV, levantó la prohibición.

[38] https://www.libertaddigital.com/internacional/latinoamerica/2023-10-11/maduro-asegura-que-jesucristo-era-palestino-y-fue-crucificado-por-el-imperio-espanol-7058122/

[39] https://jdiaz474.wordpress.com/2014/12/05/de-los-vientos-de-repulsa-y-otras-cosas-a-proposito-de-exodo-la-pelicula/

http://juanjfdiaz.blogspot.com/2014/12/de-los-vientos-de-repulsa-y-otras-cosas.html

[40] En el año 326, la madre de Constantino, Santa Elena, visitó Jerusalén y ordenó la destrucción del templo de Adriano de Venus, que había sido construido en el Calvario.​ Acompañada por Macario de Jerusalén, en las excavaciones que ordenó se “descubrió” la Verdadera Cruz, la Santa Túnica y los Santos Clavos. Por ello, la primera Iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén, la primera Iglesia de la Natividad en Belén y la primera Iglesia de la Ascensión al Monte de los Olivos fueron todas construidas durante el reinado de Constantino.

[41] Por aquellos años, dividida en tres: Palestina Prima (Judea, Samaria, Paralia, y Perea), Palestina Secunda (Galilea, el Valle del Bajo Jezreel, las regiones al este de Galilea y la parte occidental de la antigua Decápolis) y Palestina Tertia (con el Néguev y la mayor parte del Sinaí, incluyendo Petra), que también era conocida como Palestina Salutaris.

[42] Como refleja el Itinerarium Burdigalense escrito por un peregrino franco, de Burdeos.

[43] Dinastía árabe cristiana, vasalla y aliada del Imperio bizantino cuyos miembros pertenecían a un clan de la tribu árabe Azd, en Yemen del sur y llegaron hasta el desierto de Siria en el año 250. Los Gasánidas prosperaron económicamente y emprendieron obras públicas y religiosas; también patrocinaron las artes. Fueron derrocados por los musulmanes en el siglo VII, después de la batalla de Yarmuk. Su poder real, sin embargo, había sido destruido en la guerra anterior, durante la invasión persa de 614. 

[44] Insurrecciones durante los siglos V y VI en la provincia de Palaestina Prima, lanzadas por los samaritanos contra el Imperio bizantino. Estuvieron marcadas por una gran violencia en ambos bandos, y su brutal represión a manos de los bizantinos y sus aliados gasánidas redujo gravemente la población samaritana.

[45] Umar ibn al-Jattab, del clan Banu Adi fue el segundo de los llamados califas ortodoxos. Combatió en un primer momento contra Mahoma y los fieles de la nueva religión, pero más tarde, en el año 615, se convirtió al islam y llegó a ser uno de los compañeros y lugartenientes más fieles del profeta. A la muerte de Mahoma en 632 ayudó a Abu Bakr a ser elegido sucesor, y a su vez Abu Bakr lo designó como su sucesor dos años después. La tradición judía les atribuyó el permiso a los judíos para ingresar a Jerusalén en peregrinación, permitiéndoles adorar la ciudad.

[46] Acuerdo entre una población cristiana subyugada y los invasores musulmanes liderados por Umar Ibn Al-Khattab

[47] Los Yund era distritos militares; en el siglo XI desaparecieron.

[48] A ciertos grupos se les otorgó la consideración de ahl al-kitab/gentes del Libro, seguidores de las religiones que, en parte, compartían un corpus de escrituras o doctrinas con el Islam. Por ese motivo se les consideraba dignos de mayor respeto que quienes practicaban otras creencias consideradas idólatras, como el politeísmo o el animismo.

[49] Creyentes de religiones abrahámicas o monoteístas, que vive en un país islámico

[50] Entre los siglos XI y XIII, en Oriente Próximo/Levante Mediterráneo, los europeos crearon por las armas los llamados Estados Latinos de Oriente, Estados Cruzados o Reinos cristianos. Surgieron a raíz de la primera cruzada: el Condado de Edesa (en la Anatolia turca; 1098-1144), el Principado de Antioquía (en Siria, desde la costa al interior;1098-1268), el Condado de Trípoli (Líbano; 1104-1288), el Reino de Jerusalén (Israel; 1099-1291, fecha de la conquista de la ciudad de Acre) que tenía varios señoríos vasallos (Principado de Galilea, condados de Jafa y Ascalón, Señorío de Transjordania y Señorío de Sidón). Finalmente, señalar la existencia del reino armenio de Cilicia, previo a las Cruzadas y el más duradero (1078-1375).

[51] https://elpais.com/cultura/2022-04-16/cuando-el-papa-juan-xxiii-borro-el-antisemitismo-de-las-oraciones-de-semana-santa.html

[52] Los judíos fueron bien tratados en Al-Ándalus, experimentando una Edad de Oro entre los años 900 y 1100, en el Califato de Córdoba. También eran aceptados en la corte de algunos reyes cristianos, como en la de Alfonso X.

[53] Eran los únicos a quien les estaba permitido prestar diner3o con interés, (algo prohibido a los católicos por la Iglesia), algunos judíos se convirtieron en importantes y conocidos prestamistas.

[54] Moisés ben Maimón, más conocido como Maimónides (1138-1204); judío sefardí cordobés considerado uno de los mayores estudiosos de la Torá en época medieval. Ejerció de médico, filósofo, astrónomo y rabino en al-Ándalus, Marruecos y Egipto.

[55] En la Gesta francorum (‘Gesta de los francos’) una crónica de la Primera Cruzada escrita en latín hacia 1100 por un autor anónimo (normando o italiano) que participó en la misma y que formaba parte del ejército cruzado reclutado por Bohemundo de Tarento en 1096 en el ducado de Apulia se detalla que «los cruzados desencadenaron una terrible matanza de hombres, mujeres y niños, musulmanes, judíos e incluso los escasos cristianos del este que habían permanecido en la ciudad; la carnicería fue tan grande que nuestros hombres andaban con la sangre a la altura de sus tobillos«.

[56] A comienzos del verano de 1096, un ejército alemán de los nobles Gottschalk, Volkmar, y Emicho se dirigió hacia el norte, siguiendo el Rin, en dirección opuesta a Jerusalén, para comenzar una serie de asaltos antes de dirigirse a Hungría.

[57] En 1187 Guido de Lusiñán, el último rey de Jerusalén atacó en Hattín y fue derrotado por Saladino quien puso sitio a Jerusalén el 20 de septiembre de 1187. Sin tropas para defenderla, los cristianos se vieron forzados a abrirle las puertas el 2 de octubre.

[58] Enfrentamiento militar decisivo en la historia de Oriente Medio que se libró el 24 de agosto de 1516, cerca de la ciudad de Dabiq (Siria, cerca de Alepo).La batalla fue parte de la guerra de 1516-17 entre el Imperio Otomano y el Sultanato Mameluco, que terminó con una victoria otomana y la conquista de gran parte del Medio Oriente.

[59] Subdivisión administrativa del Imperio Otomano; nivel de provincia.

[60] Subdivisión administrativa del Imperio Otomano: nivel gobernación o región.

DE LA CRISIS DEL PETRÓLEO DE 1973… ¡CINCUENTA AÑOS YA! (y II)

Terminada la guerra civil, en 1940, como España reexportaba petróleo de la Texaco a la Alemania nazi que estaba poniendo en aprietos a franceses y británicos después de haber pasado como elefante en cacharrería por Holanda, Bélgica y buen aparte de la Europa Oriental, desde el 2 de julio de 1940 pasamos a estar en la lista de embargos petroleros de los Estados Unidos como medida de presión para que no entrar en el conflicto EEUU y, obviamente, comenzamos a padecer restricciones importantes (muy señaladas las de los años 1942 y 1944)[1].

Entonces, todo nos lo supervisaba el COPI (Comité Operativo de la Península Ibérica) un invento anglonorteamericano que fiscalizaba las actividades económicas y comerciales españolas y determinaba las cantidades de petróleo que se nos suministraba el cártel petrolero internacional. El Juan Español de turno, en aquellos días, sacó a pasear su ingenio y de pronto nos apareció el gasógeno[2] (que quemaba carbón, leña o cáscara de almendra como combustible) pues la gasolina se consideró reserva estratégica (militar, industrial, naval, aérea y ferroviaria).

En esta época CAMPSA se metió -obligada por los acontecimientos- en la destilación de esquistos, para lo que creó ENCASO (Empresa Nacional Calvo Sotelo), que, si bien consiguió sus objetivos (a destiempo), no resultaron viables económicamente. En esta época (1939) un ‘espabilao’ cum laude -el noble austrohúngaro de estirpe bastarda Albert von Filek[3]– parece que encantó a Franco con su idea desde la camarilla de Serrano Súñer se pidió el estudio de su propuesta y la planificación para la puesta en marcha la Fábrica de Carburante Nacional[4] para producir “filekina”, una “gasolina” sintética a base de agua, licuado de hortalizas) y unas proporciones secretas[5]; ¡faltaría más! En 1941, el análisis de una comisión de expertos de la Escuela de Minas confirmaba que la filekina era un fake (que se dice ahora) pues carecía de fundamento científico. Ignacio Martínez de Pisón escribió un libro sobre este episodio patrio[6]. Pero es que en 1942 teníamos en marcha la “gamolina”, una mezcla de derivados del petróleo y alcoholes aditados para que los vehículos rodaran; hizo su papelín, pero podemos considerarla otro fiasco patrio de la autarquía.

En aquellos años a España llegaba también algo de petróleo de Venezuela y Colombia por negociaciones complejas, pero el volumen importante, que lo suministraban las compañías americanas, estaba dentro de las sometidas a restricción. Y fueron años muy duros: se juntó todo.

En 1947 se reorganizó el monopolio petrolero a instancias del INI[7] y Suanzes[8]. Fue entonces cuando se apostó por el refino en suelo patrio y de la mano de la norteamericana Caltex[9] (sucesora en la península de Texaco) se construyó la Refinería de Petróleo de Escombreras (REPESA), compartiendo experiencias con CEPSA, que ya sabía de refino. Fue un éxito. Y otras compañías norteamericanas se acercaron a España para ofrecer suministro y construir refinerías y estructura de distribuición con empresas y bancos españoles. Es el caso de Marathon Oil en La Coruña; Standard Oil y Gulf Oil en Huelva; Standard Oil of New Jersey (Exxon Corporation)[10] en Castellón; y puestos a construir refinerías en dónde me da la gana llegó una que marcó época: la Gibraltar-San Roque en Algeciras…

Una larga historia -esta, en la que me metido- en la que no he encontrado a los árabes hasta finales, finales largos, de la década de los 50… por lo que sigo sin entender “la tradicional amistad”; lo dicho, de cuando El Cid.

Es que las primeras relaciones diplomáticas con los países del Golfo se inician en 1948 y son con Arabia Saudí; después, en 1964 se establecerían con Kuwait y ya en el 72 con el resto de los países productores del Golfo Pérsico (Emiratos Árabes Unidos, Qatar, Omán y Bahréin). Con rango de embajada, primero la establecimos en Arabia Saudí (1954), luego en Kuwait (1973) y también en Emiratos Árabes Unidos (1977); en el resto de aquellos países, se hubo de esperar hasta bien entrado los 90[11]. Amistad, pues, lo que se dice amistad… las de El Cid. Si exceptuamos a la paupérrima monarquía hachemí del rey Abdallah de Jordania que gustaba de España y la saudí, que se sentía como en casa, pocos amigos. Vamos, al nivel del negús abisinio Haile Selassie que por lo menos regalaba leones; pero no petróleo.

Yo me inclino más por Irak, pero dejemos fluir el petróleo saudí y aceptando a Arabia como animal de compañía petrolera me llego hasta el Tratado de Amistad en 1961. Y hay que esperar a 1962 estaba para que Fernando María de Castiella[12] de visita oficial empiece a firmar. España, no digo que no, consiguió un cierto trato de favor en la importación del crudo saudí; pero poco más -como el resto de países- a pesar de las visitas de los Príncipes de España por aquellos lares nada más comenzar la década de los 70.

Esta historia tiene ahora muchas aristas cortantes, pero desde la década anterior pesaba más que la venta de armas españolas a Arabia era una forma de edulcorar los acuerdos de rearme que existían entre ese país y los EEUU y que a través de España tenían otra consideración. Un plus de petróleo por armas empezó a funcionar en aquellos años con bombas de aviación y algunas piezas de artillería sin retroceso. Y era un sistema interesante que animó a sumarse a la propuesta a Irak que necesitaba armarse… y nos ponía el petróleo en mejores condiciones.

Sirva el dato patrio de que en 1960 el petróleo solamente representaba el 20% de la energía primaria en España, mientras que en el resto del mundo occidental rondaba el 40% como mínimo. En 1973 ya representaba el 71%, cuando en el resto del mundo se había mantenido en el 40%. Con el desastre de la crisis del 73 nos vimos obligados a reorientarnos y en 1975 salía a la luz el primer Plan Energético Nacional que proponía la reducción progresiva de la dependencia del petróleo. Una década después (1985) el petróleo representaba el 57% de la energía primaria en España, mientras en el resto del mundo rondaba en 37%[13]. Entre 1970 y la primera década del siglo XXI más del 99% de los hidrocarburos consumidos en España han sido importados[14].

Y obligados por las circunstancias occidentales y la imperiosa necesidad de normalización, recurriendo en más de una ocasión al recuerdo de los sefardíes[15], en 1985 comenzamos a explicarles a los países árabes la conveniencia que teníamos de reconocer al Estado de Israel, aunque en 1986, cuando el Comunicado conjunto hispano-israelí[16] se desliza en el mismo lo de la “tradicional política de amistad y solidaridad con el Mundo Árabe” y hasta lo del “pueblo palestino” que, insisto, no entiendo.

Aquí llegados, quiero meter ahora la cuñita del petróleo español; el que brotó bajo la piel de toro y aguas jurisdiccionales peninsulares. Es una historia que comenzó en 1964 en la provincia de Burgos, en el término municipal de Sargentes de la Lora, en torno a Ayoluengo, donde se localizó el primer yacimiento petrolífero. Este pozo llegó a alcanzar una producción máxima en 1969 de casi 192.000 toneladas anuales de crudo. En 2017 se cerró. En junio de 2021 España dejó de producir petróleo.

Desde 1973 y hasta ese día lo conseguíamos bajo el mar Mediterráneo. En 1973 se descubrió el pozo de Amposta, frente a la costa de Tarragona. En 1977, los pozos Casablanca y Tarraco. En 1978, el pozo Dorada, que cerraba en 1983. La producción máxima histórica de crudo en España se logró en 1983 con casi 3 millones de toneladas de petróleo, siendo el pozo Casablanca el más rentable, con 2,1 millones de toneladas. En 1984 comenzó a operar el pozo Salmonete, que cerraba en el 86, y también cerraba el pozo Tarraco. En 1996 se abre el pozo Rodaballo; y el 97, el pozo Boquerón. Con todo, en 1997, España ya no producía ni medio millón de toneladas anuales. En 2012 el pozo Lubina, que dejó de operar en 2019. Hasta hubo un pozo Chipirón. La plataforma Casablanca -que centraliza la producción de seis yacimientos y que constan de un total de 14 pozos- estaba conectada a la refinería de Tarragona a través de un oleoducto marino soterrado, que conectaba con el rack que va desde el pantalán del puerto de Tarragona a la refinería.

Epitafio patrio de esta incursión en el relato quiero recordarles, como ya señalé, que en junio de 2021 España dejó de producir petróleo de sus yacimientos, pero hemos de reconocer un tremendo ingenio ictícola a la hora de poner nombres a los pozos.

Y vuelvo a lo de Israel, que tiene miga. Vale que en 1949 el representante israelí ante la Asamblea General de la ONU, Abba Eban (que hacía unos pocos días que Israel había sido admitida como miembro), votara en contra del levantamiento del boicot diplomático a España, pero un año y medio después, el 4 de noviembre de 1950, se nos levantó el veto al establecimiento de embajadores de los demás países miembros y la participación del país en los organismos internacionales establecidos por la ONU o vinculados con esta[17]. En 1955 -Resolución 955 del 14 de diciembre- España fue admitida definitivamente en la ONU junto con otros países[18], dentro de un gran paquete diplomático estructurado por EEUU y la URSS. Israel, entonces, votó a favor; aunque -manifestó- no nos perdonó la vinculación con el régimen nazi.

Y aun así con eso Franco siguió erre que erre con el mundo o árabe (a favor) y el judío (en contra): Prohibió el establecimiento de relaciones con Israel[19], aunque el día 9 de noviembre de 1953, en el Hotel Castellana Hilton de Madrid, se celebrara un servicio religioso judío, el primero desde 1492[20], al que acudieron miembros del gobierno de Franco y representantes de la embajada de los Estados Unidos.

En la década de los años setenta, España fue el país occidental más abiertamente defensor de la causa árabe, especialmente de la cuestión palestina. Los funcionarios españoles votaron sistemáticamente a favor de los árabes, en la ONU, cuando se presentaban debates como el de la Crisis de Suez (29 de octubre al 7 de noviembre de 1956: 9 días de combates)[21] o la Guerra de los Seis Días (del 5 al 10 de junio de 1967). Entonces España se sumó a la Resolución 242 del Consejo de Seguridad, que exigía la evacuación de las fuerzas militares de Israel de los territorios ocupados durante el conflicto, aunque Israel permitió que España mantuviera abierto el Consulado de Jerusalén[22]. En 1974, volvimos a votar a favor de que se concediera un puesto a la OLP como observador en Naciones Unidas. Y en 1975 nos adherimos a la Resolución 3379 en la que se comparaba al sionismo con una forma de discriminación racial. Y así, por ejemplo, hasta Adolfo Suárez, que ese fue otro[23] de apoyo a la causa palestina.

Todo este proceder, me duele hasta el escribirlo.

Es más, el gobierno de Franco advirtió a EEUU (1970) que no permitiría nunca más el uso de las bases españolas en otra guerra árabe-israelí[24]; y lo ratificó en 1973: el 28 abril el ministro de Asuntos Exteriores, López Bravo, viajó a Teherán, “vía Roma y escala en Beirut” (que destacaba la prensa de ese día), en visita oficial a Irán para entrevistarse con el Sha Mohammad Reza Pahleví. Y en Beirut aseguró que “España no cambiará la posición pro-árabe en el conflicto de Oriente Medio; España continuará apoyando a los países árabes[25]. Por cierto, me ha sorprendido que en este viaje le acompañó Fernando Morán[26], que llegaría a ministro de Asuntos Exteriores con el PSOE; y, atención, lo hizo como subdirector general de ¡Asuntos de África!… en visita a Oriente Medio. ¿Me lo explican?

Y hasta España reconoció la legitimidad de la causa palestina[27].

Yo, les confieso que, no entiendo esa “tradicional amistad española con los pueblos árabes” por lo que nos pasa con Marruecos[28], país árabe (sin petróleo, pero lo que busca muy cerca de Canarias; un petróleo que España no puede alcanzar porque tenemos una ley -Cambio Climático y Transición energética- que lo prohíbe[29]-).

Es que, por si no se acuerdan en 1955 los incidentes provocados por grupos nacionalistas marroquíes traspasaron la frontera española del Protectorado. Y como el africanista Franco no quería -ni yo, claro- una guerra allí, claudicó sin más: invitó a Mohammed V a Madrid para acordar la retirada.  ¡Coño, no!; Cuando menos un tirón de orejas. No te digo un perejil[30], pero sí cualquier otra apiácea.

Total, que, el acuerdo firmado el 7 de abril de 1956 fue muy malo para España: se reconocía la independencia de Marruecos sin garantía alguna y se accedía a prestar asistencia técnica para organizar el ejército marroquí. A cambio, el sultán “permitía” que España mantuviera su soberanía sobre Ceuta y Melilla, los peñones de Vélez de la Gomera y Alhucemas y las islas Chafarinas. Para colmo, no se firmaron garantías territoriales precisas sobre Ceuta y Melilla, no se negociaron los acuerdos de pesca o moneda ni se logró que Marruecos fijara su frontera sur y ahí teníamos el Sahara y las minas de fosfato[31].

No lo entiendo; de verdad que no lo entiendo.

Y en el caso de, digamos, aquel Marruecos, al final, hubo guerra -Guerra de Ifni y Cabo Juvy[32], ¡hasta con el apoyo de Francia!- para, al final, irnos a casa sin nada y escondiendo 198 muertos -a los que sumar 84 desaparecidos- y unos 500 heridos. Y no me olvido de lo absurdo de la invasión marroquí del Sáhara Español[33] -las cosas, por su nombre-, que el gobierno del alauita llamó ‘Marcha Verde’ y nos ha dado por llamarla así -¿síndrome de Estocolmo o de esto es el colmo?- y no por lo que fue: la invasión marroquí del Sáhara Español, “mancha verde” fosforescente en nuestro negro pasado reciente. Es que me pongo del mismo color que Dr. Banner. Estas chorradas del primo del Sur -y de Juan Español- son mis rayos gamma.

En fin… Lo del mundo árabe y Marruecos es superior a mis fuerzas.

Y para desintoxicar el ambiente y antes de volver a la guerra del Yom Kippur (¡Ya va siendo hora, Juan!) quiero brindarles una más de Juan Español; lo mismo sufridor que protagonista.

Es el caso, en los albores de la década de los 70, de cuando aún atábamos a los perros con longanizas,  cuando el perito industrial e inventor extremeño Arturo Estévez Varela[34] comunicó a bombo y platillo que había conseguido un motor que funcionaba exclusivamente con agua “fresca, limpia y pura de un botijo” que él mismo bebía al gallé ante las cámaras del NODO[35]. Era 1971 y ante la atención de todos le añadía al agua algo como unas piedras. El “motor de agua” Estévez funcionaba en un ciclomotor… El problema es que aquellas piedras que añadía o bien eran carísimo boro (entonces y ahora) o bien un también muy caro ferrosilicio; nunca lo desveló y lo que en realidad patentó fue un Sistema de Regasificación de Hidrógeno; pero encontró un socio que le entregó cinco millones de pesetas para montar una sociedad y forrarse. La reacción entre el agua y el elemento -llamémosle A, de Álvarez- generaba hidrógeno, de tal manera que el ingenio de Estévez era más bien un motor que se anticipaba lo que luego habría de llamarse pila de combustible. Pero aquello no funcionó.

Lo que si funcionó fue la reacción militar israelí y la respuesta árabe de embargo petrolero. Porque la principal consecuencia global de la derrota árabe frente a los israelíes fue la decisión de la Organización de Países Árabes Exportadores de petróleo (que agrupaba a los países árabes miembros de la OPEP, más Egipto, Siria, Irán y Túnez) de no exportar petróleo a los Estados Unidos, Holanda, Portugal y África del Sur, por haber apoyado a Israel en la guerra, y de reducir su producción global a razón de un 5% cada mes hasta la restitución por Israel del territorio árabe ocupado en 1967 y de los derechos de los palestinos. Ese puñetero 5% mensual -que llegó a ser del 25% en momentos clave- provocó un alza de precios[36] del crudo y un racionamiento mundial de combustibles derivados del petróleo, que hizo contraerse la economía mundial provocando a su vez la desaparición de miles de empresas y un importante desempleo: una crisis en toda regla con una recesión económica supina. Y otras cosas.

Los precios del petróleo, apuntemos ya, los comenzó fijando la todopoderosa Standard Oil; pero a partir de 1928 tuvieron su propia historia[37]. En octubre de 1973 los países árabes de la OPEP elevaron un 70% el precio de referencia sin posibilidad de discusión con las compañías.

Así que fue, la que arrancó en 1973, una etapa muy dura para el mundo y especialmente para España que en aquellos años necesitaba mucho fuel-oil para la generación termoeléctrica y las fábricas de cemento, además de para barcos (de todo tipo; que los pesqueros aún van a fuel) y la siderometalúrgica; para lo más esencial, vamos. Aquí los precios estaban monopolizados y era muy estables: 1.450 pesetas/Tm para centrales térmicas y cementeras y 1.650 pesetas para otros usos industriales. Luego el litro de Súper estaba a 12’50 ptas. (más barato que en la Europa continental) mientras el del gasoil, a 7, era muy inferior al de Europa[38]. La Shell, que por entonces partía el bacalao y dominaba el panorama patrio denunció sus compromisos y la Gulf y sus socios de la ARAMCO (compañía árabe participada por la SOCAL norteamericana; Standard Oil of California) intentaron eludir los suyos. No había otra pues que acudir a los países productores directamente saliendo, entonces sí, lo de “la tradicional amistad” con los suministradores del oro negro. Y ahí estaban los acuerdos Hispanoil[39]-Petromin[40] para Arabia y los que llegaron de Irak y otras petromonarquías. El embargo duró seis meses -¡que seis meses!- pero sus consecuencias, más de una década.

Y aunque la guerra que viene a cuento para este Post se desarrolló del 6 al 25 de octubre de 1973, los países árabes ya habían acordado el 23 de agosto anterior usar el petróleo como arma ante un inminente conflicto militar con Israel. Así, el 15 de septiembre de 1973 la OPEP declaró un frente de negociación común para presionar el alza de los precios y conseguir terminar con el apoyo de medio mundo a Israel. Y en medio del conflicto, comenzó el embargo: 16 de octubre de 1973.

Como consecuencia, los países occidentales se vieron enfrentados a un escenario de estanflación (inflación con bajo crecimiento económico), algo que nadie había previsto en los países occidentales, fieles seguidores de la teoría económica keynesiana. El mundo occidental se vio en 3D y sensurround[41] el fin de la era dorada del capitalismo.

La escasez de petróleo y de productos refinados derivados fue tan alta que Reino Unido, por ejemplo, decretó la emergencia nacional[42] y los norteamericanos, bastantes asustados, pero con sus reservas a buen recaudo, reactivaron la exploración petrolera de su propio país para limitar la dependencia del petróleo de Oriente Medio y hasta crearon el Departamento de Energía[43] (1977). El fracking, “inventado” en los años cuarenta, cobró protagonismo y la crisis generó una amplia conciencia sobre la necesidad de limitar el consumo y dependencia del petróleo, apostar por la nuclear y empezar a revisar el neoconcepto de energías limpias. Además, los gobiernos se vieron obligados a realizar políticas de ajustes fiscales para disminuir el déficit público y las deudas soberanas. Esto conllevó una disminución del gasto estatal en programas sociales y, la verdad, se inició una nueva era económica.

Para España, lo que se nos vino encima tras la guerra del Yom Kippur fue traumático. El declive de la actividad industrial europea paralizó el proceso migratorio español y sumó el retorno de trabajadores migrantes que aumentaron el desempleo patrio hasta alcanzar las 900.000 personas; al medio millón de parados patrios se sumaron cuatrocientos mil retornados. Dos terceras partes del consumo energético español dependían de las importaciones de crudo. La broma nos costaba 2.500 millones de dólares más por año, lo que significaba, por sí solo, un incremento del déficit comercial del 50%. Para no complicar más la cosa a Juan Español -que estaba hasta las cejas- el Estado asumió una parte del aumento del coste del crudo por la vía de reducir los impuestos que gravaban el consumo de derivados. Así, mientras los precios de las gasolinas y el fuel aumentaban tan solo en torno a un 20% en términos reales, los ingresos del Estado por la venta de derivados del petróleo disminuían un 35%. No hace falta más que echarse la mano a la cartera para saber que íbamos cuesta abajo y sin frenos. Repercutir directamente la subida implicaba (como mínimo) doblar los precios de venta de los productos derivados, algo que hubiera tenido repercusiones gravísimas sobre la actividad económica: la mayor parte de la electricidad se producía en centrales térmicas consumidoras de fuel y aquí todo lo movíamos con derivados del petróleo: coches, aviones, barcos, trenes…

La economía no la teníamos boyante y de conflictividad social estábamos a punto de ebullición. Y como esto afectaba a nuestros “clientes” europeos y del mundo entero, los ingresos por turismo descendieron más de un 30% (¿quién iba a pensar en vacaciones en 1974 y siguientes?), y las exportaciones, casi un 8% (¿quién nos iba a comprar algo?). El economista Luís Ángel Rojo nos describía con “una débil base energética, un alto consumo de energía por unidad de producto y la elevadísima dependencia de las importaciones de petróleo hicieron que el impacto sobre los precios, la renta disponible para el gasto y el déficit exterior de la economía española fuera especialmente fuerte[44]. La primera energía del milagro español se consiguió primando los pantanos y las refinerías de petróleo sobre la minería del carbón como bien señaló el Primer Plan de Desarrollo (1964-67)[45] pero ahora dependía del petróleo.

Entre 1960 y 1973 el consumo de petróleo creció a tasas del 15%. La crisis del petróleo de 1973 aconsejó elaborar el primer Plan Energético Nacional y dar carta de naturaleza a las centrales nucleares españolas.

A finales de 1973 la histeria se desencadenó en todo Occidente, y los países industrializados corrieron a cortejar a los gobernantes de los países productores para asegurar la arribada de petroleros a unos precios favorables. España invocó entonces su tradicional amistad hispano-árabe y el anticomunismo compartido con muchas monarquías y repúblicas de Oriente Próximo y limitó la velocidad en carreteras.

Sí, en abril de 1974 se impuso la primera obligación de nuestra historia de circular a menos de 130 kilómetros por hora en autopistas como medida para frenar su dependencia exterior de carburantes. Se adujeron motivos de seguridad vial e interés nacional. Y cuando el barril de petróleo se puso a unos terribles 93 dólares, en 1976, el Gobierno de Arias Navarro volvió a reducir el límite máximo de velocidad hasta los 100 km/h, el más bajo de la historia de España. Y también en 1974 sumamos a las consecuencias lo del cambio de horario (los horarios de verano e invierno), para adecuar los usos y disminuir el gasto. España fue de los primeros países que se adaptó a la medida, aprobada el 5 de abril de 1974; Francia lo haría en 1976 y Portugal en 1977. Una medida que llevó a muchos países europeos a cambiar la hora durante el invierno para ganar más tiempo de luz a primera hora de la mañana, cuando supuestamente las fábricas y oficinas necesitaban toda la energía. Con más iluminación natural, gastarían menos energía. Un cambio de hora que hizo ya España en 1918 por la escasez de carbón provocada por la Primera Guerra Mundial.

Y todas estas variaciones a pesar de que ya habíamos conseguido una ayudita extra en diciembre de 1974 cuando Sadam Husein vino a España de visita oficial. Le recibieron el jefe del Estado, el presidente del Gobierno y el príncipe don Juan Carlos. Nos envió 30.000 toneladas de petróleo; gratis[46].

Por aquellos días parece que nos llevábamos de bute[47] con el Irak baazista[48]; relaciones que se mantuvieron en idéntica sintonía con el cambio de régimen y los Gobiernos democráticos de la UCD y del PSOE. En 1978 Adolfo Suárez le concedió el Collar de la Orden del Mérito Civil[49] a Sadam Hussein… Y corto aquí para no reír. Es que no termino de encajar en mi esquema mental a Suárez; tampoco olvido cuando coqueteó con los no alineados[50]. Por favor, ¡qué país!; cada dos por tres tenemos una añada de presidente del gobierno, como el de ahora, que es para hacérnoslo ver. ¡Por Dios!

Vale, corto y cambio… que me inflamo como la carísima gasolina de la que les estoy contando.

Apagaré el fuego señalando (sin ánimo de justificarle) que cuando Adolfo Suárez llega a la presidencia del Gobierno (1976), el país estaba a punto de ingreso en UCI: la inflación interanual se acercaba al 20%, el déficit de la balanza exterior por cuenta corriente superaba los 4.000 millones de dólares y el déficit del Estado aumentaba y aumentaba[51]. Y luego estaba el desempleo; el triple que en 1973.

Las medidas que adoptó Fuentes Quintana mejoraron la cosa; pero al poco va y se produce derrocamiento del Sah Reza Pahlaví (se largó el 16 de enero de 1979, muy malito, rumbo a los EEUU y el Hola se quedó sin sus reportajes del superlujo de Farah Diva y la celebración del 2.500 Aniversario del Imperio Persa) y llega la instalación del régimen del Ayatolá Jomeini -revolución iraní- en uno de los principales países productores de crudo, que enseguida -agosto de 1980[52]– se lió a tiros con el vecino Irak, también gran productor, lo que nos mandó a la porra económica -el precio del fuel pasó de 8.300 a más de 20.000 pesetas por tonelada- a principios de 1980. Y pudo ser peor de no haberse alcanzado en 1977 los Pactos de la Moncloa[53], un aspecto no siempre reconocido en su justa e importantísima medida por los políticos de ahora que visionan mal la Transición.

La economía española se estancó de nuevo y no volvió a la senda de la recuperación hasta bien entrado el año 1982 y ya bajo gobierno socialista, la recuperación prosiguió hasta alcanzarse tasas de crecimiento del producto en torno al 3% en una crisis prolongada y cerrada en falso porque el desempleo llegó a afectar a tres millones de personas (un 22% de la población activa)[54].

En definitiva, la crisis de los años 1973-1985 fue una crisis de carácter mundial, pero que tuvo en España dos especificidades. Carles Sudriá lo explica[55]: “la debilidad de los Gobiernos que tuvieron que afrontarla y una economía con graves defectos estructurales, surgidos de un crecimiento fuertemente intervenido y protegido de la competencia exterior. Las necesarias decisiones de ajuste se tomaron con retraso y arrostraron en consecuencia un mayor coste, y las deformaciones estructurales pasaron su factura en forma de unas tasas de paro muy superiores y más persistentes que las sufridas por otros países. Aunque la crisis se superó a mediados de la década de 1980, quedó por realizar buena parte de la reestructuración industrial y empresarial. Algo que finalmente tuvo que hacerse unos años después con no pocas dificultades”. Total.

Dicho esto, el lado positivo del balance no debe olvidarse. En aquellos años turbulentos, España consiguió transitar en paz de un sistema autoritario a la democracia en un proceso que, con todas sus limitaciones, cabe calificar de éxito. Sin duda se cometieron errores en la gestión de los asuntos económicos, tanto en las decisiones adoptadas como en las eludidas, pero considero que sería injusto olvidar que el objetivo prioritario era entonces la transición política y que a ello hubieron de supeditarse otros objetivos, por importantes que fuesen.

Algunos de los rasgos de aquella crisis parecen comunes a los de la crisis actual: un origen exterior, una economía con serios problemas estructurales y, por razones diferentes, cierta debilidad en la acción política. No me corresponde analizar tales similitudes, pero resulta interesante constatar que la crisis que hoy padecemos es ya en estos momentos mucho más grave que la vivida hace cinco décadas.

Le leo a Carlos Sánchez[56] que lo de la “tradicional amistad” esa que me enferma bien puede ser de la época de Adolfo Suárez. Y cita al vicepresidente Fuentes Quintana[57]: “cuando (Suárez) veía que flojeaba la balanza de pagos para pagar el petróleo, lo que hacía era enviar una misión diplomática a Riad y a los países vecinos” con lo que, sin duda, ese sí forjó la “tradicional amistad” de don Juan Carlos con ellos, que -dicho sea de paso- nos resolvió, pues, la papeleta. O quizá fue Claudio Boada[58], que entre 1981 y 1985 iba y venía sin parar como presidente del Instituto Nacional de Hidrocarburos (hoy REPSOL).

Bueno, camino del final, es ocasión de apuntarle alguna bondad a lo del 73: las economías occidentales empezaron a trabajar para su independencia energética, iniciando nuevos métodos de perforación y extracción del petróleo, creando tecnologías que conducirían a un mayor ahorro en las fábricas y en los coches, apostando por nuevas fuentes de energía y desarrollando el concepto sostenible, verde y limpio.

¡Caray, qué mal lo pasamos!


[1] Desde septiembre de 1940 la entrada de petróleo a España estaba bajo control británico y solo podía traer de América la cantidad estipulada por el Foreign Office. Esta situación se mantuvo hasta el verano de 1941 y durante un largo periodo el suministro español fue muy irregular. En 1942 la administración norteamericana sometió a más presión a la economía española, reduciendo las exportaciones de petróleo a España a dos tercios del consumo estimado como normal (el de 1935), y esta nueva situación duró hasta 1944. Para intentar paliar esta situación, en 1942, se creaba el Consejo Técnico de los Combustibles Líquidos, que escogió la opción de la producción sintética de petróleo. Ya antes del 36 se había iniciado en España la producción sintética de petróleo por parte de la compañía francesa Peñarroya, que tenía una planta de destilación en Puertollano y que alcanzó una producción anual de 8.700 toneladas de petróleo y sulfatos, lo que permitió obtener cuatro millones de litros de gasolina, 400.000 litros de lubricantes y 1.300 toneladas de asfalto. Y aunque el proyecto se inició en 1942, fue en 1948 cuando recibió tecnología, procedente de una empresa de Escocia, suministrada por una empresa francesa que, a su vez, utilizó una filial belga para no generar excesivos conflictos internacionales (pues desde 1946 el gobierno español contaba con el rechazo internacional). El coste del esfuerzo de producir petróleo sintético supuso una inversión de casi 2 billones de pesetas (aproximadamente 150 millones de dólares de esa época)53, que nunca resultó rentable.

[2] El 17 de septiembre de 1941, mediante decreto se otorgaron privilegios a las fábricas de aparatos de gasógeno.

[3] Albert Edward Wladimir Fülek Edler von Wittinghausen

[4] Se llagaron a expropiar 200 Has. en torno a Coslada. https://www.abc.es/cultura/libros/abci-franco-quiso-comprar-gasolina-hecha-agua-vino-y-verduras-201803281344_noticia.html

[5] Una mezcla mediante su «técnica especial y proporciones precisas» de agua del Jarama con etanol obtenido de vinos, zumos de remolacha, patata y naranja junto a naftalina y acetona. Demetrio Carceller, desde CAMPSA, denunció la inviabilidad de la fórmula y Filek adujo una conspiración de intereses empresariales y petrolíferos. Tras la denuncia el Ministerio de Industria y Comercio envió a un comité de expertos de la Comisión de Minas a comprobar la fabricación y funcionamiento de la ‘filekina’ y fue concluyente: era un timo. Se le concedió una segunda oportunidad en el Laboratorio de Química Industrial en la calle Ríos Rosas. Ahí terminó definitivamente el engaño. No hubo juicio, porque hubiera ridiculizado al régimen. Alberto von Filek ingresó en la cárcel en Barcelona como preso gubernativo, de donde pasó al campo de concentración para presos republicanos y brigadistas extranjeros de Nanclares de Oca. Fue extraditado junto a los cautivos alemanes en 1946 hacia Hamburgo. En esa ciudad moriría seis años después.

[6] https://elpais.com/cultura/2018/05/14/babelia/1526313996_805794.html

[7] El Instituto Nacional de Industria (INI) fue una entidad estatal española, creada como un soporte institucional para promover el desarrollo de la industria en España. Entre los años 1941 y 1980 constituyó de hecho el grupo empresarial más grande e importante de España. El INI desapareció en 1995 y sus funciones fueron asumidas por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Durante su existencia las grandes empresas que se establecieron a iniciativa del INI fueron SEAT, ENDESA, ENSIDESA y otras muchas dedicadas especialmente a la producción de hierro, acero y aluminio, y también a la industria petroquímica.

[8] https://dbe.rah.es/biografias/8413/juan-antonio-suanzes-fernandez

[9] California Texas Oil Company (Caltex); fundada en 1936 y que en 1947 se hace cargo de las subsidiaras europeas de Texaco (The Texas Company) y en 1948 queda participada por Japan’s Nippon Oil Company. Entre 1949 y 1966 se especializa en la construcción de refinerías por Europa. Desde 1967 se centrará en operaciones por Asia.

[10] En 1974 Exxon vendió su participación a Banesto y la compañía de refino pasó a llamarse desde 1975 Petróleos del Mediterráneo (Petromed).

[11] Marta Saldaña Martín y Silvia Montero Ramos. Estudios de caso de la política exterior española hacia el Mundo Árabe y Musulmán: Países del Golfo (2012)

[12] https://dbe.rah.es/biografias/11466/fernando-maria-castiella-y-maiz

[13] Judit Montoriol. La economía española y el petróleo: una relación estrecha. CaixaBank 2016

[14] En Marta Saldaña Martín y Silvia Montero Ramos, citado antes.

[15] Los de Sefarad’, son los judíos que vivieron en la península ibérica hasta su expulsión en 1492 por los Reyes Católicos de las coronas de Castilla y de Aragón (y su posterior expulsión de Portugal, en 1496, y del Reino de Navarra, en 1497); y también sus descendientes, quienes, más allá de residir en territorio ibérico o en otros puntos geográficos del planeta, permanecen ligados a la cultura hispánica.

[16] El establecimiento de relaciones diplomáticas entre España c Israel tuvo lugar el 17 de enero de 1986 mediante un canje de notas en La Haya entre el Secretario general de Política Exterior, Máximo Cajal, y el Director general adjunto del Ministerio de Negocios Extranjeros Yeshayahu Arung.

[17] En la 304 sesión plenaria de 4 de noviembre de 1950 el resultado de la votación fue de 38 votos a favor, 10 en contra (Bielorrusia, Checoslovaquia, Guatemala, Israel, México, Polonia, Ucrania, Uruguay, Unión Soviética, Yugoslavia) y 12 abstenciones (Australia, Birmania, Cuba, Dinamarca, Etiopía, Francia, India, Indonesia, Nueva Zelanda, Noruega, Suecia, Reino Unido).

[18] Albania, Jordania, Irlanda, Portugal, Hungría, Finlandia, Ceilán, Nepal, Libia, Laos y Camboya.

[19] María Dolores Algora; España en el Mediterráneo: entre las relaciones hispanoárabes y el reconocimiento del Estado de Israel. Revista CIDOB d’Afers Internacionals, 79

[20] El 31 de marzo de 1492 los Reyes Católicos firmaron en Granada -Edicto de Granada- la expulsión de los judíos. Según el texto –hubo varias versiones y múltiples copias–, el pueblo judío tenía hasta finales del mes de julio de ese mismo año para abandonar los territorios de las coronas de Castilla y de Aragón (de ahí el interés de Cristóbal Colón de salir en su primer viaje, que se demoró hasta el 3 de agosto).

[21] Egipto nacionaliza la Compañía del Canal de Suez, bloquea los estrechos de Tirán y apoya a fedayines en incursiones dentro de Israel que reacciona e invade el Sinaí y de la Franja de Gaza, que estaba ocupada y administrada por Egipto desde la firma del armisticio al final de la guerra de 1948, alcanzando rápidamente la zona del canal de Suez. La oferta de mediación de Francia y el Reino Unido fue rechazada por Egipto, tal como esperaban, por lo que los dos países europeos comenzaron a bombardear suelo egipcio desde sus bases en Chipre y Malta el 31 de octubre. Reino Unido y Francia reunieron 80 000 hombres y una flota de más de 100 barcos, entre los que había 7 portaaviones. Nasser respondió hundiendo barcos comerciales en el canal, hasta un total de 40, lo que convirtió a la región en intransitable hasta principios de 1957. Los bombardeos fueron seguidos por un despliegue de paracaidistas en Puerto Saíd a partir del día 5 de noviembre, donde aviones y buques ingleses y franceses intervinieron en el conflicto para proteger el canal de Suez, atacando Puerto Saíd y Port Fuad, por lo cual las tropas israelíes detuvieron su avance a 16 kilómetros al este del canal, situación que fue rechazada por los Estados Unidos, lo que permitió a Nasser la nacionalización del canal el mismo día que Israel completaba la conquista del Sinaí.

[22] Antonio Marquina. La normalización de relaciones diplomáticas entre Israel y España. Pag. 1137; 1986. Tal vez por las gestiones de España en la liberación de judíos sefardíes de Egipto desde la Crisis de Suez.

[23] En Antonio Marquina; pág 1139. En septiembre de 1979, Adolfo Suárez recibió en Madrid a Yasser Arafat; nuestro presidente de Gobierno estaba considerado por los judíos como el principal opositor a un pronto reconocimiento de Israel (pág 1140).

[24] https://www.libertaddigital.com/opinion/historia/franco-y-sus-amigos-arabes-1276239557.html

[25] https://www.cepc.gob.es/sites/default/files/2021-12/34254rpi127205.pdf

[26] Fernando Morán López (1926-2020); diplomático, escritor y político español militante del Partido Socialista Obrero Español. Desempeñó el cargo de ministro de Asuntos Exteriores entre 1982 y 1985, durante el primer gobierno presidido por Felipe González. Famoso por sus despistes, generó un género propio de chistes. Integrante del llamado «grupo de Salamanca» en torno a Enrique Tierno Galván, corredactó junto a este último en enero de 1957 el documento que se vino a llamar «de las tres hipótesis» (que gozó de la aquiescencia de José María Gil-Robles y Dionisio Ridruejo) que planteaba una acción conjunta contra el régimen franquista. Fue uno de los fundadores del Partido Socialista del Interior en 1967.

[27] En 1977 la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) abrió oficina en Madrid y fue reconocida oficialmente por el Gobierno español en 1986. En 2010 elevó el estatuto de la representación diplomática y el Jefe de Misión recibió el tratamiento de Embajador. Husni Abdel Wahed es embajador de la Autoridad Nacional Palestina en España desde la primavera de 2022. En la actualidad, 139 países reconocen a Palestina. En Europa, además de Suecia, lo han hecho Polonia, Hungría, República Checa, Bulgaria, Eslovaquia, Rumanía, Chipre y Malta. Estados Unidos, Alemania, Canadá, Italia o Países Bajos.

[28] En 1948 los partidos nacionalistas marroquíes forman un Frente Nacional con el objetivo de lograr la independencia. En repetidas ocasiones, el sultán señaló que él deseaba lo mismo. Por ello, en 1952, Francia depuso al sultán y lo desterró sustituyéndolo por Muley Ben Arafa, también miembro de la familia aluí. España mostró su descontento por no haber sido informada previamente: en 1954 Franco declara que el Protectorado español permanecerá bajo la soberanía del jalifa, nombrado por el sultán, ya que el cese de éste exigía el consentimiento previo español. Esos años eran de tensión entre la Francia de la IV República y el régimen franquista. En 1955, El Glaoui (señor de la guerra de la zona de Marrakesch y colaboracionista con Francia), y la autoridad francesa en Marruecos, respaldados por el Alto Comisario español, el general García Valiño, querían ofrecer provisionalmente el trono de Marruecos entero al jalifa de la zona española: Muley Hassan Ben Mehdi, más manejable para los europeos. Además, Franco, de esta forma intentaba sustituir a Francia en Marruecos. Pero la situación en el Marruecos francés fuese deteriorándose, con aumento de la violencia y los atentados, lo que llevó a los franceses a permitir el regreso del sultán en 1955 y destituir a Ben Arafa. El 2 de marzo de 1956, Mohammed V consiguió la independencia de su país por el gobierno de Francia -ya agobiado por la guerra de Argelia-, sin consultar para nada a Madrid. Ese invierno de 1956 el régimen franquista había tenido una violenta y grave crisis universitaria, con incidentes callejeros, desconocidos desde la guerra, entre estudiantes liberales y el falangista SEU, a causa de unos incidentes ante la embajada británica por el tema, siempre recurrente, de Gibraltar. El día 7 de abril, a pesar de la oposición de ciertos sectores militares, el gobierno franquista se veía obligado a reconocer apresuradamente la independencia del Marruecos español.

[29] Impide la concesión de nuevos permisos para la realización de sondeos en todo el territorio español y aboga por la descarbonización de la economía española de aquí al año 2050 y su transición a un modelo circular que garantice el uso racional de los recursos, la adaptación al cambio climático y la implantación de un modelo de desarrollo sostenible. https://www.eldia.es/economia/2022/04/22/hay-petroleo-cerca-canarias-espana-65274314.html

[30] El lío de 9 días (11 al 20 de julio de 2002) que terminó con la Operación Romeo-Sierra.

[31] Fosfatos de Bucraa, S. A., actualmente Phosboucraa, fue una empresa minera española radicada en el Sahara Español, integrada desde 1976 en la empresa minera y química estatal marroquí OCP Group, dedicada a la explotación a cielo abierto de fosfatos en Bucraa.

[32] 23 de noviembre de 1957 al 30 de junio de 1958 que tuvo lugar en los territorios españoles de Ifni, Cabo Juby y Sahara español que se resolvió con el Acuerdo de Cintra.

[33] Invasión y posterior ocupación militar de la entonces provincia española del Sahara, iniciada el 6 de noviembre de 1975. En esa época el Gobierno de Madrid se disponía a abandonar el territorio como parte de la descolonización de África, al igual que anteriormente había otorgado la independencia a Guinea Ecuatorial en 1968. Los saharauis aspiraban a formar un Estado independiente. El plan marroquí consistió en transportar 300 000 civiles con unidades militares armadas camufladas entre ellos. El plan fue diseñado por el Departamento de Estado de los Estados Unidos y contó con su apoyo logístico y el de la CIA.Otra cosa que no entiendo es el tradicional y sempiterno apoyo yanqui a Marruecos. El motivo oficial del apoyo estadounidense y francés a Marruecos fue que preferían un Sahara marroquí a un Sahara títere o satélite de Argelia, rival regional de Marruecos y que además estaba en el bloque comunista. Pues así nos va.

[34] Perito industrial que gran parte de su vida se la ganó con la venta de hasta 73 patentes, junto a la buena suerte en la lotería. Por ejemplo, en 1951 patentó un dispositivo para el encendido automático de tubos fluorescentes que le reportó 350.000 pesetas. En 1972 llegó a obtener la medalla de plata en la Exposición Internacional de Inventos de Bruselas. Su motor funcionaba con agua a la que añadía boro o ferrosilicio (no desveló la substancia) pero que producía hidrógeno, con lo que no era un motor de agua, sino de hidrógeno. El propio Estévez registró un Sistema de Regasificación de Hidrogeno en la oficina de patentes; no un motor de agua. Con el empresario catalán José Carrera Rey creó la socirdad Aguacar, SA para producir el motor… y se fugó con los 5 millones de pesetas aportados. Murió en Sevilla a finales de los 90.

[35] https://www.youtube.com/watch?v=NAx6_thIkKE

[36] De los 3 $/barril se pasó a los 12 $/barril

[37] Después de los acuerdos de Achnacarry (1928), las grandes compañías establecieron un sistema común a partir del precio del petróleo del golfo de México más el coste del transporte. A partir de 1935 este precio fue fijado por el Gobierno federal de los Estados Unidos. A mediados de los años cuarenta los precios de Oriente Medio, en concreto los de Arabia Saudí en la terminal de Ras-Tanura, se convierten en FOB que funcionan en paralelo con los de Estados Unidos. El precio de referencia del “crudo ligero” de Arabia Saudí, precio FOB (free on board; libre a bordo), era de 1,75 dólares por barril a comienzo de los años cincuenta. Durante esta década los precios fueron elevándose y vinculándose a los acuerdos fifty-fifty -Las compañías norteamericanas en Venezuela tuvieron que aceptar en 1948 un cambio del régimen

fiscal que consistía en dividir los beneficios con el Gobierno al 50%. El Gobierno estadounidense permitirá a estas compañías deducir de los impuestos a pagar lo abonado a los gobiernos de los países productores. A finales de los años cincuenta, los norteamericanos ofrecerán el mismo trato a Arabia Saudí- hasta llegar a finales de la década a un descenso. En 1964 se modificará el sistema de cálculo de los royalties que las compañías pagaban a los gobiernos y que se relacionaba no con los precios si no con la producción. A partir de esa fecha supondrían un porcentaje del precio del barril extraído. Durante la década de los años sesenta los precios de referencia se mantuvieron fijos, lo cual suponía un abaratamiento en términos reales si tenemos en cuenta a la inflación. En los años setenta, tras el denominado Acuerdo de Teherán (sobre crudos del Golfo Pérsico, efectivo el 14 de febrero de 1971), los precios de referencia del petróleo del Golfo Pérsico aumentaron 35 centavos de dólar por barril, más una cantidad según los grados de acidez del crudo.

[38] Ministerio de Industria; datos 1973

[39] Sociedad Hispánica de Petróleos (HISPANOIL) , fundada en 1965 que con el tiempo explotó pozos propios participados en Argelia o Gabón, además de acuerdos con compañías nacionales.

[40] Sociedad saudí fundada en 1968 entre la estatal Aramco y la Exxon Mobil.

[41] El Sensurround fue una experiencia de audio ideada por los Estudios Universal en 1974. Emitía sonidos a muy baja frecuencia, inaudibles para el oído humano pero que se percibían mediante vibraciones que hacían temblar la butaca. Desarrollado especialmente para la película Terremoto (Earthquake, 1974) también lo emplearon en La batalla de Midway (1976) Montaña rusa (1978) y Galáctica (1979)

[42] La crisis del petróleo se vio agravada por la importante huelga de los mineros del carbón. En diciembre el premier Heat tuvo que anunciar la limitación de uso eléctrico para fábricas, tiendas y oficinas a tres días a la semana. Desde el 1 de enero de 1974 los comercios tuvieron que reducir su jornada laboral. El gobierno prohibió la iluminación de escaparates y cerró pubs y restaurantes. Las cadenas de televisión tuvieron que dejar de emitir, y hasta Buckingham Palace se vio afectado por los cortes. En pocos días Reino Unido sumó 1’5 millones de parados.

[43] https://www.energy.gov/

[44] https://www.lainformacion.com/economia-negocios-y-finanzas/guerra-sindical-regimen-crisis-petroleo-espana-sufrio/2813213/

[45] Leonardo Caruana; Los difíciles orígenes de la industria petrolera española. Revista Empresa y Humanismo 2009 XII, 1/09, pp. 13-62

[46] https://www.libertaddigital.com/opinion/historia/cuando-espana-agasajo-a-sadam-husein-1276239585.html

[47] Según el DRAE:  de bute/dabuten significa Excelente, lo mejor en su clase. Es leguaje jergario y localista. Se trata de una germanía (es decir, jerga de delincuentes) según el diccionario de Zerolo (1895). Según Alemany y Bolufer (1917) viene de «cierta imprecación contra Dios, frecuente en boca de los ingleses».

[48] Partido Baaz Árabe Socialista que en algunas ocasiones llamado Partido del Renacimiento Árabe Socialista porque baaz en árabe significa renacimieto o resurrección fue fundado en 1947 como un partido político nacionalista árabe, laico y militante del socialismo árabe.n El socialismo árabe es diferente al socialismo marxista-leninista tradicional. El Baaz apareció inicialmente como movimiento nacionalista árabe en 1940 de la mano de los pensadores sirios Michel Aflaq y Salah Al-Din Al-Bitar. Tomó fuerza en los años siguientes en Siria. En 1966 el Partido Baaz Árabe Socialista se dividió en dos facciones: la pro-siria y la pro-iraquí. Los baazistas gobernaron Irak brevemente en 1963, y luego desde julio de 1968 hasta 2003.

[49] https://www.libertaddigital.com/opinion/historia/cuando-espana-agasajo-a-sadam-husein-1276239585.html

[50] https://elpais.com/diario/1979/08/14/espana/303429610_850215.html

[51] Expansión. Datos Macro.

[52] Conflicto bélico surgido entre Irán e Irak que comenzó por Irak el 22 de septiembre de 1980 y duró hasta el 20 de agosto de 1988, finalizando este sin un claro vencedor. Divergencias de concepción del mundo entre árabes y persas.

[53] contención salarial, una política monetaria restrictiva, la reducción del déficit público y la adopción de un sistema de cambios flotantes para la peseta, con la consiguiente devaluación, así como reformas del tipo de modernización del sistema fiscal, aprobación de un nuevo marco legal para las relaciones laborales y liberalización del sistema financiero

[54] https://www.funcas.es/wp-content/uploads/Migracion/Articulos/FUNCAS_PEE/034art12.pdf

[55] https://ishimura.uc3m.es/monet/monnet/IMG/pdf/El_ajuste_economico_de_la_transicion___Sudria___EL_PAIS.pdf

[56] https://blogs.elconfidencial.com/espana/mientras-tanto/2018-10-23/amistad-arabia-saudi-espana-armas-petroleo_1634235/

[57] https://www.biografiasyvidas.com/biografia/f/fuentes_quintana.htm

[58] https://dbe.rah.es/biografias/8725/claudio-boada-vilallonga

DE LA CRISIS DEL PETRÓLEO DE 1973… ¡CINCUENTA AÑOS YA! (I)

Los precios de los combustibles están subiendo sin parar y al arrancar este último cuatrimestre del año 2023 y viendo las causas de esta subida -restricciones en la extracción de petróleo de los países de la OPEP, especialmente Arabia Saudí[1], y a la natural y consecuente prohibición de importación desde Rusia- me he acordado de que hace cincuenta años -1973- sufrimos la primera crisis del petróleo; y fue dura, muy dura.

Y documentando este Post me he acordado -y mucho- de mis tíos Paco y Antonio que de esto del petróleo en España sabían un montón; porque lo habían vivido en primera persona y me hubieran puesto en bandeja este post. Paco, comenzó en REPESA, en el valle de Escombreras -en el Poblado de la Refinería, que recuerdo al igual que la antorcha de refinería siempre encendida-, subiéndose por las torres de destilación y haciendo cálculos en los despachos; terminó en Madrid, en ENPETROL y REPSOL. Antonio se fajó en la ENTASA de Tarragona y yo lo entrevisté para documentar la información del accidente de los Alfaques[2] en el 78. Y recorrí con él aquel pantalán de carga que se entraba en el Mediterráneo y que, confieso, me daba pelín susto con aquel mar picadillo… Ah, disfrutábamos -él y yo- de la buena mesa, el buen licor y los cigarros… comentando de dónde llegaba el petróleo a España y dónde y cómo lo comprábamos y el mercadeo que todos se traían y los precios de los combustibles. Echo de menos a los tres hermanos: Juan, mi padre, Paco y Antonio.

Sé que voy a mezclar muchas cosas -incluso churras con merina-, pero es que tengo el esquema mental hecho ya y, aunque resulta laberíntico de plasmar, voy a desarrollarlo. Y es complejo, porque 1973 fue un año muy especial. Cincuenta años después, permítanme este repaso.

Así, a bote pronto, de lo que pasó en 1973 un Juan Español tipo se acordaría, digo yo -y es mi caso-, de los sucesos patrios del mes de diciembre (donde, por cierto, ya la teníamos liada con el precio del petróleo): del asesinato por ETA del presidente del gobierno, almirante Luis Carrero Blanco[3] -que había asumido el cargo en junio-, y, creo que, también se acordaría del llamado Proceso 1001[4] contra la cúpula de Comisiones Obreras, que entonces estaba considerado como un sindicato ilegal y concentraba de verdad la oposición al Régimen.

De los otros 99 de mi percentil estrella, muchos se acordarán de Eva María -la de la maleta de piel y el bikini de rayas; que se marchó… cosas de Formula V-; de Luís Buñuel, que se trajo un Oscar de Hollywood[5]; de Nino Bravo, que se nos fue; del final de la guerra en Vietnam y la retirada estadounidense; de que España y China -entonces China popular, frente a China nacionalista, hoy Taiwán- establecieron relaciones; de que se produjo la primera llamada de telefonía móvil[6]; de que arrancó el Watergate que se llevaría por delante a Nixon; del Frente Polisario, que entró en escena; de Pakistán, que reconoció (se quitó de encima, vamos) al misérrimo Bangladesh (aquel rollo de Pakistán occidental y Pakistán oriental), de que Luis Ocaña ganó el Tour; de Johan Cruiff, que llegó al Barça; de la plata que conseguimos en el Euro-básquet; de que Marruecos nos apresaba pesqueros a troche y moche -deporte nacional alauita del nivel de los piratas berberiscos en los siglos XVI al XIX- con el rollo de la ampliación de sus aguas jurisdiccionales; de la “aparición” del ‘Síndrome de Estocolmo’ (tras el asalto al Kreditbanken en aquella ciudad); de Pinochet, que dio un golpe de Estado en el Chile de Allende; del Concorde, que por primera vez cruzó el Atlántico a velocidad supersónica; de que en los EEUU la homosexualidad dejó de ser considerada una enfermedad y llegó la legalización del aborto; y de que un temporal de lluvias -ahora DANA- en el área Granada-Murcia-Almería ahogó las localidades de Zurgena[7] y Albuñol. Mi toque de geografía-riesgos naturales que no podía faltar.

1973 fue un año convulso en lo económico; aunque, todo hay que contarlo, la década ya había comenzado mal.

Los EEUU -que iban a bajarle la persiana a la Guerra del Vietnam[8]– tenían un problema de financiación de narices cyraquianas[9] por el super esfuerzo bélico[10] (inasumible para ninguna economía mundial) y ni cortos ni perezosos tomaron por el camino de en medio y pusieron en marcha una financiación adicional ¡en base al petróleo! El 15 de agosto de 1971 abandonaron la ortodoxia monetaria que imperaba en el mundo desde 1944 -gracias a los Acuerdos de Bretton Woods[11]– y se desvincularon -porque sí- del sistema del Patrón Oro[12], suscribiendo un nuevo procedimiento de divisas flotantes donde el gran muñidor Henry Kissinger[13] consiguió que los dólares estuvieran respaldados por las reservas de petróleo de los yacimientos en los territorios de la OPEP[14] tanto o más que por el oro de la Reserva Federal[15]. Así, la OPEP aceptó que toda transacción de crudo en el planeta se hiciera en dólares; y EE.UU. asumió el compromiso (un ‘secreto’ a voces) de armar a Arabia Saudita (principal productor de petróleo de los países miembros) y con esa medida se complicó el panorama económico mundial donde unos estábamos, al llegar 1973, unos más jodidos que otros. La crisis del 73 fue un palo para todos.

A veces, se olvida contar que con estas medidas que he referido, entre 1970 y el otoño de 1973, el precio del barril de petróleo se había incrementado de por sí ya en un 50% y se terminó poniendo tan mal la cosa que en diciembre de 1975 los norteamericanos blindaron sus reservas estratégicas con la EPCA (Energy Policy and Conservation Act)[16] que prohíbe la exportación de crudo norteamericano.

Sí, lo de la economía chunga estaba tan al orden del día que en 1973 hasta Pink Floyd[17] -mordaces ellos- sacaron su “Money[18] (en el álbum The Dark Side of the Moon que fue presentado a bombo y platillo en aquel mes de marzo…) y lleva más de 50 millones de copias vendidas. A ellos les fue bien.

Y si mal estaba ya la cosa en marzo no me vean en octubre cuando estalló la guerra del Yom Kippur[19] -18 días de hostilidades, desde el 6 de octubre[20]– y en medio de aquella ensalada de tiros el 17 de octubre de 1973, la Organización de Países Árabes Exportadores de Petróleo (OPAEP; organización incluida dentro de la OPEP [21]) va y cierra el grifo del petróleo. La que se armó. Cincuenta años ya; ¿quién lo diría?

Recuerdo aquel otoño; lo viví con intensidad. Era el curso 1973-74 y yo ya estaba en COU y con la mente puesta en la Universidad y va y… salta la noticia: Egipto y Siria atacan por sorpresa a Israel. En Yom Kippur[22] los egipcios cruzaron el canal -en la Guerra de los 6 días[23], en 1967, los israelíes les conquistaron la península del Sinaí y pararon en la mismísima orilla del canal de Suez- rompiendo la línea Bar-Lev[24] al mismo tiempo que los sirios, por arriba, entraron en los Altos del Golán[25]. En resumen, como les dije, 18 días de combates… hasta que Henri Kissinger, del que ya les he hablado, viaja a Moscú para negociar una solución en un momento en que faltó el bigote de una gamba para liar la tercera Guerra Mundial[26] porque los israelíes reaccionaron a tiempo y se comían a egipcios y sirios.

Finalmente, las partes enfrentadas siguieron una resolución de la ONU que pedía el inmediato alto el fuego. El 25 de octubre de 1973 callaron las armas … y el mundo entero se puso a investigar el porqué del terrible fallo[27] de la inteligencia israelí -les pilló el ataque por sorpresa- y el cambio de estrategias sobre la aviación y los blindados en los escenarios de batalla que sigue siendo asignatura pendiente aún hoy (y a Ucrania reciente me remito). Ah, y allí mismo, comenzó a operar un cambio de paradigma entre Egipto e Israel[28]

Y en aquel último cuatrimestre de 1973 pudimos comprobar en carne propia lo que podía ser del mundo sin petróleo. ¡Cincuenta años ya!

Entonces -como ahora- mis simpatías eran -y son- hacia el Estado de Israel. Veníamos de la masacre de Múnich[29], ocurrida durante los Juegos Olímpicos de 1972, en la que once miembros de la delegación olímpica israelí fueron secuestrados y asesinados por los terroristas de Septiembre Negro[30]. Y nos metimos en una nueva guerra árabe-israelí. Me posiciono: proisraelí.

¿La causa -el origen- de esta decisión (muy meditada)?

Principalmente que nunca he entendido que por estos pagos de la vieja piel de toro estuviéramos hablando durante mi mocedad de la “tradicional amistad española con los pueblos árabes”. Amistad que -digo yo-, salvando lo del 711 -que duró hasta 1492; o hasta 1609, si entramos con lo de la expulsión de los moriscos- no consigo hilvanar con la idea principal. ¿Amistad?, ¡qué narices!

Como ya lo he contado en este blog[31], insisto: me he hecho eco de que esto viene de cuando Martín-Artajo[32], en 1946, pidió árnica en la ONU y sólo -siempre se ha dicho, contado y escrito- Arabia Saudí, Irak, Yemen, Siria, Líbano, Transjordania y Egipto -cuentan los cronicones- nos dijeron que aceptaban a Franco sin más.

Pero si vamos a la Resolución 39 (I)[33] de la Asamblea General de la ONU “sobre la cuestión española[34] de la quincuagésima nona reunión plenaria, del 12 de diciembre de 1946, resulta que, en la votación, nos apoyaron solo seis países iberoamericanos: Argentina, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador y Perú. Y de los países árabes, ¿qué? Pues hay que buscar en el capítulo de las abstenciones[35] para encontrar a Arabia Saudita. Además, en aquella votación Irak se ausentó. Así que, permítanme, califico, con malsana ironía, de ‘tremendo’ el éxito diplomático[36] del representante de España para Oriente Medio, que -obvio su nombre- como cónsul general de España en Jerusalén (manteniendo la estructura de cuando aquel territorio estaba bajo el imperio Otomano) negoció en Bagdad, con la Liga Árabe, los apoyos para aquella votación. ¿Apo… qué?

Así que, no sé, pero imagino que lo de la “tradicional amistad española con los pueblos árabes” debe referirse a lo de “El Cid”[37], para con don Rodrigo Díaz de Vivar.

Mi padre, en su erudita sensatez, me explicaba que Franco era un africanista[38]: Marruecos tenía que ser un apéndice de la península Ibérica. Franco, he leído, entendió la mentalidad musulmana[39] y apoyó el hajj[40] (entre 1936 y 1951) de aquellos norteafricanos “nuestros”. Con eso, se ganó el apoyo de los árabes de la primera mitad del siglo XX que gustaban de un discurso netamente anticomunista y antiliberal donde luego se añadió la guinda de antijudío.

Franco, leo, fue un defensor del Principio de No Injerencia[41] y se manifestó hostil, en aquellos primeros años, frente a Francia y Gran Bretaña que dirigían de facto la vida de aquellos países árabes que querían salir de sus tutelas[42].

Pero no hay más. Y pese a estas explicaciones, sigo sin entenderlo.

Y todo es porque esta España que me duele -desde Franco y la Alianza de Civilizaciones de ZP- se ha volcado con el mundo árabe[43] y la causa palestina[44]. Y no lo entiendo. Y ni lo pretendo entender, que es más grave.

Históricamente, a esto de la vinculación con el mundo árabe, no le veo ni pies ni cabeza; porque -y mira que lo habíamos hablado- desde 1947 la administración americana había empezado a revisar su política hacia España y estaba en marcha el llamado “proceso de rehabilitación”[45] y ya los EEUU habían comenzado a vernos con mejores ojos[46] porque Lequerica[47] tejía con esmero su Spanish Lobby que en 1950 anuló la resolución de la ONU (del 46).

Y luego estaba Sanz Briz[48], el diplomático español que salvó del Holocausto a miles de judíos durante la IIGM (sin lista y sin película de éxito[49]), que tejía su red en Israel.

Y si es por lo del petróleo… hasta el 36 habíamos dependido del petróleo de las multinacionales y de alguna partida de petróleo soviético de Sovneft (desde 1993, Rosneft)[50] que llegaba a través de la PPP (Petróleos de Porto Pi), propiedad de un personaje como Juan March y al que el dictador Primo de Rivera no le hizo ascos.

Aquí llegados quiero señalar que desde finales del XIX el mundo utilizaba buenas cantidades de petróleo que se destilaba para producir ciertos gases apa alumbrado, lubricantes, asfalto y un “residuo” de destilación que se vendía como “gasolina ligera” y se utilizaba en los hogares como disolvente para quitar manchas; se vendía en droguerías y farmacias.

Hasta 1860 no hubo importación de petróleo en España. Desde esa fecha hasta 1900 en promedio se importaban del orden de las 30.000 toneladas anuales. Entre 1901 y 1914 importamos 34.000 toneladas cada año. Las suministraba Vacuum Oil Co., desde 1879 empresa del grupo Rockefeller y la matriz Standard Oil, que siguió suministrando durante el conflicto mundial, pero dando paso poco a poco a la Royal Ducht Shell que le ganó terreno (o se dejó ganar porque las siete hermanas[51] se lo cocinaban todo entre ellas).

Cuando los motores de combustión interna entraron en acción se empezaron a utilizar como combustibles los productos existentes. Y estos eran el gas licuado del petróleo, el aguarrás, el metano, los alcoholes -de origen vegetal como el etanol- y -¡por fin!- la llamada gasolina ligera[52] que “tiraban” poco, pero hacía mover el vehículo. En 1910 las ventas de gasolina (ligera) ya superaron las de queroseno, gas fundamental para iluminación urbana y principal producto obtenido del petróleo utilizado para iluminación urbana hasta esa fecha.

El boom de la gasolina comenzó a partir de 1908 a pesar de que desde 1885 -cuando el alemán Maybach[53] patentó un carburador que pulverizaba gasolina- ya existía un sistema eficaz para garantizar la combustión más eficaz para lograr el mayor empuje. Y eso se consiguió cuando llegó la llamada “gasolina media” que es (prácticamente) la de hoy en día.

En España no encontramos el primer vehículo matriculado (el PM-1, en Palma de Mallorca) hasta octubre de 1900[54]. Y aquellos primeros vehículos debían repostar en las estaciones de ferrocarril, que tenían bidones de gasolina ligera. Al poco, esos mismos bidones, con bomba manual, ya se encontraban en manos de avispados farmacéuticos y drogueros que lo mismo suministraban queroseno que gasolina -bajo el nombre de ‘aceite mineral’, para automóviles, estufas, lámparas y control de playas agrícolas- y disolventes. Y, en seguida, este servicio pasó a darse en los garajes que reparaban automóviles. La primera reglamentación española de gasolineras es de 1921; cada ayuntamiento podría decretar las de su término municipal y el ingeniero jefe de Obras Públicas de cada provincia, las de sus carreteras.

Terminada la IGM, entre 1921 y 1925 se triplicó la demanda de petróleo en España y entre 1921 y 1930 se multiplicó por más de diez. Entonces suministraban Standard Oil el 50% y Asiatic Petroleum (de la Royal Dutch Shell) el 35%. El 15% restante lo importaba y servía una empresa española, Petróleos de Porto Pi, de la que Juan Marcha detentaba el 50% de participación y había logrado la exclusiva de venta de petróleo ruso en España, Portugal y Marruecos en enero de 1926.

Así las cosas, en 1927, en la dictadura de Primo de Rivera, se crea el Monopolio Oficial del Petróleo de España (RDL de 28 de junio de 1927)[55] -que duró 75 años[56]– y el Estado español pasó a ser el único importador y distribuidor de productos de petróleo y combustibles líquidos en la península a través de la CAMPSA (Compañía Arrendataria del Monopolio de Petróleos, SA). March (PPP) quería el monopolio en exclusiva, pero se conformó al controlar los puestos directivos de la CAMPSA que consiguió incrementar hasta el 20% el pequeño porcentaje de petróleo soviético de Sovneft en exclusiva -y no teníamos relaciones diplomáticas con la URSS-, cabreando monumentalmente a Standard Oil y Royal Ducht Shell que, a través de los gobiernos británico y norteamericano protestaron largamente y amenazaron la estructura económica española. Muchos investigadores aseguran que la caída de Primo de Rivera se orquestó por las dos grandes petroleras.

El caso es que llegó a aquella España el petróleo justo, pero el justito, para no hundirnos aún más en los felices 20. Y entre 1927 y 1930 CAMPSA se dedicó a vegetar: ni hizo sondeos, ni construyó refinerías, ni buscó carburantes sintéticos, objetivos señalados por aquella ley. Lo único que hizo fue comprar el petróleo soviético y perder dinero a espuertas. Mientras tanto, en Tenerife, se fundó la Compañía Española de Petróleos (CEPSA; 1929) que sí construyó una refinería y terminó suministrando refino a CAMPSA. ¡Qué gran país este!

Cuando llegó la República (1931) a CAMPSA le siguieron dando el monopolio desastroso y siguió llegando el petróleo ruso aunque cada día lo hacía con más dificultad. March, antirrepublicano (por contrabando de tabaco lo habían metido en la cárcel) llevó a la PPP a presentar en París una demanda internacional, junto a la Banca Arnús, contra Sovneft: y el fallo obligó a CAMPSA a pagarle 30 millones de francos a March. Sumando deudas.

Al estallar la guerra civil CAMPSA “se desdobló” (una en cada bando) y ninguna tuvo serios problemas de abastecimiento. La Texaco[57] norteamericana apoyó a Franco, mientras la URSS -y algunos autores añaden a Rumanía- lo hacía a la República. March le puso un nuevo pleito a Sovneft y aunque le ganó 100 millones de francos a la República, se dilató la causa y no se pagaron.


[1] https://cincodias.elpais.com/economia/2023-09-05/el-petroleo-se-dispara-de-precio-tras-la-decision-de-arabia-saudi-de-prolongar-los-recortes-de-produccion.html

[2] Camping Los Alfaques, en Alcanar (Tarragona), 11 de julio de 1978: explotó un camión cisterna con propileno en la N340, sentido Sur, a su paso frente al camping. 243 fallecidos y más de 300 heridos. Había cargado en la refinería.

[3] El 20 de diciembre de 1973 un atentado de ETA (Comando Txikia) acabó con las vidas del presidente del Gobierno Luís Carrero Blanco, su chófer -José Luis Pérez Mogena- y el inspector de Policía Juan Antonio Bueno Fernández. Cuando circulaba por la calle Claudio Coello, alrededor de las 9’27 horas de la mañana, los terroristas de ETA activaron las cargas explosivas. A las once de la noche Radio París, en su informativo en castellano, dio cuenta de que ETA acaba de emitir un comunicado en el que asumía la autoría del atentado, al que califica de «justa respuesta revolucionaria» a las muertes de nueve miembros de la organización a manos de la Guardia Civil.

[4] Proceso 1001/72. El 24 de junio de 1972, la dirección de Comisiones Obreras, sindicato declarado ilegal y principal opositor a la dictadura en el ámbito obrero, fue detenida en el convento de los Oblatos de Pozuelo de Alarcón –Madrid–, donde se encontraba reunida. Permanecieron encarcelados hasta la celebración del juicio, más de un año después, bajo la acusación de ser dirigentes de una organización ilegal por su presunto vínculo con el Partido Comunista de España, lo que sería un claro caso de asociación ilícita. El juicio tuvo lugar los días 20 –que coincidió con el asesinato del presidente del Gobierno, Luis Carrero Blanco, lo que originó la suspensión del juicio durante unas horas–, 21 y 22 de diciembre de 1973. Los diez miembros de la dirección fueron condenados a penas de entre 12 y 20 años. Un año después, el Tribunal Supremo revisó las penas, rebajándolas a penas de entre 2 y 6 años. 25 de noviembre de 1975 fueron indultados por el rey Juan Carlos I.

[5] “El discreto encanto de la burguesía”, al mejor film extranjero.

[6] Martin Cooper, de Motorola, llamó a Joel Engel, de Bell Labs, para restregarle por la oreja de que lo habían logrado. Luego tardaron 10 años en tener listo el primer terminal.

[7] Datos validados por Agencia Estatal de Meteorología: en la localidad almeriense de Zurgena cayeron unos 420 mm en una hora y el total de ese día ascendió a los 600 l/m2, que se acumularon en unas 2 horas (teniendo en cuenta el tiempo que estuvo lloviendo), con una primera tormenta que descargó 180 mm entre las 11 y las 12 horas, y los 420 mm comentados anteriormente que se registraron entre las 13 y las 14 horas, con una tregua de una hora entre ambas tormentas. Curiosamente, el mismo día se produjo otro aguacero similar en la localidad granadina de Albuñol, donde cayeron unos 600 l/m2 en pocas horas.

[8] Entre el 13 y 14 de noviembre de 1969, unas 250.000 personas protestaron en el centro de Washington contra la intromisión en la Guerra de Vietnam y exigieron un retiro. El movimiento de desobediencia civil protagonizo enormes manifestaciones. Richard Nixon ordenó en 1969 la retirada progresiva de las tropas norteamericanas. En enero de 1973 en París se pactó la retirada definitiva del ejército estadounidense de Vietnam del Sur en sesenta días. El 29 de marzo de 1973 concluyó la salida oficial de las tropas estadounidenses de Vietnam con la ceremonia de retirada de la bandera en la capital del Sur, Saigón. Solo quedó el personal de servicio en su embajada. La salida de las tropas yanquis supuso el colapso del estado vietnamita prooccidental. Las tropas del Vietcong entraron en Saigón el 27 de abril. Tres días después, el último soldado estadounidense evacuaba la ciudad. Las imágenes de los helicópteros despegados de la embajada estadounidense rumbo a los buques de la flota que les estaban esperando mientras una multitud de vietnamitas veían como era dejados en manos de los comunistas.

[9] En recuerdo de la napia del personaje Cyrano de Bergerac

[10] 200.000 millones de dólares en los veinte años (oficiales) que duró.

[11] Conferencia monetaria y financiera de las Naciones Unidas celebrada en Bretton Woods (Nuevo Hampshire, Estados Unidos), entre el 1 y el 22 de julio de 1944, que estableció las políticas económicas mundiales que estuvieron vigentes hasta principios de la década de 1970. Allí se establecieron las reglas para las relaciones comerciales y financieras entre los países más industrializados del mundo y que siguieron todos. También se decidió la creación del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, que empezaron a funcionar en 1946, usando el dólar estadounidense como moneda de referencia internacional.

[12] Sistema monetario que, básicamente, consiste en establecer el valor de la moneda de un país en relación a la cantidad de oro que este posea.

[13] Henry/Heinz Alfred Kissinger (1923); político estadounidense de origen judeoalemán -en 1942 obtuvo la nacionalidad americana- que tuvo una gran influencia sobre la política internacional. Ejerció como secretario de Estado durante los mandatos de Richard Nixon y Gerald Ford, entre 1969 y 1977, y fue consejero de Seguridad Nacional durante todo el primer mandato de Nixon. Negoció el fin de la guerra y la retirada del Ejército americano (1973); en 1973 le fue concedido el Premio Nobel de la Paz.

[14] Antonio Rafael Amaro: «La crisis económica de 1973: Un estudio comparado”, CEIS 20, Universidade de Coimbra (Portugal) 2013

[15] Es el «banco central» de los Estados Unidos. Custodia parte de las reservas de los «bancos miembros»: los federales, y los estatales asociados voluntariamente. El FED (Sistema de la Reserva Federal) es el sistema bancario central de los Estados Unidos cuyo objetivo es tomar decisiones de política monetaria del país, supervisar y regular instituciones bancarias, mantener la estabilidad del sistema financiero y proveer de servicios financieros a instituciones de depósito, al Gobierno estadounidense y a instituciones extranjeras oficinales. Fue creado por el Congreso de los Estados Unidos en 1913.

[16] Establece una reserva estratégica de petróleo en el Golfo de México y prohíbe la exportación de crudo norteamericano que con el tiempo se excluirán de la prohibición las exportaciones a Canadá, las exportaciones de crudo desde la ensenada de Cook en Alaska y la vertiente norte de este territorio y las exportaciones de una cantidad determinada de crudo californiano.

[17] Genial banda de rock británica fundada en Londres en 1965. Icono cultural del siglo XX y una de las bandas más influyentes de la historia de la música que pasó de la psicodélica al rock progresivo y al rock sinfónico. Sus canciones, de alto contenido filosófico, su música experimental, las innovadoras portadas de sus discos y sus espectáculos en vivo los encumbraron. Inicialmente el grupo estaba formado por el batería Nick Mason, el tecladista Richard Wright, el bajista Roger Waters y el guitarrista y vocalista principal Syd Barrett, el primer líder de la banda tras el efímero paso de Bob Klose, que no llegó a aparecer en ningún disco. El errático e impredecible comportamiento de Barrett, causado por el excesivo consumo de drogas hizo que en diciembre de 1967 su amigo David Gilmour se incorporara al grupo. Unos meses después, Barrett abandonó, y con el cuarteto formado por Mason, Wright, Waters y Gilmour quedó establecida la formación definitiva del grupo.

[18] https://www.youtube.com/watch?v=mMvD8WXBB6s  Comienza con una caja registradora, monedas tintineando, billetes… y entra la banda; sencillamente una obra de genios absolutos.

[19] La guerra de Yom Kipur, guerra del Ramadán o guerra de Octubre también conocida como la guerra árabe-israelí de 1973, fue un conflicto bélico librado por la coalición de países árabes liderados por Egipto y Siria contra Israel desde el 6 al 25 de octubre de 1973.

[20] La decisión de entrar en guerra se produjo después de recibir, en abril de 1973, los primeros misiles soviéticos Scud tierra-tierra con un alcance de 300 kilómetros. Desde mayo de 1973 se había denominado a este proyecto como “plan Badr”. La fecha escogida, en septiembre u octubre, pretendía hacerse coincidir con el décimo día del Ramadán, el mismo día que en 624 d.C. (dos años después de la Hégira) el profeta Mahoma comenzó los preparativos de la batalla de Badr que le permitiría volver a La Meca.

[21] El 14 de noviembre de 1960 los Estados y sheikanatos árabes dieron origen a la Organización de Países Exportadores de Petróleo, OPEP (OPEC), en tanto que el 9 de enero de 1968 Arabia Saudita, Kuwait y Libia constituían la Organización de Países Árabes Exportadores de Petróleo, OPAEP (OAPEC); el 7 de enero de 1970, en Bagdad, las empresas e instituciones estatales del petróleo, la SONATRACH (Argelia), la INOC (Iraq), la LIBTECO (Libia) y la Empresa General del Petróleo de Egipto celebraron un convenio sobre colaboración y coordinación en el dominio de la extracción de petróleo y de las políticas en relación con las compañías extranjeras.

[22] Día de la expiación, del perdón y del arrepentimiento de corazón o arrepentimiento sincero. El día más sagrado del año judío.

[23] Durante la breve guerra de junio de 1967 -6 días- Israel conquistó la vasta península del Sinaí (territorio egipcio), la franja de Gaza (ocupada militarmente por Egipto), la Cisjordania y Jerusalén Oriental (bajo previa administración jordana), y los Altos del Golán (de soberanía siria). A pesar de la contundente victoria militar, Israel no logró negociar la paz con sus vecinos árabes. En Noviembre de 1967 el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas emitió la resolución nº 242, que estableció los parámetros de las posibles negociaciones de paz, sobre la base recíproca (pero no simétrica) de la cesión de territorios ocupados por Israel en intercambio por la paz y la seguridad.

[24] Cadena de fortificaciones construidas por Israel a lo largo de 160 km de la costa este del canal de Suez, excepto en el Gran lago Amargo.  Un masivo muro de arena continuo alineado con el canal, sostenido por un muro de cemento. La arena variaba en altura de 20 a 25 metros con una inclinación de 45 a 65 grados. Prevenía el desembarco en la orilla izquierda del canal de cualquier unidad acorazada o anfibia sin previa preparación de ingeniería militar. Tas este muro de arena se hallaba la línea frontal de fortificaciones israelíes. El 6 de octubre de 1973 el 2º y 3er Ejércitos egipcios sobrepasaron la línea Bar-Lev gracias al elemento sorpresa, el fuego de artillería y cañones de agua que se llevaban por delante las barreras de arena. 72 horas después, Israel contuvo la invasión.

[25] Una meseta de unos 1.800 km2, de los que unos 1.200 km2 habían conquistado los israelís en el conflicto del 67 (y unos 250 km2 siguen controlados por la UNDOF como fuerza de interposición.

[26] Fue un día terrible. El 25 de octubre los EEEUU pusieron en alerta a sus fuerzas en todo el mundo a causa de la intención de la Unión Soviética de enviar las suyas a Oriente Medios. Unos y otros se miraron… y por fin desistieron.

[27] El fracaso de la inteligencia en identificar la amenaza estratégica y operacional en el Sinaí y el Golán supuso que no pudieran desplazar tropas suficientes a los frentes para encarar el ataque. La total confianza árabe en los misiles antiaéreos y contra-carro permitió que se anulara la manifiesta superioridad aérea y la maniobrabilidad terrestre de los blindados israelíes. 14 horas antes del ataque los israelíes supieron de la llegada de aviones rusos para evacuar a sus nacionales, pero la alerta se demoró. De todas formas, tiempo insuficiente para reaccionar a tiempo. No obstante, tras 3 días de retroceso, el Tzáhal (“el Ejército”, Las Fuerzas de Defensa de Israel) reaccionó y paró el golpe, atacando a continuación. Los israelíes llegaron a 32 km de Damasco, al ocupar Besan, y a 100 de El Cairo.

[28] Egipto fue distanciándose progresiva y definitivamente de la Unión Soviética y acercándose a los Estados Unidos. Siria, Libia, Argelia, Yemen del Sur, Iraq, y la Organización para la Liberación de Palestina constituyeron el Frente de Rechazo y condenaron cualquier negociación con Israel. La Liga Árabe expulsó a Egipto de su seno por buscar una paz separada y desentenderse de la causa palestina, por lo que como era de esperar la popularidad del presidente Sadat descendió vertiginosamente. En el mes de septiembre de 1978 el presidente Jimmy Carter reúne a Sadat y Begin Camp David, para resolver el conflicto palestino -notoriamente sin presencia de palestinos-, bajo la Resolución 242 de Naciones Unidas a través de un proceso de negociación. Estos fueron los Acuerdos de Camp David. La paz entre egipcios e israelíes se firmó finalmente el 26 de marzo de 1979, Egipto recuperó el Sinái, y presidente Anuar Sadat murió asesinado dos años después. La guerra supuso en Israel la caída del gobierno de Golda Meir, sustituida por Yitzak Rabin. Sin embargo, esto no fue más que el anticipo de la debacle que años más tarde sufría el laborismo en las elecciones por parte del Likud (partido de centro-derecha) de Menájen Beguin, líder del Irgún, armado y radical. Los laboristas habían gobernado Israel desde su creación como Estado.

[29] 5 y 6 de septiembre de 1972. Los atacantes, que contaron con asistencia logística de grupos alemanes neonazis,10 asesinaron a once atletas y entrenadores israelíes y a un oficial de la policía de Alemania Occidental.6 Cinco de los ocho miembros de Septiembre Negro resultaron muertos por la policía durante el fallido intento de rescate de los rehenes. Los tres secuestradores que sobrevivieron fueron detenidos, pero liberados tan solo 53 días después tras el secuestro de un avión de Lufthansa. Israel respondió a los asesinatos organizando las operaciones Primavera de Juventud y Cólera de Dios, con el objetivo de castigar colectivamente a todos los responsables de la masacre.

[30] Organización terrorista palestina fundada en 1970. Tuvo nexos con diversos grupos dentro de la OLP, principalmente con Fatah, por entonces dirigida por Yasser Arafat, y más tarde con el FPLP. Fue responsable del asesinato del primer ministro de Jordania, Wasfi el-Tell, el 28 de noviembre de 1971, así como del secuestro y asesinato de once atletas israelíes durante los Juegos Olímpicos de Múnich 1972. El nombre «Septiembre Negro» surge del conflicto homónimo iniciado el 6 de septiembre de 1970, cuando el rey Hussein I de Jordania impuso la ley marcial en respuesta al intento de los fedayines de derrocarlo. Miles de palestinos fueron asesinados o expulsados en dicho período. El grupo comenzó siendo una pequeña célula de Fatah que buscaba vengarse de Hussein I y de las Fuerzas Armadas de Jordania.

[31] https://jdiaz474.wordpress.com/2012/11/30/de-la-coherencia-con-nuestra-historia-que-dijo-margallo-ii/  http://juanjfdiaz.blogspot.com/2012/11/de-la-coherencia-con-nuestra-historia_30.html

[32] https://dbe.rah.es/biografias/11764/alberto-martin-artajo-y-alvarez

[33] http://www.derechos.org/nizkor/espana/doc/esp12dic46.html

[34] En realidad, la resolución de 12 de diciembre de 1946, la Asamblea General de la ONU reunida en San Francisco condenaba al régimen de Franco “por haberle sido impuesto por la fuerza a los españoles” y “por no representar al pueblo español” y recomendaba su exclusión de todas las instituciones y organizaciones internacionales hasta hubiera en España un gobierno más aceptable.

[35] Se abstuvieron Afganistán, Arabia Saudita, Canadá, Colombia, Cuba, Egipto, Grecia, Honduras, Líbano, Países Bajos, Siria, Sudáfrica y Turquía

[36] Los países de la Liga Árabe se abstuvieron en la votación para ratificar la condena a España en diciembre de 1946; Egipto envió un embajador a Madrid contraviniendo la resolución de la ONU. A esto respondió Franco no reconociendo al Estado de Israel en mayo de 1948 y apoyando la causa palestina.

[37] Al-Sid, el león; que pasó a el Cid. Tahar A. Makki, Universidad de El Cairo. Malhamat al-Sid: Awwal malhama andalusîya kutibal fi al-luga al-qashtalíya (Epopeya del Cid: primera epopeya andalusí escrita en lengua castellana). El Cairo, 1970 (pág. 173).

[38] Militares que hicieron parte de su carrera en el ejército colonial establecido en la zona del Protectorado de Marruecos. Los constantes combates para someter a las tribus rifeñas, si bien costaron muchas bajas, permitieron a los supervivientes hacer una rápida carrera militar gracias a los ascensos por méritos de guerra (Francisco Franco logró así llegar al generalato a los 33 años). Envidiados por los otros mandos, se fue desarrollando en ellos un espíritu de casta, enemigo de los políticos. En África hicieron su carrera buena parte de los mandos del ejército que luego se sublevarían contra la Segunda República en julio de 1936. Durante el régimen franquista se produjo un renovado interés por la proyección española en Hispanoamérica y la intervención en las posesiones en África, y a una intervención diplomática y un relanzamiento de la acción cultural, que, en el caso de África, dio lugar a la creación del Instituto de Estudios Africanos y de los Cuadernos de Estudios Africanos, así como a una cierta producción académica.

[39] Recomiendo vivamente el libro del profesor de literatura comparada de la U. de Illinois Eric Calderwood (Colonial Al-Andalus: Spain and the Making of Modern Moroccan Culture) publicado por Harvard University Press donde están buena parte de las claves de un proceso -el protectorado español, espejo del emirato nazarí de Granada- que incluye hasta a Blas Infante -decisivo en la configuración de la identidad andaluza y su herencia fantasiosa de los califas omeyas andaluces- y algunos detallazos más. https://www.academia.edu/39774699/Eric_Calderwood_2018_Colonial_al_Andalus_Spain_and_the_Making_of_Modern_Moroccan_Culture_Cambridge_Massachussets_London_England_The_Belknap_Press_of_Harvard_University  Cuenta Calderwood que incluso circuló el rumor de una secreta conversión del Caudillo al Islam. «Por el favor con el que trataba a los musulmanes empezaron a llamarle ‘El Hajj Franco’«. Hajj es el título que se da a una persona que ha cumplido el peregrinaje a la Meca. Franco nunca hizo tal viaje, pero consiguió que se le considerara «un buen musulmán«.

[40] Peregrinación que realizan los musulmanes a La Meca; el quinto de los pilares del islam, estipula que cada musulmán debe peregrinar, al menos una vez en la vida, a la ciudad de La Meca, siempre y cuando tenga los medios económicos y las condiciones de salud necesarias.

[41] El principio de no injerencia es un principio clásico del derecho internacional. Consagrado en el artículo 2.7 de la Carta de las Naciones Unidas, establece que ningún país puede intervenir en los asuntos internos de otros. Este principio prohíbe la injerencia de un Estado en el territorio o los asuntos de otro. El principio de no intervención protege tanto a los Estados soberanos y sus gobiernos como a los pueblos y sus culturas.

[42] En 1881 se inicia la primera oleada de inmigración judía a Palestina, motivada por las persecuciones a las que eran sometidos los judíos en Europa. Allí compraron tierras a los otomanos o a terratenientes árabes. El sionismo acordó en el Congreso de Basilea de 1897 establecer un estado judío en Palestina, entonces bajo dominio otomano. El surgimiento del sionismo dio lugar a otra gran oleada de inmigración que se produjo desde 1904 hasta 1914. La alianza otomana con Alemania y Austria en la IGM desencadenó el final de este imperio. Gran Bretaña entabló negociaciones y acuerdos con los árabes, instigando el nacionalismo que les llevaría a la independencia. De forma análoga también se comprometieron con el nacionalismo del movimiento sionista que culminó con la Declaración Balfour (2 de noviembre de 1917) del gobierno británico durante la Primera Guerra Mundial, para anunciar su apoyo al establecimiento de un ‘hogar nacional’ para el pueblo judío en la región de Palestina, que en ese entonces formaba parte del Imperio otomano. El mismo Balfour reconoció que había incompatibilidad entre las promesas de independencia hechas a ambos pueblos. De esa incompatibilidad se derivaron contradicciones y enfrentamientos que llevaron al conflicto, casi permanente desde entonces entre árabes y judíos. Previos, de 1916, son los acuerdos Sykes-Picot que pretendían el reparto de Oriente Medio entre Inglaterra, Francia y Rusia, para debilitar al Imperio Otomano, que había entrado en la guerra apoyando a Alemania. La Revolución Bolchevique impidió la participación de Rusia y el británico Sir Mark Sykes y el francés Charles François George Picot se repartieron el territorio. Francia se haría cargo de lo que hoy es Siria y de una franja costera que se convertiría en el Líbano actual, reconociéndole un ámbito de influencia que llegaba hasta Mosul (norte de Irak). Los británicos se reservaban Basora y Bagdad, así como una zona de influencia que llegaba hasta Persia, la futura Irán. Eso era lo mollar, porque el lío, Palestina, quedó en una situación algo indefinida: se la quedaban los británicos, pero bajo un mandato de la Sociedad de Naciones y recibieron la tercera oleada. No obstante, Londres tomó Mosul y, uniéndola a Basora y Bagdad, creó Irak. También le arrebató a los franceses una franja de Siria, anexionando una parte al estado iraquí recién creado y otra a Cisjordania, luego Jordania. También se iban a repartir Turquía, pero tras la IGM apareció Mustafá Kemal y como «Ataturk» (padre de la patria turca) dió al traste con las intenciones de Sykes y Picot. Chaim Weizmann y Nahum Sokolov, prominentes líderes sionistas en Londres y la Organización Mundial Sionista consiguieron los apoyos de Londres y París. Claves en el proceso fueron Lionel Walter Rothschild, el 2º Barón de Rothschild y líder de la Banca Rothschild y Jaim Weizmann que sintetizó la acetona para que el explosivo cordita resultara vital para los intereses del Reino Unido: ambos pidieron el establecimiento judío en Palestina. En la Conferencia de paz de Paris, el 3 de enero de 1919, donde el sionista Weizmann y el hachemita Faisal, hijo de Hussein rey del Hejaz, parece que llegaron a un acuerdo por el cual se aceptaba que Palestina fuera una entidad diferenciada del Estado árabe y que la Declaración Balfour se cumpliera, con la condición de que todas las otras reivindicaciones territoriales árabes fueran atendidas y cumplidas por las grandes potencias. La cuarta oleada judía se producirá entre 1916 y 1929 donde ya se producen reacciones violentas entre judíos y árabe-palestinos, lo que hace que los judíos organicen una fuerza de defensa llamada Haganá. En este periodo Faisal fuese expulsado de Siria por los franceses y nombrado rey de Irak por los ingleses, declaró nulos los acuerdos del presente tratado. en 1933 se desarrolla la quinta oleada judía y el comité especial de la Sociedad de Naciones dice ya no reconocer el acuerdo como válido. A partir de 1939 los británicos, que habían abandonado su idea de crear un estado judío, limitaron la inmigración y restringieron la compra de tierras por parte de los judíos, pero Weizmann lo reivindicó tras la IIGM. En 1947 las fuerzas británicas se retiran de Palestina y dejan el territorio en manos de la ONU que divide el territorio en dos estados dando a árabes y judíos una extensión similar de terreno, además Jerusalén quedaría como una ciudad internacional administrada por las Naciones Unidas. Weizman vuelva a la carga y en 1947 pide la validez del viejo tratado al haberse conseguido la independencia de la mayoría de los países árabes como reclamaba Faisal en su momento. Cuando Israel proclama su independencia en 1948 cinco países árabes le declaran la guerra e Israel consigue conquistar territorio adicional al del antiguo mandato. En 1956 se produce la guerra la Guerra del Sinaí desencadenada por la nacionalización del canal de Suez por parte de Egipto. Francia y Reino Unido acordaron intervenir secretamente con Israel derrotando al ejército egipcio. Sin embargo, ante la amenaza de la URSS, Estados Unidos obligó a las dos potencias y a Israel a retirarse de la zona. Esta guerra dejó una situación inestable en la región. A partir de los años 60, Siria, apoyada por la URSS comienza a lanzar ataques a Israel. La Guerra de los Seis días fue un conflicto armado que se produjo en 1967 cuando Israel, ante la posible amenaza por los movimientos de tropas egipcias, sirias y jordanas, atacó a Egipto. Durante el conflicto Israel conquistó la península del Sinaí hasta el canal de Suez. Después de esta guerra Egipto y Jordania fueron los únicos en firmar la paz con Israel en los Acuerdos de Camp David. En estos acuerdos fue devuelta la península del Sinaí a Egipto en 1973 exceptuando la Franja de Gaza. A su vez Egipto reconoció el Estado de Israel y estableció relaciones diplomáticas por primera vez, siendo el primero de los cuatro estados vecinos en hacerlo. Figura clave en el proceso fue el muftí de Jerusalem Hajj Amin al Husseini, quien deseaba una Palestina libre de judíos. Los únicos que tenían derecho a vivir en esa tierra era la yishuv o antigua comunidad judía que había convivido con los musulmanes desde tiempos remotos, como dimmís o protegidos del Islam. En 1919 asistió al congreso pan-sirio de Damasco donde apoyó el nombramiento de Faisal como rey de Siria. Hasta 1921 focalizó sus esfuerzos en el panarabismo y en la Gran Siria, con Palestina como una provincia del sur.

[43] En 1950 el rey Abdulá de Jordania fue el primer jefe de Estado en visitar el país -desde 1945- y en Madrid se inauguró el Instituto Faruq I de cultura árabe. Luego, Martín-Artajo hizo una gira en 1952 por aquellos países árabes que nos apoyaron, en la que le acompañó la hija de Franco… gira que sigo sin entender. Pero ¿quién soy yo?

[44] La causa palestina es un término muy abstracto, que se refiere, en términos generales, a dar una solución política para los palestinos, y esa solución pasa por establecer un Estado palestino, pero que nadie osa ponerle el cascabel al gato. La progresiva expansión de Israel sobre los territorios árabes y su consolidación como Estado, ha ido cambiando el paradigma del concepto.    

[45] https://www.bde.es/f/webbde/SES/Secciones/Publicaciones/PublicacionesSeriadas/EstudiosHistoriaEconomica/Fic/roja65.pdf

[46] https://www.jstor.org/stable/4501186; American Military Interests and Economic Confidence in Spain under the Franco Dictatorship 

[47] https://dbe.rah.es/biografias/12004/jose-felix-de-lequerica-y-erquicia

[48] https://dbe.rah.es/biografias/55303/angel-sanz-y-briz

[49] RTVE y Boomerang encargaron en 2011 a D10 Producciones “El Ángel de Budapest” sobre el libro de Diego Carcedo «Un español frente al holocausto«; manifiestamente mejorable y que pasó sin pena ni gloria por salas y reposiciones.

[50] Antes de que los EEUU horadaran el primer pozo junto al Oil Creek, en Titusville (Pensilvania, 1859) la Rusia Imperial era un líder en la extracción de “aceite de piedra” (3.500 TM en 1825 en los campos de Azerbaiyán y Sajalín). Entonces se destinaba el destilado petrolero a producir queroseno para iluminación y distintos tipos de grasas industriales. El aceite de piedra ha tenido utilidad desde la más remota antigüedad (ensamblar ladrillos, curtir pieles, impermeabilizar, encender antorchas, embalsamar, betún y remedio terapéutico). Comenzó a entrar en juego como recurso hacia finales del siglo XIX, ante el precio del aceite y la grasa de ballena, para la iluminación con queroseno, un producto intermedio entre las naftas y el gasóleo. Con el auge de los motores de explosión (desde la década de 1890) se comenzó a destilar gasolina y la historia ya ha sido un no parar. Los rusos fueron los líderes del negocio hasta que en 1870 John D Rockefeller fundó la Standard Oil que controlaba perforación, extracción, transporte, refino y distribución (primero en EEUU y al poco en el mundo entero). En 20 años, su compañía controlaba ya el 70% del mercado mundial de queroseno de iluminación… y se promulgó la Sherman Act para intentar controlar el monopolio que había creado. Para competir con la Standard Oil, en Holanda, unos británicos, de la mano la familia Rothschild-, fusionaron sus empresas en 1907 para crear la Royal Dutch Shell que explotaba el petróleo de Venezuela. Rockefeller siguió siendo el líder aun cuando fue obligado a solventar el monopolio de la Standard Oil y así fraccionó sus empresas y, por ejemplo, la Standard Oil of California se convertiría en Chevron, la Standard Oil of New Jersey sería Esso (“ess-o”, las iniciales de Standard Oil) o la Standard Oil of New York se convertiría en Mobil. Un caso significativo fue el de la Anglo-Persian Oil Company (APOC), empresa inglesa fundada en 1908 tras el descubrimiento de un gran campo petrolífero en el shahrestán iraní donde desde hace cuatro milenios llevaba ardiendo un pequeño cráter -Baba Gurgur- cerca de Kirkut. Poco antes de la Primera Guerra Mundial, los gerentes de la APOC negociaron con el primer lord del Almirantazgo, Winston Churchill, el suministro de petróleo para la Royal Navy que eliminaba los buques a carbón por petróleo como combustible y liberarse de su dependencia del suministro de las compañías Standard Oil y Royal Dutch Shell. El gobierno británico pasó a contralar la APOC, hoy British Petroleum.

[51] Las Siete Hermanas eran siete empresas petroleras que dominaban el sector, especialmente desde la IGM,  hasta principios de la década de 1960. The Seven Sister eran la Standard Oil of New Jersey (Esso), que al fusionarse con Mobil formó ExxonMobil; Royal Dutch Shell; Anglo-Iranian Oil Company (AIOC), origen de la actual British Petroleum (BP); Standard Oil of New York, luego conocida como Mobil, actualmente parte de ExxonMobil; Standard Oil of California, luego conocida como Chevron Corporation; Gulf Oil Corporation, que en 1985 fue absorbida por Chevron, aunque sigue existiendo como marca y Texaco, que fue absorbida por Chevron en 2001 y es actualmente una marca de dicha empresa. En 2008, The Financial Thimes actualizó la lista para el siglo XXI: Saudi Aramco, China National Petroleum Company, PAO Gazprom (Rusia), National Iranian Oil Company, Petróleos de Venezuela, SA (PDVSA), Petóleo Brasileiro, SA (Petrobras) y Petrolian Nasuional Berhand (Petronas) de Malasia.

[52] En 1900 en Estados Unidos había registrados 4.192 vehículos, de los cuales sólo 936 se movían con un motor de gasolina, 1.681 lo hacían con vapor y 1.575 eran eléctricos.

[53] Wilhelm Maybach (1846-1929); diseñador y empresario alemán, inventor del motor de gasolina y pionero de sus aplicaciones a vehículos. En 1883, Maybach creaba el motor “Standuhr”; en 1885, Maybach lo perfeccionó con un carburador que mezclaba gasolina y aire incrementándose las revoluciones a 900 por minuto. Ese año, el nuevo motor era adaptado a una bicicleta de madera dando lugar a la “Reitwagen” (coche hípico), la primera motocicleta de la historia. En 1886, Daimler y Maybach adquirían una diligencia Wimpff e incorporaban en ella un Standuhr de 1,5 CV (15 km/h). Al año siguiente, construían el “Neckar”, un bote motorizado de 4,5 metros de eslora que alcanzó los seis nudos (11 km/h). En 1889, produjeron su primer automóvil propiamente dicho (no adaptación de un carruaje), presentado en la Exposición Universal de París. Casi por completo diseñado por Maybach, el vehículo era de cuatro plazas y tenía un motor de dos cilindros en uve (1,5 CV y 600 rpm), ruedas de acero, chasis tubular, refrigeración por agua, volante de barra y un sistema de transmisión por engranajes y ruedas dentadas capaz de producir cuatro marchas. El nuevo coche causó sensación en París y pronto fue construido por empresas de Francia (Panhard & Levassor y Peugeot, 1890) y Estados Unidos (Stenway, 1891) y más adelante por las filiales de Daimler en el Reino Unido (1896) y Austria (1899).

[54] https://www.dgt.es/export/sites/web-DGT/.galleries/Images/notas-de-prensa/Primeros-Vehiculos-matriculados-en-Espana-1900-1964-Biblioteca-DGT-1008562.pdf

[55] Francia lo había hecho en 1924 (CFP, Compañía francesa de Petróleos) y trabajó con varios suministradores; Italia lo hizo en 1926 (AGIP, Azienda Generale Italiana Petroli) que también trabajó con varias compañías.

[56] La Nochebuena de 1992 se publicó en el BOE la Ley por la que se suprimía el Monopolio de Petróleos y se reordenaban las actividades del sector, tras 75 años de vida, insertándolas en un marco de libre empresa, aunque manteniendo un cierto componente de intervención pública.

[57] Su presidente, Torkild Rieber (1882-1968), americano de origen noruego, tenía una clara afinidad ideológica con el nacional-socialismo, lo que le animó a apoyar la causa de Franco.

A PROPÓSITO DEL FUTBOL… FEMENINO (y II)

Y… Es que en los años 20 -los Felices 20- coincidieron en el tiempo el auge de las deportistas femeninas y la más rancia reacción contra las prácticas deportivas por parte de las mujeres. Mentalidades de aquellos días y especialmente contra el fútbol femenino.

Aquí llegados, permítanme que haga un inciso -puñalada trapera, más bien, antes que se me olvide- que contra el fútbol hubo más de un posicionamiento en contra. En 1914 las Juventudes Socialistas de Langreo (Asturias, cuenca minera) calificaban en sus pasquines de “barbarie moderna” la práctica deportiva del “foot-ball[1]. Je, je… Pero el fútbol pasó de resentimientos y siguió practicándose tras la IGM.

De hecho, tenemos el caso de Irene González[2] -líder del Irene Foot-ball Club- la primera española que jugó con hombres. Lo hizo en 1920, bajo los postes y el travesaño, como gran portera, en una serie de partidos de exhibición de un equipo de veteranos coruñés.

Pero en el tema que hoy nos ocupa, el fútbol femenino -que desde aquellos compases iniciales de 1914 que truncó la IGM había sido olvidado-, contarles que regresó a Barcelona en 1923 con la disputa de dos partidos internacionales amistosos (Francia-Inglaterra) organizados por el Sindicato de Periodistas a beneficio de su promotora cooperativa de “casas baratas” -que no lo eran tanto-, algunas de cuyas ‘torres’ aún permanecen[3] en pie en Can Baró-La Salut y en la Font d’En Fargués. Jugaron francesas y británicas, pero no españolas.

Narciso Masferrer, fundador de ‘El Mundo Deportivo’ y factótum del deporte y el fútbol tuvo mucho que ver en este regreso del fútbol femenino, pero desde la revista ‘Stadium’ -que él también había fundado- se escribieron lindezas sobre el fútbol femenino de francesa y británicas de muy grueso calibre: “Hemos de confesar que el fútbol no se ha hecho para la mujer y que la mujer no se ha hecho para el fútbol[4]. Y sentenciaba el periodista (y abogado) que firmaba la crónica, Enrique Guardiola Cardellach[5], que “El fútbol es un deporte al que sin exagerar podríamos calificar de antifemenino”. ¡Jopé; vaya plan!

Me permito apuntar como descarte de tienta que cuando estas palabras destacaban negro sobre blanco estábamos atravesando los años veinte del siglo XX –en el apogeo del pistolerismo en España[6]– y ese era el ripio que repetían la inmensa mayoría de los varones y las más destacadas eminencias científicas del momento que, además, argumentaban en sus postulados que el deporte como fenómeno social se estaba consolidando en España[7].Resulta, dicen los entendidos, que entre 1920 y 1936 el fútbol en España adquirió todos los rasgos personales que hoy le caracterizan y sumó todas las cuestiones de masculinidad posible que arrinconaron la participación femenina.

Sí, algunas mujeres hacían deporte, pero… Resulta que hubo deportistas femeninas en aquellos años que también inscribieron sus nombres para el oropel deportivo en otras actividades que no fueran el balompié, pero fíjense: a los JJOO de París de 1924 inscribimos a cuatro mujeres -Isabel Fondorona, Mª Luisa Marnet, Rosa Torras Buxeda y Elia María González-Álvarez y López-Chicheri- y sólo viajaron a París dos; y tan sólo la condesa de Valdéne, conocida como Lilí Álvarez, acaparó la fama al conseguir el primer diploma olímpico para una deportista española.

Lilí se convertirá en una defensora a ultranza del deporte femenino, incluso en los primeros años del franquismo; en 1946 vio la luz su libro “Plenitud”, donde abogaba por la práctica del deporte y animaba a las mujeres a hacerlo.

Por cierto, en Amberes (cuatro años antes, en 1920, cuando la plata futbolera masculina) habíamos inscrito a Francisca Subirana y Carmen Róspide, otras dos tenistas… pero ni siquiera viajaron. Mucho de boquilla.

Y así pasaban los años y no será hasta 1928 cuando se dio carta de naturaleza, en Barcelona, el primer Club Femenino de Deportes; para hacerlo en Madrid habrá que esperar a 1935 y entre sus respetados miembros fundadores estarán la duquesa de Maqueda (afamada amazona), la condesa de Torrepalma (excelente patinadora) y la marquesa de Valdeolmos (gran esquiadora), junto a las jugadoras de criquet (deporte tan, tan, español) Pilar Carrión y Elisa Torres Quevedo. Caché y rancio abolengo.

Este país siempre tendrá un fallo en algo; por lo general en el cromosoma “ñ”.

Saltemos la década de los 30, que tuvo su arraigo deportivo que truncó la guerra civil y vivamos con intensidad las restantes. Antes, señalemos, en los años treinta se vive plenamente el desarrollo de un nuevo contexto socio-deportivo vinculado a la masificación de la cultura y de las actividades de ocio, lo que es muy significativo porque se sumó a la democratización de la vida asociativa de carácter popular. Es el caso del deporte obrero socializante de organizaciones como la Federación Cultural Deportiva Obrera (FCDO), próxima al Partido Socialista Obrero Español (PSOE)[8]. Y a esto sumemos la irrupción de la radio deportiva: en 1935 Radio Barcelona dedicaba ya media hora diaria a los deportes, de lunes a sábado, más un especial deportivo los lunes por la noche. Y eso construye afición.

Pero el conflicto paralizó el deporte español durante tres años, debilitándolo durante muchos más; cambió completamente las selecciones nacionales, los clubes de las distintas disciplinas e incluso las competiciones.

Acaba la contienda comienza un punto y aparte en la historia deportiva de España con algunos hechos trascedentes.

El nuevo régimen impuso una reordenación social que también recayó sobre deporte, pasando todas las prácticas un filtro. Incluso el Comité Olímpico Español tuvo que mantenerse en la clandestinidad al principio, ya que debía ser independiente y esa independencia no estaba en las premisas de los primeros gobiernos franquistas. Las organizaciones del Frente de Juventudes[9] para los chicos y la Sección Femenina[10] para las chicas tomaron el control de las actividades deportivas.

En un principio (1939), el deporte femenino fue visto con recelo desde el Régimen. Se determinó que las mujeres podían practicar baloncesto, tenis, natación, gimnasia, esquí y bailes regionales, con vestimenta moral. El balonmano se sumó en la primera revisión (1940), cuando se determinó que la Educación Física en las escuelas debía de hacerse con la ropa adecuada: bombachos, blusones y delantal para las tablas de gimnasia neo-sueca[11].

El atletismo tuvo un problema y terminó prohibiéndose por espacio de dos décadas. Una cuestión que tuvo como protagonista a María Torremadé, que desde bien joven destacó por sus marcas en atletismo. María había nacido en Barcelona en 1923 y desde muy joven compitió en atletismo, baloncesto y hockey sobre hierba. Era un portento por su fortaleza física. Entre 1940 y 1941, María, que competía con el equipo del RCD Espanyol, se proclamó campeona de España, con récord nacional incluido, de 100 metros (12 segundos), 200 metros (27 segundos), 800 metros (2’29.5”), salto de altura (1,42 metros) y salto de longitud (5,09 metros). Además, durante el campeonato provincial de Barcelona de 1941, batió el récord de Europa de los 60 metros, haciendo una marca de 7”71 décimas, quedándose solo a cuatro décimas del récord mundial.

Incluso María Torremadé jugó de guardameta en el equipo del SEU (Sindicato Español Universitario creado por la Falange).

Siempre sospecharon de ella en que era en realidad un hombre y, efectivamente, tenía síndrome de Morris[12] o condición de intersexual, que finalmente la hizo pasar por el quirófano y cambiar sus datos en el registro para pasar ser Jordi Torremadé. Debido a este caso, la Sección Femenina prohibió el atletismo femenino durante más de 20 años al considerarlo “masculinizante y poco femenino”. Y así lo mantuvo fuera de la órbita oficial hasta 1960.

Obviamente se siguió practicando, pero cerrándose la competición estas dos décadas perdimos el tren expreso que habíamos conseguido en 1931 con María Rosa Castellfort quien había certificado una marca de 11’8” en los 100 metros lisos. En 1960 la llamada “primera plusmarca nacional de los 100 metros lisos” es de 13’6” y la consigue María Luisa Consegal, una atleta sensacional, fruto del empeño de sus padres Luisa Oliveras y Miguel Consegal que no cesaron en la práctica deportiva en los años 50.

Las consideraciones del primer franquismo (1939-1959, el periodo autárquico)[13] lastraron la lógica y consecuente evolución del deporte femenino en general. La gimnasia y al deporte se enfocaron a la mejora de la salud para la maternidad. Es que, se consideraba que, la mujer atleta no podía ser el ideal de esposa para ningún hombre[14].

Tengo varias referencias de un librito -“Franco y el deporte femenino” (1942)-, del que fue autora María de Miranda y Huelín, que me hubiera gustado hojear. No doy con él. Menuda piedra filosofal para completar este Post.

Uno ya está curado de espanto y ha bebido en las páginas de “El proceso de incorporación al deporte por parte de la mujer española (1939-1985)” de Nuria Puig para tropezar con que en los años 50 se consideraron como deportes aptos para la mujer el tenis, el esquí, el hockey y el baloncesto. ¿Por qué? Pues porque Lilí Álvarez y otras destacadas deportistas aristocráticas que venían de antes impusieron su acertado criterio. Y aquí confirmo con sorpresa, como dije más arriba, que la Sección Femenina apadrinó el balonmano de chicas ya en 1940[15]. Pero nada del fútbol.

Por eso creo que, llegados aquí, con todo lo expuesto, ustedes ya están vacunados para lo de “horripilantes comienzos” del fútbol femenino en España, versión 1.0 Juan Díaz que señalé en el post anterior… cosas de un tierno mozalbete de 13 años que quedó terriblemente marcado por aquellas mamarrachas imágenes del mismísimo segundo día de Navidad. En mi tierra era tan festivo como el 25 de diciembre.

Que fue un 26 de diciembre de 1970 cuando en el campo del Rayo Vallecano y a beneficio de las guarderías del Patronato de Nuestra Señora del Socorro dieron patadas a un esférico, en lo que la prensa llamó “un divertimento benéfico” una serie de mujeres que triunfaban en la canción, el celuloide y las páginas del hígado: “folclóricas” contra “finolis”. Anoto aquí lo de que “todo lo dora un buen fin, aunque lo desmientan los desaciertos de los medios”, que como antecedente de la frase ‘el fin justifica los medios’ decía ya Baltasar Gracián, en 1647; y lo hago para insuflarme ánimos y poder seguir el relato.

Es que, verán, por el lado de las ‘folclóricas’, con camiseta del Real Betis Balompié (¡Vaya, por Dios!) estaban Lola Flores y su hermana Carmen, Gracia Montes, Rosa Morena, Marujita Díaz, Rocío Jurado, Conchita Bautista… Y por el de las ‘finolis’, con la equipación del Rayo Vallecano y pelos cardados, Encarnita Polo, Mara Lasso, Gisia Paradís, Luciana Wolf… ¡Térribol!

Sí, terrible espectáculo entonces -y ahora- pero que llenó las gradas… quizás más -permítanme que lo escriba, porque si me lo callo me puedo envenenar- más por ver a todas aquellas famosas de corto (que siempre se ha dicho) que por colaborar con la función benéfica. La Lola era mucha Lola (la Faraona, la Lola de España) y… leo que el partido acabó 1-1. Para más inri, el cantante Junior y el actor Juan Luis Galiardo hicieron de árbitros. P’a habernos matao.

Sí, porque tras el “éxito” de aquella puesta de corto de las futb0leras folclórica vs finolis no se le ocurrió peor cosa a Pedro Masó que aceptar su primer encargo cinematográfico y rodar en 1971 “Las Ibéricas Futbol Club”. Como no me sonaba haber ido a verla (con 14 o 15 años) y tirado de la Internet y he leído -en crónicas modernas- que fue “un truño como un puño[16], pero imagino que entonces triunfaría porque de dónde si no lo del hito del cine español que también leo. Una película con Rosanna Yani, María Kosti, Tina Sainz, La Contrahecha (Encarnación Pérez) o Ingrid Garbo, estrellas del momento, donde cada una de las jugadoras hacía partícipe al espectador de sus propios problemas personales y sentimentales por unirse al equipo de fútbol mientras convivían con un masajista sobón –José Sacristán, en el papel de Bonilla: “¡Morao, Bonilla! ¡Te vas a poner morao!”- y unos arquetípicos personajes -Fernando Fernán-Gómez haciendo de tarado marido celoso- que suman todos los tópicos machistas que puedan ustedes, ya en el siglo XXI, imaginar. Hasta Tip y Coll.

La escena final de Las Ibéricas FC es -¡cómo no!- una séxtuple boda en la Catedral de Almudena de Madrid… Muerto, me he quedado al visionar fragmentos para escribir esto.

Y ya, el colmo con otra cinta de celuloide: la película de Ignacio Iquino (1972) “La liga no es cosa de hombres” con Cassen, Margit Kocsis, Silvia Solar, Monika Kolpek, Judy Collins, Fanny Grey y Mary Santpere. Esta cinta es para no parar de llorar a lágrima viva; va de uno que “se infiltra” en un equipo de fútbol femenino. Aquí ya el truño no encuentra sistema métrico para reseñarlo.

¡Terrible!

Menos mal que antes que la Flores, el resto de las folclóricas y las muchas finolis se vistieran de corto sí se jugó en España, en diciembre de 1970, unos días antes del bodrio folclóricas-finolis, un partido de fútbol femenino de verdad al que apenas se dio cobertura mediática. Y podemos considerar que es el inicio del fútbol femenino (moderno) en España

También en Madrid, el 8 de diciembre de 1970, también festivo, en el campo de la Sociedad Recreativa Boetticher y Navarro S.A., la Sociedad Recreativa Villaverde Club de Fútbol posibilitó que se jugara, sin foco mediático, uno de los primeros partidos de fútbol femenino de nuestra reciente historia.

Rafael Muga[17], presidente del Mercacredit (que más tarde pasó a llamarse Olímpico Villaverde) empedernido promotor del fútbol femenino contactó con José María García[18], estrella de la radio deportiva, escribió a Samaranch[19] y recibió equipaciones para las chicas, y, finalmente, con el apoyo del diario As consiguió que ocho mil personas abarrotaron las gradas del Boetticher de Villaverde. Venció el Sizam por 5 a 1. Los cinco, leo, obra de Conchi Sánchez, aquella tarde rebautizada por los periódicos como Conchi Amancio[20] y [21]. Muga tuvo que pasar por el cuartelillo de la Guardia Civil al finalizar el encuentro… y no se hizo pieza de atestado ninguna. ¿Algo estaba cambiando?

A partir de ahí comenzó a visibilizarse el fútbol femenino gracias a los equipos que existían: Sizam, Mercacredit, Espanyol de Barcelona, Marcol de Valencia, Fuengirola, Isla Cristina, Peña Barcelonista Femenina… con los que ese mismo año se encarga Muga la primera selección española de fútbol femenino al tiempo que el seleccionador recibía, leo en El Español, el recadito, en forma de Saluda: “Rogamos se abstengan de promover toda actividad relacionada con el fútbol femenino por no gozar de aquiescencia de la Sección femenina del movimiento. Dios guarde a usted muchos años[22]. José Luis Pérez Payá, presidente de la Federación Española de Fútbol era contrario al fútbol femenino, pero atendiendo una recomendación de la UEFA -hasta 1980, cuando 15 países europeos tenían competiciones oficiales, no llegó la petición oficial de la UEFA- posibilitó la formación de un primer combinado nacional.

Y mientras se rodaba ‘Las Ibéricas FC’, el 21 de febrero de 1971 se disputó en el Estadio de La Condomina, en Murcia, el primer partido internacional de España ante Portugal, con el presidente de la federación murciana pidiendo que no entrara al campo y con el colegio de árbitros impidiendo a los colegiados salir con la zaína vestimenta reglamentaria. Así nos iba; así nos va.

Y así comenzaba a escribirse la historia de un deporte y una selección nacional oficiosa que disputó seis encuentros entre febrero de 1971 y diciembre de 1972 de la mano del Consejo Nacional de Fútbol Femenino -al poco ya Comité Nacional- que no era otra cosa que un paripé inventado a modo de organismo privado al margen de la federación. Y, como siempre, en el proyecto, el promotor deportivo Rafael Muga que siempre creyó en el fútbol femenino

A los pocos días del partido internacional en Murcia, en Almansa (Albacete), en un partido a favor de APROSU, la Asociación Protectora de Subnormales (entonces se decía así; hasta en esto hemos cambiado y hoy hablamos de discapacidad intelectual), se impedía, por los capitostes locales, el inicio del partido que iba a jugar la selección de Muga. El presidente de APROSU, con más reaños que los reaccionarios llamó directamente a El Pardo y habló con doña Carmen, que amadrinaba la asociación. Su “hagan ustedes lo que quieran y soluciónenlo, pero no me gustaría tener que decírselo a Paco” sirvió para los recalcitrantes locales dejaran que se celebrase el partido[23], lo que lleva a la periodista Andrea García a reseñar que Paco Muga concluyó: “Carmen Polo salvó el partido”. ¡Quien se lo iba a poder imaginar!: Camen “Collares” relanzando el fútbol femenino para no tener que decírselo a Paco. Me urge más que nunca dar cos ese libro de “Franco y el deporte femenino”.

En 1971 se disputó la Copa Fuengirola Costa del Sol de fútbol femenino; una de cal y otra de arena, porque las chicas del fútbol tuvieron que renunciar a su participación en el segundo Mundial de Fútbol Femenino (México 1971) por prohibición expresa de la Federación Española y de su presidente José Luis Pérez Payá.

El primer partido de la (furtiva) selección española femenina fuera de España en ese año de 1971 -donde las seleccionadas jugaron sin escudo en sus camisetas por desautorización expresa de la Federación Española- fue en Italia, que era entonces subcampeona del mundo. Y fue a lo grande, en el Comunale de Turín el de 15 de julio de 1971; y a la abultado, perdieron por 8 goles a 1 a favor de las italianas.

El futbol femenino siguió su tortuoso camino y por fin consiguió que se disputase la primera competición femenina de fútbol en España, la Copa de la Reina de 1981. Y siete años más tarde echó a andar la primera liga, en 1988. Y tuvieron que pasar otros treinta y un años para que las jugadoras firmasen su primer convenio colectivo y esperarse al 20 de agosto de 2023 para conseguir que se bordara esa primera estrella en un escudo que no pudieron lucir hasta 1983.

El fútbol femenino español es un claro ejemplo de lucha y tenacidad por salir de la clandestinidad deportiva y la desigualdad de género.


[1] J. Uría, Una historia social del ocio. Asturias 1898-1914, Madrid, 1996.

[2] Desde este año, 2023, se celebra en La Coruña la Copa Irene González Basanta, torneo internacional de fútbol femenino juvenil, promovido por el Ayuntamiento de La Coruña y organizado por el Orzán Sociedad Deportiva. Este es el primer torneo internacional en categoría juvenil femenina organizado en España.

[3] https://catxipanda.tothistoria.cat/blog/2020/05/07/els-habitatges-centenaris-de-la-cooperativa-de-periodistes-per-a-la-construccio-de-cases-barates-dhorta-per-dolors/

[4] Reseña publicada el 15 de junio en Stadium; obtenida en https://www.panenka.org/pasaportes/10816/

[5] Importante escritor, periodista y abogado muy vinculado en México autor, entre otros, de «La Anti-España», «El Rif en España» o «La paz en Europa y el porvenir de España». Con Ricardo de Alcázar, pseudónimo de Wenceslao Rodríguez, fundó en tierras aztecas «El Día Español» en 1918

[6] 1917-1923; que ya quisiera Chicago haberse parecido a Barcelona, por ejemplo. Y Hollywood sin enterarse

[7] Xavier Torrebadella y Antoni Nomdedeu en su trabajo sobre la popularización del fútbol en España: https://www.docsity.com/es/la-popularizacion-del-futbol-en-espana-analisis-del-fenomeno-a-traves-de-la-literatura-especializada-del-futbol-1920-1936/4687545/

[8] De atletas y soldados. El deporte y la Guerra Civil Española en la retaguardia republicana (1936-1939). Xavier Pujadas i Martí; pag. 93

[9] Organismo político-administrativo creado en España en 1940, como sección juvenil autónoma de Falange Española Tradicionalista y de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista. Con la evolución del franquismo, el Frente de Juventudes fue adaptando sus finalidades y su composición a las vicisitudes políticas del régimen; en noviembre de 1961 se cambia la denominación de Frente de Juventudes por la de Delegación Nacional de Juventudes, mucho menos beligerante, y en enero de 1970, una importante reorganización de la Secretaría General del Movimiento, máximo órgano político del Régimen, cambia su denominación por la de Delegación Nacional de la Juventud, con la que llega hasta el final del Régimen, en 1977. Los servicios y actividades que desarrolló el Frente de Juventudes fueron muy amplios y numerosos, pues cubrían además del ámbito educativo, el del tiempo libre, el de la cultura e, incluso, el de la información. En el de tiempo libre destacaron principalmente los torneos y competiciones de actividades deportivas, los campamentos y albergues, actividades culturales y de ocio como teatro, aeromodelismo, la sanidad escolar y empresas como la CAR (Cadena Azul de Radiodifusión), la Oficina de Viajes T.I.V.E. (Turismo, Intercambio y Viajes Educativos), la Red Española de Albergues Juveniles, la Red de Bazares Juveniles, y la Editorial Doncel, a través de la cual editó tebeos como Balalín (1957-1959) y Trinca (1970-1973).El soporte humano básico del Frente de Juventudes lo constituyó el Cuerpo Especial de Oficiales Instructores formados en la Academia de Mandos «José Antonio» (AMJA) de Madrid, titulados en Educación Física, Formación Cívico-Social y Campamentos.

[10] La Sección Femenina (SF) fue la rama femenina del partido Falange Española de las JONS, y posteriormente de FET y de las JONS. La Sección Femenina fue constituida en Madrid en 1934,1​ y llegó a funcionar durante cuarenta años, siendo disuelta tras la muerte de Francisco Franco y el consiguiente desmontaje del régimen dictatorial. Fue dirigida desde su nacimiento hasta su liquidación por Pilar Primo de Rivera, hermana del fundador de Falange. Impregnada su jefa nacional de un ferviente catolicismo, la rama femenina de la Falange adoptaría las figuras de Isabel la Católica y santa Teresa de Jesús como modelos de conducta y símbolos de su acción. En su momento, la Sección Femenina llegó a tener un poder casi monopolístico al constituir el único órgano femenino de encuadramiento y acción que existía en la dictadura franquista. Desde 1940 se crearon diferentes centros de formación (Málaga, Quinta del Pardo, Las Navas del Marqués) hasta la creación de la Escuela Nacional de Especialidades ‘Julio Ruiz de Alda’ de la Sección Femenina, instalada en la Ciudad Universitaria de Madrid,(…) fue desde su creación en 1956, el Centro Superior destinado a la formación del profesorado de Educación Física en sus diferentes niveles: profesora, instructora, monitora, etc.(…) Comenzó a funcionar en el curso 1957-58…Esta primera promoción realizó un Plan de Estudios de dos años de duración, que serían ampliados a tres, para sucesivas promociones.

[11] Pedro Enrique Ling introduce a principios del siglo XIX la gimnasia sueca para la formación corporal y postural bajo enfoque castrense. Su método es principalmente analítico. Contempla ejercicios variados ejecutados desde posiciones diferentes: de pie, sentado, tendido prono, tendido supino. Utiliza cuerdas, barras de suspensiones, escaleras de balanceos. Busca hacer al joven más resistente a la fatiga y de modelar el cuerpo. También se educa la precisión por medio de saltos, volteretas y movimientos de agilidad, y hay preocupación de una postura correcta y de la corrección de ésta, a través de los ejercicios. Con este tipo de gimnasia se ayuda a modelar el cuerpo y a prevenir futuros problemas, posturales, por ejemplo. Su hijo, Hjamar Ling, ordenó, sistematizó y divulgó el trabajo de su padre, estableciendo un nuevo orden en la clasificación de los ejercicios, los que seguían siendo estáticos y analíticos. Fue él, quien creó las “tablas de gimnasia”, que buscaban lograr un efecto correctivo de los ejercicios. A diferencia de su padre, quien enfocó la gimnasia a jóvenes y adolescentes en preparación militar, Hjamar Ling, lo trasladó al ambiente escolar, trabajando el principio de totalidad, en que cuerpo y alma son inseparables que es lo que se conoce como gimnasia neo-sueca.

[12] El síndrome de Morris, también conocido como Síndrome de Insensibilidad a los Andrógenos (SIA), es una alteración genética que afecta al desarrollo sexual del individuo. La persona nace con un sexo genético masculino (XY), pero su desarrollo y apariencia física es de mujer. El síndrome de Morris es considerado la tercera causa de amenorrea después de la disgenesia gonadal y de la ausencia de la vagina al nacer. es una forma de pseudohermafroditismo, se ha dado en algunos casos entre atletas. Son seres de apariencia femenina por sus genitales externos, tienen labios vaginales subdesarrollados y vagina ciega, es decir sin útero. La ausencia de órganos femeninos internos tiene por contra poseer testículos en la zona inguinal o en el abdomen. Tienen pies y manos grandes, carecen de vello axilar, vulvar y púbico y poseen mamas no muy desarrolladas con pezón rosado como los hombres.

[13] Tuñón de Lara, Manuel. (1980). Historia de España. Madrid: Labor.

[14] Enciso Viana, Emilio. (1945).”¡Muchacha!”. Pg. 132. (6ª Edic.). Madrid: Estadium de Cultura.

[15] Historia del deporte de las mujeres españolas (1939-1975): circunstancias de la participación en los Juegos Olímpicos de verano. Carmen María Pereda Peláez, 2017

[16] https://cineconn.es/las-ibericas-fc-si-esto-tambien/

[17] Rafael Muga (1945); seleccionador nacional de fútbol. Tras conseguir la titulación de Instructor Nacional de Educación Física y Deportes se vinculó al fútbol y en n Villaverde Bajo y fundó ‘Juve’, una agrupación deportiva de la que la actriz Concha Velasco era madrina. Fue el primer entrenador de la selección española de fútbol femenino y está considerado una importante figura fundadora del fútbol femenino moderno en España. TIENE ENTRADA EN WIKIPEDIA EN INGLÉS; NO ES ESPAÑOL, todo un detalle patrio.

[18] José María García Pérez (1943); periodista deportivo español. Está considerado uno de los locutores radiofónicos más emblemáticos e influyentes, marcando estilo, en la historia de la radiodifusión española. Inició su carrera profesional como reportero en 1963 en Radio España; en 1964 simultaneaba el diario Pueblo y TVE (Estudio Estadio). En 1972 ficha por la Cadena SER, siendo el precursor de la radio deportiva de medianoche en «Hora 25». En 1982 marcha a Antena 3 Radio con el programa «Supergarcía». Coincidí con él en esta etapa con 3 vueltas ciclista a España como director de emisora. En 1992, tras la compra por parte de PRISA de la emisora, pasa con su programa a la Cadena COPE en la que permanece hasta julio de 2000 cuando inicia un ambicioso proyecto audiovisual de la mano de Telefónica (Telefónica Media, Admira Spot). El 7 de abril de 2002, el locutor dimite de sus funciones.

[19] Juan Antonio Samaranch Torelló, I Marqués de Samaranch (1920-2010); empresario y político español. Entre 1980 y 2001 presidió el Comité Olímpico Internacional; en 1992 vio cumplido su sueño de ver celebrarse unos JJ. OO. en Barcelona, que había ganado su nominación en 1986 frente a candidaturas tan prestigiosas como Ámsterdam y París. Inició su carrera política como concejal de Deportes en el Ayuntamiento de Barcelona (1954-1962), organizando en dicha ciudad los II Juegos del Mediterráneo. En diciembre de 1966 fue designado Delegado Nacional de Educación Física y Deportes. El 18 de julio de 1973 fue nombrado presidente de la Diputación Provincial de Barcelona y cuatro años después, embajador en la Unión Soviética y Mongolia (1977), momento en que era ya vicepresidente del Comité Olímpico Internacional (COI), organización en la que había ingresado en 1966. En 1977, crea el partido Concordia Catalana.

[20] Concepción Sánchez Freire (1957); «Conchi» y «Conchi Amancio»; futbolista española, leyenda hoy del fútbol femenino español que abrió las puertas al profesionalismo. Fue la primera capitana de la Selección femenina de fútbol de España en 1971. Cuando tenía 15 años, en 1973, fichó por el Gamma 3 de Padua (Italia). En la liga italiana ganó varias ligas y copas jugando en diferentes clubes. En 1997, su último año como profesional, fue jugadora del Arsenal donde acabó su carrera deportiva. Llegó a marcar casi 600 goles.​ A los 40 años colgó las botas en el fútbol profesional. En 2010 creó una escuela de fútbol femenino, el ‘Filton College’ de Bristol (Inglaterra).

[21] Amancio Amaro Varela (1939-2023); «Amancio», futbolista español, jugador histórico del Real Club Deportivo de La Coruña y del Real Madrid Club de Fútbol y presidente de honor del Real Madrid desde el 2 de octubre de 2022. Campeón de Europa de clubes y selecciones y ganador del Balón de Bronce (1964), es considerado junto a Luis Suárez como uno de los mejores jugadores gallegos de todos los tiempos por palmarés y trayectoria. Lideró junto a Paco Gento la histórica generación de futbolistas españoles del Madrid C. F. de la década de los años 1960. No pongo algo del Real Madrid en este Post y me da algo chungo

[22] https://www.elespanol.com/reportajes/20230819/rafael-muga-organizo-primer-partido-futbol-femenino-final-llevaron-cuartelillo/787671590_0.html

[23] https://www.elespanol.com/reportajes/20230819/rafael-muga-organizo-primer-partido-futbol-femenino-final-llevaron-cuartelillo/787671590_0.html